...y rosas blancas para la tristeza🌹

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-Sólo quería decirles que lo lamento. Lamento no haber sido un buen hermano, que te apoyara y aconsejara en todo. Lamento no haber sido el hijo modelo que habrías esperado.

A Luhan se le dificultaba el habla, pero las palabras salían de su boca, palabras guardadas por mucho tiempo. Su madre le acariciaba el rostro, apartando los cabellos de su frente. Asegurandole que todo estaba bien.

-Ya estás con nosotros, todo estará bien.

Oh, el penoso anhelo de una madre...

Junmyeon no dejaba de ver la flor en la esquina de la cómoda. Minutos atrás, parecía más frondosa. Ahora los pétalos caían uno a uno, como si de una cuenta regresiva se tratase. Mientras tanto, los dos hermanos consolaban a su destrozada madre.

-No puedo quedarme...-Dijo apenas en un hilo de voz.-Pero estoy tan feliz de volver a ver sus rostros. Sehun, has crecido tanto...

Sehun trataba de esconder sus lágrimas con una sonrisa.

Diez pétalos restantes.

-Cuida bien de ella, ¿sí?

-Lo haré.

Nueve.

-Cuida bien de ti.

-Lo haré.

Ocho.

Luhan volteó la cabeza por fin en dirección a Junmyeon. Éste simplemente le dirigió una sonrisa amable. Sabía lo que era perder a un ser amado.

-Tu novio es lindo. Cuida de mi Sehunnie, ¿si? Por mí.

-No tienes que pedirlo. Estoy encantado de hacerlo.

Junmyeon posó sus manos sobre los hombros de Sehun, quien se encontraba de cuclillas ante la cama de su hermano, cubriendo los sollozos ahora incontrolables con sus brazos.

Cinco.

Luhan miró hacia la ventana. Los rayos de sol declinaban sobre el horizonte, el espectro de luz violeta y naranja adornando el cielo, leves rayos de sol viajando dentro de su habitación, brindando de color a tan triste escena. El rostro de Luhan se iluminó divinamente, sonriendo, posó su vista sobre la adorable criatura que hasta entonces lo había cuidado, la dulce Hada del Inframundo. Asintió con la cabeza.

-Es hora.

Después, rápidamente, sus ojos encontraron La Flor de las Hadas. Un pétalo se tambaleaba débilmente. Tomó entre sus manos, las manos de sus dos personas más queridas. Éstos lo miraron con lágrimas en los ojos, pero con la resolución de lo que estaba por pasar.

-Sólo necesitaba su perdón.-Una débil sonrisa se formó en su rostro, y su familia sólo pudo devolvérsela con devoción.-Ahora que lo tengo, debo irme.

-Los amo.

Y a la par del último pétalo cayendo, aquella preciosa sonrisa del joven, se difuminaba de su rostro, sus labios y demás facciones reposando por fin en paz.


~ 🌹~🌹 ~


El funeral se llevó debidamente, Junmyeon acompañó a Sehun y a su madre en todo momento, nunca apartándose del joven. Recibían a los parientes y a los amigos de Luhan con cortesía, Junmyeon estaba sorprendido por la manera tan correcta de actuar de Sehun, y el semblante tan serio que cargaba. Pero le atemorizaba que, terminando la ceremonia, todo el peso que cargaba, las emociones que guardaba, se desmoronaran sobre sus hombros, y que él no estuviera ahí para protegerlo.

Y así fue.


El último día que rindieron luto, Sehun y su madre le agradecieron infinitamente por su apoyo, por todas las flores blancas que él mismo proveyó para adornar el santuario de Luhan. Su madre dejó la mitad de cenizas, y se llevó la otra mitad consigo. Se despidió de Junmyeon y esperó a Sehun en el auto que los llevaría de vuelta a casa.

-"Tu flor".-Sehun le extendió La Flor de las Hadas, ahora, extraña y mágicamente, rebosante nuevamente.-"Creo que no funcionó."-Su voz se escuchaba tan apagada que rompía el corazón de Junmyeon.

Sin embargo, él siempre tendría una sonrisa para Sehun. Siempre.

-"Lo hizo. Les permitió ver a Luhan nuevamente y escuchar sus últimas palabras."

Sehun arqueó una ceja, incrédulo, pero claramente interesado.

-"Esa es su magia."-prosiguió.-"Te permite mantener con vida a alguien que aún tiene algo qué decir, pasar el umbral de la muerte y ver a los suyos."

-"Sólo hubiera deseado que se quedara... más tiempo."

-"Fue su decisión, Sehun."

-"Debo irme, Junmyeon. Te agradezco por todo. De verdad, por todo."

Junmyeon levantó ligeramente los dedos, tratando de alcanzarlo, pero Sehun ya le había dado la espalda. Reprimió las ansias por abrazarlo desde atrás, por retenerlo.


~ 🍂~🍂 ~


Llegó el otoño, y Junmyeon no tenía idea de dónde se encontraba Sehun. Había llamado tantas veces, le había dejado tantos mensajes, incluso había tocado a su puerta y nadie salía a recibirlo. Tenía la esperanza de que su madre saliera a decirle que él estaba bien, no importaba si no quería verle, con saber que Sehun se encontraba bien. Eso era suficiente. Pero pasó el otoño y los ojitos del conejito se apagaban cada día más. Una de las tardes en las que volvía a buscarlo, notó un cartel que decía "SE VENDE" frente a su casa. Su corazón se apretó contra su pecho, dolorosamente. ¿Por qué se había marchado sin despedirse?

Ahora se arrepentía, ¿por qué no le había dicho que le quería?

Les Fleurs du Jun🐰💐 ㅡ ㄴsehoㄱDonde viven las historias. Descúbrelo ahora