La marca de la desesperación

Leia

-Leia, no cree usted que deberíamos preocuparnos.
-Para que, Anthony no podrá salir.
-¿Por qué estás tan segura de eso?
-Porque yo misma lo selle. Además en el hipotetico caso que lo consiguiese estaría muy débil.
-No estoy de acuerdo-una voz alegre y alocada sonó de la nada. Provocando que tanto Luciano como yo diesemos un salto
-Joder que susto avisa cuando vallas a entrar, Rodrigo.
-Perdón, mi señora. - se arrodillo clavando una pierna en el suelo, siendo honesta me daba cierto corte.
-¿Porque dices que no estás de acuerdo?
-En quien se ha reencarnado... No alguien de quien tengamos que no temerle.
-¿Como osas hecharle en cara a la señorita Leia?
-Tiene razón. Yo misma lo he comprobado. Esa chica... Consiguió que tuviese que ponerme seria. Dime tu a mi cuando fue la última vez que me enfade. Primero finji ser su abuela, y consegui sacarle una foto, pero mirad, no...
Saque una foto de la cámara que llevaba colgada en el cuello. La encendí y puse la foto de la chica.
-¿Que MIERDA es esto?
-Ni yo lo entiendo-negué con la cabeza
En la foto aparecía una chica con la parte derecha pelo corto y liso, ojo verde, piel pálida, y su lado izquierda tenía un ojo azul zafiro, pelo corto rizado amarrado en una coleta de la cual salía un cuerno, su piel casi tan pálida como la leche... Y en lo alto de su frente un ojo rojo rubí que miraba al frente, era perturbador
-Esa chica va ser muy difícil de atrapar. - Rodrigo me dio una idea
-Ella será la canviaformas.
-Leia, ni usted puede cambiar su apariencia, y es ella quien porta a Anthony. Debería ser la última en atrapar.
-Necesito una foto de los 7 y solo me faltan 2, primero quiero encontrarlos a todos después será tan sencillo como desmarcarlos a todos
-¿Desmarcarlos?
-Claro. Cada uno de ellos nació en un día 21,por lo cual cada ellos tiene un signo del zodiaco distinto. Sólo he de averiguar cuál y ya.
-¿Para hacer esa fórmula que hay que hacer?
-Cojer su piedra del zodiaco y hacer una poción, las cuales estoy terminando de preparar.
-Permitame ser yo quien le haga la próxima visita. - me rogó Lucho
-Esta bien, pero recuerda, no hagas nada peligroso y NO te acerques a esta chica. Puede borrarte del mapa solo con estar respirando.
-De acuerdo... Por si no la vuelvo a ver - se acerco a mi cara, tanto que pude notar su respiración, y me dio un beso en la mejilla 
-Luciano, Rodrigo. ¡Sois los mejores!
Abos se sonrojaron, pero... - podéis dejarme sola,por favor.
-Esta bien - dijeron al unísono, al ser gemelos no me estraña.
Al salir cerré yo la puerta, sabía que haría menos ruido. Me senté en la primera silla que vi. Saque de mi bolsa la cajita de música que me regalo Anthony. El me prometió muchas cosas, pero... Aún no entiendo como fue capaz de traicionar a todo el mundo.
-Antho, eras en el único que llegue a confiar. Me acojiste... Como pa olvidarlo.
                     Flashback

-¿quién es esa chica?
-No lo sé. Dicen que sus padres renegaron de ella.
-Solo es una ladrona que no tiene a dónde volver.
-Mirad es el futuro dios Anthony el Afortunado. ¿Que hará aquí?
-Tu-dijo señalando a la niña--acompáñame . A partir de ahora vivirás conmigo
-Disculpe mi intromision, pero...
-Nada de peros prefiero manzanas. He decidido que esta niña será mi próxima hechicera
-¿Como? ¿He oído bien? Ese cargo es el segundo más importante que dios. ¿Esta seguro?
-Esta niña es perfecta. Traedla, creo que no quiere cooperar por las buenas.
-Ssoltadme, se caminar por mi misma
-Bien no eres muda por lo que parece, - dije intentando que se riese, y al conseguirlo-. Así me gusta
Fuimos por el camino más corto, pero:
-¿Que hace? - dijo la chica, se había puesto roja y rígida. Los guardias alarmados por el grito se giraron en nuestra dirección
-¡Adios!-dije y desaparecí junto a la ladrona
-¿Donde estamos? ¿Que quiere de mi?
-Primero dime tu nombre
-Leia. - dijo desafiante
-Bien Leia. Te voy a ofrecerte ser mi hechicera.
-No me lo creo. Según he escuchado los dioses solo pueden escojer a un o una hechicero\a durante todo su reinado. Y me está diciendo, usted, el "Gran" Anthony el Afortunado que me quiere a mi una vulgar ladrona que no tiene donde caerse muerta. ¿Donde está el truco?
-No lo hay. ¿Acaso me niegas que tu tienes conocimientos de brujería? ¿no eres la bruja Neko?
-¿Pero como?
-Clarividencia
-¿Y no me ha detenido aún sabiendo que soy yo?
-Me gusta tu estilo, así que no. Acepta, venga
-Acepto... - dijo casi en un susurro
-¿Qué no te he escuchado?, me aseguraré de que está vez lo digas bien alto-con mi telequinesis la eleve a lo alto, y la amenaze con soltarla al suelo.
-¡ACEPTO! - grito Leia desesperada.
-Así me gusta--dije bajandola.
-Chantajista- susurro, aún así la escuche
-¿decías?
-No nada, nada de nada.

