Será .Quien eres

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Narrador: Un tanto distante se encontraba jade que los observaba totalmente quebrantada, anhelando poder le, animarle y decirle que ella estaba viva y muy cerca de ellos, pero no era el momento y da media vuelta y con pasos lentos se dirige a la entrada donde arre costada a una columna llora en ese momento Iban el novio de Denia que iba llegando se  fija en su aflicción y es conmovido a misericordia  y se le acerca y le habla.
Iban: Señora está usted sola, mire necesita de ayuda, no hay nadie más con usted aquí.
Narrador: Jade se sentía muy débil, ver a Leroy le había impactado bastante, sus fuerzas se le agotaron y se desvaneció, Iban reacciona y la protege tomándola en sus brazos, jade fatigada se retira el pañuelo y las gafas y mira fijamente a aquel joven tan servicial y le da las gracias, pero el quedó totalmente sorprendido si no fuera por la diferencia de edad juraría que sostenía en sus brazos a Denia.
Jede: Gracias joven yo ya me siento mejor.
Iban: Señora perdóneme que la mire así ,es que usted parece  ser hermana de mi novia , si no supiera que ella es hija única , yo lo daría por sentado , es que más  la miro y más se le parece .
Jade: Dicen que todos tenemos personas que se nos parecen y ya ves tu novia parece ser quien se parezca  a mí, gracias una vez más y saludos a tu novia.
Iban: Esta segura que puede quedarse sola
Jade: Si joven gracias.
Iban: Bueno que este bien chao.
Narrador: En lo que se aleja no deja de voltear su cabeza  y mirarla, es que era extremadamente igual a Denia y así llega donde estaban  todos  y los saluda y aun impresionado comento lo sucedido.
Iban: No lo van a creer acabo de ayudar a una señora que se sentía muy mal, y que impresión me lleve cuando ella se quitó el pañuelo.
Denia: Que te asusto.
Iban: No más que susto fue asombro, miren saben que dicen que tenemos un doble, pues yo vi allá abajo tu doble Denia, la mujer que socorrí  prácticamente al no ser por la edad, juraría que eras tú,  increíble.
Leroy: Que fue lo que dijiste, tu estas seguro de su parecido con Denia, me puedes decir dónde y que tiempo ase
Denia: Que te estas imaginando papá,  crees que sería posible
Gustavo: De que hablan.
Claudia: E y Leroy no le hagas eso a tu hija, calmante tu estas desesperado y puedes confundir las cosas.
Leroy: Si tienen razón, estoy muy tenso, enseguida regreso voy a respirar aire, en cuanto terminen con Rebeca  llámame.
Narrador: Gustavo y Claudia se miran y haciendo gestos con los hombros descansan en Dios y cuando él se va, se acercan y en susurros se hablan.
Claudia: Que vamos hacer y si se encuentran.
Gustavo: Que sea y pase lo que Dios quiera él tiene todo el control esperemos solo en él.
Narrador: Leroy camina por el corredor de la sala de urgencias , cabizbajo totalmente desconectado , sale a las afueras del hospital al  levantar su mirada un tanto a lo lejos ve aquel rostro que lo deja anonadado ,era su amada  pero el queda tan desconcertado que no logra reaccionar , en esos momentos  Jade levanta su mirada al sentirse observada y por breves minutos sus miradas se juntaron , era un cuadro de amor y pasión ,Jade reacciona y en el momento que él se pasa las manos por su rostro lleno de lágrimas ,  ella entre la gente se escurre y se va , cuando el vuelve a levantar su mirada y se percata que ya no estaba , sale corriendo sin dirección de un lado hacia el otro ,  sin  hallarla y recostándose a la columna del cuerpo de guardia ,agachando su cabeza llora ,en eso Gustavo lo llama .
Gustavo: Leroy ya han terminado con    Rebeca.
Leroy: Voy, oye Gustavo creo que voy a tener que atenderme yo con ese médico, amigo ahora si sé que yo estoy muy mal, muy mal de verdad.
Gustavo: Porqué estas diciendo eso que te ha ocurrido.
Leroy: El tema es que fíjate si yo ya estoy mal que figúrate a quien pretendo yo que acabo de ver increíble, Dios me estoy volviendo loco.
Gustavo: A quien, que has visto.
