El Caso Mahone (Camren)(Editando)

Capitulo 12: Gato Encerrado (Parte 3)

Dinah temerosamente abrió los ojos pues esperaba que haya sido todo nada más que una pesadilla pero para su mala suerte no fue así.

¡Por un demonio! ¡Sigo en este mugriento lugar! -reclamo Dinah fastidiada levantándose del suelo entre gruñidos, la polinesia miro la mesa observo que el papel que horas antes había lanzado al suelo se encontraba nuevamente en su lugar original- ¿No te das por vencido verdad? -dijo ella en voz alta a Siope esperando que la oyera por algún lado- Lo leeré ya que esta más que claro que eso es lo que quieres que haga, pero al igual que tú también quiero hagas algo por mi y bastardo miserable me digas el porque me trajiste aquí cuando pensé que te habrías ya olvidado de mi -Dinah corrió la silla y se sentó en esta reposando ambos brazos en la mesa y sosteniendo la nota con ambas manos- Bien, aquí voy supongo -dijo Dinah soltando un suspiro y comenzando a leer en silencio la primera línea más con cada palabra sus facciones comenzaron a revelar solo ira que poco a poco fue más difícil de controlar ella soltó la nota sin importarle a donde esta caería y se levanto de golpe de su sitio para luego proceder a lanzar la mesa provocando que el ruido del metal estrellándose contra el cemento violentamente llenase inevitablemente la habitación.

¡Mal nacido! ¡Miserable sin escrúpulos! ¡Cerdo! ¡Pendejo! ¡No puedo creer que te prestaste a tremenda asquerosidad! ¡Ojala estés quemándote en el infierno! ¡Espero seas una cucaracha asquerosa en tu próxima vida y yo tenga la fortuna de pisotearte! ¡Te mereces la muerte que tuviste por trabajar para tan trastornado ser! ¡Y esa maldita arpía! ¡Cuando salga de aquí la quemare en un palo como la bruja que es! -grito Dinah caminando furiosamente por toda la habitación con el rostro rojo sumergido en ira pura mientras apretaba los puños en su cabellera respirando rápidamente. 

Ella se sentó en el piso luego de tranquilizarse apoyando su cabeza contra la pared y cerrando los ojos pensando en su hija y su novia; pensando en que debía si o si salir de ahí por su cuenta porque no había forma de que después de que le hayan dado esa información la dejen ir sin más. 

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¡Oficial Lovato! -dijo Cece tratando de llamar la atención de la oficial, pues este parecía estar marchándose de la jefatura posiblemente a almorzar ya que era hora de su descanso. 

¿Dra. Frey? ¿Sucede algo? -dijo Demi girando y acercándose a ella para verla directamente.

Así es, termine los exámenes de reconocimiento de la ropa que traía Austin Mahone el día de su fallecimiento y encontré algo que podría interesarle -dijo Cece entregándole la carpeta con los resultados y el informe completo de las pruebas hechas personalmente por ella- Al parecer los golpes que tuvo en el rostro causados por alguien con anillos en las manos fueron realizados por su socia Lauren Jauregui -dijo Cece mientras la oficial Lovato veía las fotos- Pude determinar eso ya que se hirió los nudillos al golpearlo y unas gotas de su sangre mancharon su camisa, por suerte su ADN se hallaba en la data por una denuncia de agresión física a Austin quien después de una semana quito sin motivo aparente.

Eso explicaría por que no encontramos otra relación más que la de socios con Jauregui, es posible que hayan hecho un arreglo para quitarlo de sus antecedentes y su historial, ¿Eso vendría a ser todo verdad? -pregunto la oficial leyendo algunas de las páginas del informe.

Lamentablemente no, en la camiseta también pude encontrar una huella de sangre hecha por un zapato pero no uno común para ser precisa -dijo Frey señalando otro de los puntos de su informe- este zapato es un Stuart Weitzman original y este modelo en especial fue exclusivamente diseñado para cuatro personas. La primera es Delphine Arnault, la vice presidenta de Louis Vuitton; la segunda es Alessandra Ambrosio, una de las modelos más conocidas del momento; la tercera es la actriz Lily Collins, su padre se los regalo como regalo de cumpleaños y por último Camila Cabello la ex-prometida de Austin y por lo que me entere la nueva prometida de Jauregui -dijo la forense soltando un suspiro mientras que por la cabeza de Demetria solo pasaba una cosa.

¿Acaso fue este un crimen pasional?