       Fin del flashback

-Cabron no podía haber seguido todo así. Y pensar que me llegue a... Enamorar de ti.
-No he desaparecido.
-Eh, ¡¿eh?!
-En el espejo. - mire al espejo de la cajita de música y allí estaba - ¡Cuanto tiempo mi querida hechicera!
-No... Tu estabas sellado-dije intentando convencerme a mi misma
-Lo sé. Solo puedes verme por el espejo. Pero no me niegues que he habas de menos mi preciosa cara.
-¿que quieres? Habla o romperé el cristal
-Se que me quieres destruir. Al fin alguien que quiere matarme.
-Pues... Si - seguro que el noto la poca convicción de mis palabras
-Déjame decirte una cosa. Hice lo mismo que hice contigo.
-¿Como?
-Salve la vida de estas 7 pobres personas, les devolví su alma a su cuerpo... Con un poco de mi alma. Así que si no los destruyes a los 7 no me matarás del todo.
-¿Por qué me dices esto?
-Por el hecho de que no te voy a permitir que me mates, no una segunda vez
-No...¿ Me dejaras matarte.?
-Es algo más complejo
-Me parece bien, así podré matarte con mis propias manos.
-Leia, me permites decirte un dato sin importancia respecto a uno de mis marcados.
-Adelante-dije poco convencida sobre lo que fuese a soltarme, ya era raro que me fuese a soltar información
-Has fotografiado a 5 de 7 ¿no?
-¿si?
-Jajajah uno de ellos es insomne, no podrás fotografiarlo, me gusta jugar con ventaja, así que te daré una pista. Alexia. Para que veas que buena gente soy, es un nombre importante. Recuerda lo
-¿Alexia ?
-Recuerda, te puedo ver por los espejos, ah, y no te molestes en romper este, no lo conseguirás. ¡Adiós! Mi querida hechicera
Después de decir eso desapareció.
-Luciano, Rodrigo. Venid ¡YA!
Poco después de decirlo aparecieron
-¿Que ocurre mi señora? - dijeron l unisono
-Esto es una orden directa, no hagáis preguntas : destruido todos los espejos menos la puerta de las afueras.
-Desde luego. Ahora mismo mi señora
-Leia, estas haciendo lo correcto. - dije en un suspiro.
- ¿Estas bien, Leia?
-No... Pero... Gracias por venir tan rápido. - les diré lo importante sin incluir la discusión con Antho- mi clarividencia me ha dicho que uno de los marcados es insomne, pero he visto que se llama Alexia
Lo último no lo dije del todo convencida me tendría que haber cayado un poco .
-¿Ha visto como es?
-No, últimamente no veo cosas claras, lo siento,por ser tan inútil.
-Disculpenos a nosotros, en fin nos vamos a destruir los cristales.
-Gracias-dije fingiendo alegría. Maldito Anthony, ¿porque siempre que le veo mi corazón da un vuelco,? Quiero decir yo no estoy enamorada de él, y dudo que el lo esté de mi, es más creo que en lugar de amor me tiene odio, casi ansias asesesinas. En realidad no se porque le seye
El siempre confío en mi, incluso me dio una vida y yo le encerré en una de sus marcas. Solo lo hice por ¿codicia, desilusión, o tal vez frustración? Lo hice por mi bien, nunca me importaron los demás, menos Anthony, el fue quien me enamoró una vez y creo que esta volviendo a pasar. Por ahora decidí abrir la caja de música y pensar en el, pensar en mí nombramiento y también en lo que supuso en cerrarle, ser el dios de la muerte