Narrador: Leroy no podía contener sus lágrimas esa imagen había quedado grabada en su mente, esa mirada tan dulce y a la vez tan triste, lo perturbaba y Gustavo le daba palmadas de consuelo y a la vez en su interior se arrepentía en su interior.
Gustavo: Cuanto lo siento mi amigo, como quisiera ponerle un punto y final a tu angustia pero no puedo Dios sabe que no puedo perdón.
Leroy: Te has quedado muy callado y pensativo acaso tu sabes algo que yo no.
Gustavo: Perdonadme amigo perdóname, como quisiera ayudarte pero no puedo aunque lo desee perdona hermano, perdóname.
Narrador: Se dan la mano y caminan hasta la consulta para hablar con el médico,llegando Denia les habla.
Denia: Papa el medico nos ha informado que la abuela puede regresar con nosotros a la casa, que está perfectamente bien solo necesita de mucho amor.
Doctor: Le explicado a la paciente que se debe quedar por un tiempo con ustedes pues debe mantenerse acompañada previendo cualquier recaída, ella ha entendido por el proceso que paso y esta agradecida por sus cuidados, verdad que usted se va a esforzar por su bienestar.
Rebeca: No solo por mi bienestar, también amo mucho a mi nieta aunque he estado muy distante y eso tiene que cambiar, debo agradecerle a Dios que me permitiera aunque sea tener a mi nieta creo que eso es suficiente, y aunque haya perdido una hija no dejo de reconocer que Leroy se ha convertido en más que mi yerno en un hijo y eso es grandioso no se preocupen creo que todo va a estar bien ya lo verán.
Narrador: Todos se alegran y se abrazan y se van de regreso a su hogar, todos salen del hospital y en la avenida esperan el ómnibus, de lejos la persona más añorada por ellos los observaba, Jade solo no puede contener sus lágrimas cuando por más de quince y dolorosos años no avía podido ver a su madre y su hija que solo la reconocería por el parecido  con ella y piensa.
Jade: Dios mío, o Dios mío mi madre, como ha envejecido aunque todavía se ve muy elegante cuanto quisiera abrazarlos y mira que hermosa, que linda mi bebe, mi niña cuanto a sufrido, y mi amado, mi amado Dios mío que duro es todo esto no se si pueda aguantarme los deseos quisiera correr hacia ellos, que ago., que hago Dios mío líbrame de mi misma y hazme pensar con sabiduría ayúdame señor por favor
Narrador: Ya cuando no podía contenerse y se disponía a cruzar la calle en dirección a ellos el ómnibus llego y el tráfico no le permitió pasar así vio como ellos se iban pero su amiga con pretextos se quedó para apoyarla en ese duro y difícil, ella cruza y abrasando a su amiga le habla.
Claudia: Calmante, amiga cálmate, no era el momento Dios sabe lo que permite él es justo y sabe tu  aflicción pero también es muy sabio, solo él tiene todas las respuestas, calmante solo calmante.
Narrador: Era tanto su dolor que llora a gritos y entre sollozos le habla.
Jade: Que duro es todo esto ni siquiera sé cómo me pude sostener, no se a donde yo iré a parar con tanto  dolor, cuanto los amo cuanto anhelo abrazarlos, hay Dios mío necesito del amor de mi madre, deseo y anhelo hablarle a mi hija y sabe Dios cuanto quisiera refugiarme en los brazos de Leroy, como quisiera estar en sus vidas y que  saber fuerte que para ellos, no soy más que un enigma, ya no, ya no puedo más.
Claudia: Déjame abrazarte y puedas sentirte apoyada tu no estás sola Jade, ten paciencia que todo se va arreglar.
Narrador: Al llegar a su casa Leroy entra su cuarto y serrada la puerta se lanza a la cama y llora como un niño cuando se ve perdido y en una vos muy baja le habla al señor.
Leroy: Señor que hago, por favor ayúdame a fortalecerme y acabar de acertar que ya es evidente que está muerta, por mucho tiempo me he engañado mí mismo tanto que él tiempo ha pasado sin que yo me percate, he sentido tanto dolor he vivido en tanto tormento que me he olvidado que yo estoy vivo y no he logrado salir de la sombra del sufrimiento y las interrogantes, ayúdame por favor Dios a vivir nuevamente, ayúdame.
Narrador: Denia que pasaba y siente el sollozo de su padre  lentamente  entra y con mucha compasión le habla luego de escucharlo hablar.
