ROOKINITE "Te Amo Mi Rooky"

Declaración 3/3

Pov Infinite

Estaba cansado, sentía que mi cuerpo no podría resistir un minuto más, pero por alguien debía de ser fuerte, estaba sumiso ante el dolor que producían mis heridas, mis orejas se alzaban ante los gritos del erizo azul, mi vista se volvía borrosa en cortos segundos, me costaba tener una imagen clara de lo que pasaba mientras luchaba con mi respiración que poco a poco se regulaba, agradecía no tener al peli-azul golpeándome hasta aturdirme, pero era preocupante lo que ocurría, poco a poco mi vista se aclaraba, podía observar a Rookie montarse a las espaldas del erizo azul, era de temer cuando este se movía con brusquedad, y sabía lo que planeaba.

Levantarme estaba costandome mucho esfuerzo sin que el cuerpo me doliera por un segundo, la cabeza me daba vueltas, me sentía mareado y un fuerte dolor de cabeza me obligó a quedarme quieto, perdí fuerzas en mis piernas, las manos me temblaban, deseaba levantarme pero el dolor era terrible en ese momento, me quedé entre rodillas apollandome con ambas manos en el suelo para recuperar el oxígeno que exigían mis pulmones... Rookie ayudaba demasiado... Pero todo puede cambiar en tan sólo un Segundo. Sabía que debía levantarme, por lo que hice mi mayor esfuerzo para hacerlo, pero, me detuve cuando mi mirada quedó fija en ellos dos.

Sentí impotencia cuando Rookie fue arrojado contra el piso con brusquedad, mi pecho se oprimió en ese momento, ignoré el dolor en mi cuerpo cuando llegaron a mis oidos un doloroso quejido, la mochila que portaba en su cintura había sido arrancada y botada, había una impotencia que recorría mi cuerpo en ese momento, todo transcurrió de manera lenta,
Cuando menos lo noté... El estupido erizo azul atacó a Rookie quien con trabajo buscaba ponerse de pie, sentí mis palpitaciones acelerarse con terror, no supe ni el momento en que mi cuerpo olvidó el dolor, ni siquiera cuando ataqué a Zonic quien se hallaba sobre el suelo a una distancia memorable mientras alcanzaba a sujetar de la mano de Rookie con tiempo al caer de la barandilla, lastimando mi pecho y mis heridas por la fuerza, el peso y la posición.

Roo: Zero... Por favor... Sueltame

¿Qué pensaba Rookie en ese momento?, solo me atreví a pensar que era estúpido, era ese momento donde anhelaba escuchar sus ánimos, pero al contrario, parecia entregarse a su propia muerte, yo ya tenia mi decisión, no lo soltaría, ni por mas loco que estuviera, no lo soltaría, le debía muchas cosas, estaba en deuda con él, hizo tantas cosas por mi sin que se lo pidiera, no iba adejarlo marchar tan fácilmente.

Infi: !No!... ¡No Pienso Soltarte!... ¡NO VOY A DEJARTE MORIR!... ¡YA TE LO DIJE!... ¡TENGO GRANDES DEUDAS CONTIGO Y NO VOY A DEJARTE IR FÁCILMENTE MOCOSO!.

Estaba asustado, molesto y confundido, nunca antes me había atrevido a preocuparme tanto por alguien, pero Rookie era alguien especial para mí, habían ventajas si aceptaba dejarlo ir. Pero no estaba seguro, un gran río amortiguaría la caída pero, me preocupaba la profundidad del río, la fuerza de las aguas, y lo mas importante... La pierna herida de mi pequeño pelirrojo y si no sabía nadar, tantas cosas pasaban por mi diminuto y torpe cerebro, estaba al tanto de todo, mis orejas se movían conforme a los sonidos y los pasos rapidos que hacían los zapatos contra los escalones de metal junto al sonido de las armas ser preparadas y listas para impactar, sentía tanta impotencia que mis mejillas se humedecían con la frustración por las lágrimas que empezaban a salir.

???: INFINITE THE CHACAL... PONGA LAS MANOS DONDE PUEDA VERLAS

No podía creerlo, no podía, mis orejas se apegaban contra mi cráneo, escuchando a perfección los quejidos del erizo azul a mis espaldas.

Zo: sacrificar tu vida para salvar a un niño... Aagh... Eso es patético

Roo: Zero

Quería concentrarme solo en Rookie, era imposible no hacerlo cada que buscaba llamar mi atención, su voz era suave y quebrada, sus labios pronunciaban palabras con un tono bajo que pudiera transmitir tranquilidad, pero no funcionaban en mí, a pesar de que intentara calmarme, solo lograba frustrarme... Solo quería irme, quería sacarlo de ahí, mis lágrimas hacian presencia una vez mas, estas caían mojando mis mejillas una y otra vez, quería mirarlo a los ojos, encontrar su dulce mirar, una mirada que me expresara que todo estaba bien, pero solo me hacían sentir terrible al ver sus brillantes ojos llorosos por las lagrimas.