¿Acaso había regresado para atormentarlo?
Aún están intactos esos momentos donde sintió terror por ese muñeco que le había puesto por nombre Yoon, recuerda todas las veces que se metió bajo sus sabanas temiendo que Yoon apareciera bajo ellas y le hiciera daño.
Todo ocurrió meses antes de que su madre se lo regalará a la señora Park, cada día fingía jugar con su muñeco y contarle su día a día, pero en la oscuridad de la noche temía por su salud mental, debido a esas constantes pesadillas que se presentaban y su madre temía que fuera algo más.
Esos ojos cristalinos que lo miraban desde su sitio y lo observaba de pies a cabeza era la causa de que sus labios temblarán y en el día descargará su ira contra él.
Recuerda como esas manos de porcelana tocaban su cuello y rasguñaban su piel, su madre jamás entendió porque su hijo llevaba siempre consigo una bufanda alrededor de su cuello, su excusa era debido al frio.
Ahora Jimin es su dueño y no puede hacer nada mientras el menor esta presente, desde ese día las pesadillas han vuelto nuevamente.
Ha deseado incontables veces ir y tomar a ese muñeco que tanto daño mental le provoco y así dejar de recordar todo el trauma que vivió cuando tenía 7 años.
Muchas veces quiso hablar, pero nadie le creería que un muñeco intentaba dañarlo y mucho menos que "Yoon" tenía vida.
—Me volveré loco—se dijo a si mismo acostado sobre su cama.
Ese día había quedado con Jimin, desde hace una semana no lo ha visto y se sintió mal por dejar al menor solo conociendo que su amigo no estaba aún del todo bien.
Lo ha dejado solo con un muñeco que probablemente le ha hecho lo mismo que a él le hizo cuando era pequeño, temía que Jimin también estuviera callando para que nadie lo tachará y al final terminar en un hospital psiquiátrico.
Por lo que tomando sus cosas se dirigió a la cafetería donde el rubio lo había citado.
Cuando finalmente llegó logró divisar a Jimin en las mesas que estaban junto a la ventana y con una sonrisa comenzó acercarse; sin embargo su sonrisa se borró al ver a cierto muñeco junto al menor.
—Jungkook—habló Jimin invitándolo a sentarse.
—Hola ¿porqué trajiste a ese muñeco?—preguntó ocultando su enojo.
—Se llama Yoongi, lo tengo desde que era pequeño, fue el último regalo que me dio mi madre, por eso lo cuido como si fuera un tesoro—dijo tomando al muñeco entre sus manos—él me ha acompañado en todo momento y por eso lo traje, no me ha dejado solo, aunque no lo creas quiero a Yoongi.
—Que ridículo, como puedes querer tanto un muñeco que ni siquiera tiene vida, es solo porcelana malgastada.
La sonrisa de Jimin se desvaneció y sus ojos que anteriormente brillaban ahora se han vuelto oscuros, tomó a Yoongi y sin decir una palabra se levantó de la mesa y salió de la cafetería.
—Jimin—llamó Jungkook siguiéndolo.
—¿Que quieres?—pregunto aún dándole la espalda.
—Solo te daré un consejo, deshazte de ese muñeco—dijo viendo como Jimin seguía su camino.
El rubio abrazo a Yoongi y comenzó a llorar, en toda su vida nadie le había cuestionado el tener en su posesión a un muñeco y mucho menos por la edad que tenía, siempre le habían dicho lo hermoso que era Yoongi y que deseaban tener un muñeco con esas facciones tan reales que poseía.
Jamás pensó que Jungkook reaccionaría así al ver a Yoongi, no entendía porque había dicho algo tan hiriente, por lo que solo camino hasta llegar a su casa.
Nuevamente se encontraba solo con Yoongi en brazos, deseando algo imposible y limpiando las lagrimas que anteriormente habían bajado por sus mejillas.
Ahora era consciente que su único acompañante siempre fue Yoongi, ahora lo ve como lo mas hermoso que existe, un muñeco inigualable de un valor inimaginable.
Esta vez no dejaría que nadie hable mas de él, lo protegería a toda costa y no permitirá que Jungkook vuelva a decir cosas tan desagradables de su muñeco.
Probablemente estaba perdiendo la cordura, pero era inevitable no sentir una conexión especial y extraña a la vez con él.
Por su parte Yoongi comenzó a sentir nuevamente esa extraña sensación en su pecho, cada vez que Jimin se acercaba a él o lo abrazaba tenía una necesidad de tenerlo así, como si su vida dependiera de ello.
No sabía si era amor lo que por primera vez en muchos años estaba experimentando de nuevo, poco a poco su corazón se ablandaba por el menor y ahora mas que nunca deseaba volver a ser un humano normal, dejar de estar atrapado en un muñeco que no puede hacer nada por ese ser que solo le ha traído luz a su vida.
Luego de años de no sentir ni una pizca de empatía o amor nuevamente se abría a un nuevo comienzo, Jimin le había demostrado cuanto amor le tenía y eso le daba una señal que su destino podría cambiar.
Ahora observa como el menor duerme plácidamente y con la respiración tranquila dándose cuenta lo hermoso que es y como su corazón da sus primeras palpitaciones.
Con cautela se acercó y observo a Jimin por unos segundos, estaba seguro de que era el ser mas bello que había visto en su tiempo de vida y no dejaría que más sufrimiento se acumulará en el corazón del menor.
Por lo que antes de volver a su posición normal deposito un beso en su frente y pidió un deseo esperando que este se vuelva realidad algún día.Gracias por leer ♡
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El chico porcelana [Yoonmin]
FanfictionJimin un chico dulce y de gran corazón tiene como posesión un muñeco de porcelana llamado Yoongi, un regalo de su madre antes de dejarlo con su abuela. Yoongi un joven rebelde un dia pide un deseo sin imaginar que este se haría realidad,ahora es un...