Denia: Papito, padre, papá que, que tienes, porque dime porque sufriste tanto solo y en silencio, cuanto quisiera pasar de ti tanto dolor , hoy me he dado cuenta , que siempre has estado para mí , he podido ver lo valiente que has sido , te amo mucho papa y haría todo lo que pudiera para que fueras feliz.
Leroy: Gracias mi hija, gracias mi niña, te prometo que me esforzare para continuar, por ti, por tu abuela y también por mí intentare dejar atrás tanto sufrimiento.
Narrador: Tocan a la puerta y Rebeca abre, pero no logra reconocer a Laura y a Ester ya que ellas llegaron a su vida en medio de su pérdida de  memoria.
Laura: Hola como se siente señora Rebeca.
Ester: Rebeca te hemos traído un dulce de leche muy rico.
Rebeca: Hay por favor pasen, perdóneme mi asombro, lo que pasa es que por momentos no las reconocí, creo que es normal después de lo que me paso, ya  he logrado recobrar la memoria y seguro por eso me costó reconocerlas pero como olvidar tanto cariño.
Narrador: Ellas no entendieron bien lo que estaba hablando  y Ester se le acerca a Gustavo y le habla entre tanto Laura conversa con Iban.
Ester: Que le paso de que está hablando.
Gustavo: Lo que sucede es que por el mediodía la señora Rebeca tuvo una ligera mejoría pero acabo recordando solamente el peor momento de su vida.
Ester: De que me hablas, que fue tan grabe en su vida.
Laura: Oye Iban, porque hay tanto silencio en este lugar ha pasado algo con Denia, ella está bien verdad.
Iban : La cosa es que la abuela recobro la memoria y todo parece indicar que habían algunos secretos ocultos para Denia que tuvieron  que revelar , la situación es fuerte , ella nos necesita ahora más que nunca , hablando así no vieron a Rosa , ella es una buena compañía en estos momentos para Denia apartándote a ti claro .
Gustavo: Es verdad, tu no conoces toda la historia de ellos, mejor  luego disimulamos un poco y en el portal te cuento, ahora no es prudente.
Ester: Si está bien.
Laura: No, no la hemos visto y es tan grave la situación.
Iban: Lo que alcance a oír es que su mamá, realmente no está muerta y que para Denia, esto ha sido un golpe duro, eso hablaban muy discretamente Gustavo y Claudia.
Laura: Tremendo eso es fuertísimo, pero si no está muerta donde está.
Iban: No lo sé pero cambiemos el tema, mira a Denia.
Denia: Laura hola como estas
Laura: Bien hemos venido a visitar a tu abuela y les hemos traído un dulce de leche sabroso, sin especulaciones a mi madre le queda exquisito deja que lo prueben, lo van adorar.
Iban: Sabias que tú tienes el, espérate como tú dices.
Laura: El don.
Iban: Eso, el don del pregonero es la persona que hace que sientas el sabor del producto antes de probarle yo ya me saboreé el dulce.
Narrador: Ellos sonríen y caminan hacia el patio, Rebeca se para y va al  cuarto y quedan Gustavo y Ester solos en la sala.
Ester: Gustavo me dejaste pensativa y muy preocupada, es que se cuánto dolor lleva esa muchachita y pensar que ahora se le ha sumado algo mas es de preocuparse es tan joven para tantos problemas, lo mejor de todo esto  es que el señor ha tocado su corazón y está trabajando  con ella.
Gustavo: Mira, esperaré déjame ponerme de frente a los cuartos y así veo si alguien viene, aquí está mejor, mira la esposa de Leroy, la madre de Denia, ella no está muerta, ella realmente está viva y muy cerca de ellos.
Ester: ¿Que?
Gustavo: Tranquila es una historia muy larga solo préstame atención sin interrumpirme el hecho es que (..............) así es como toda sucedió estás de acuerdo conmigo que todos son inocentes hoy que en esta historia el único culpable es el diablo.
Ester: Si no supiera que eres un hijo de Dios y que la verdad está en ti, diría que estás loco o eres un gran mentiroso, pero bueno lo que me has dicho es aterrador, Gustavo tú crees que la pueda conocer me gustarle ser parte de la restauración de esta familia.

Cuando Dios Toca A La Puerta Donde viven las historias. Descúbrelo ahora