FAN SERVICE (Yibo x Zhan)

ACTUACIÓN

Adivinen quién leyó un capítulo de la novela que se menciona aquí y terminó leyendo de nuevo casi todo... JAJAJA. En serio amo Mo Dao Zu Shi. Ah, me encantan. Ahora sí, a leer.

ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ ღ

La señora Xiao resultó ser una excelente anfitriona. Wang YiBo no podía recordar la última vez que había sido tratado tan bien en una casa que no fuese la propia. La madre de Xiao Zhan le sirvió bastante comida y amenizó el momento contando bastante anécdotas de su hijo cuando éste era pequeño y se metía en problemas. 

Xiao casi se ahogó con el agua ante todo lo que su madre decía, no podía ser que lo estuviese avergonzado de aquella forma frente al menor. Si no hubiese extrañado tanto a YiBo seguramente habría preferido verlo hasta la siguiente semana, pues realmente se sentía avergonzado con todo lo que el chico estaba aprendiendo sobre él. Yibo simplemente se echó a reír mientras comía los deliciosos platillos que la madre de su amigo había preparado especialmente para su hijo. Menos mal que la comida era abundante o se habría sentido mal por llegar de sorpresa a la casa contraria.

—Mamá, basta —rogó Xiao en medio de un suspiro—. Yibo no tiene porqué saber esas cosas.

—¿Por qué no, cariño? —Cuestionó su madre en tono divertido—. Son cosas que ocurrieron cuando eras niño, además son muy graciosas.

—¡Mamá!

—Déjala —comentó el chico aún con su risa suave—. Está bien, señora Xiao, puede continuar. Realmente me agrada su conversación.

—¡Aish! ¡Wang Yibo! —Se quejó el mayor como niño pequeño mientras se doblaba ligeramente sobre la mesa y lo golpeaba con ambas manos justo en el hombro.

Yibo por su parte se carcajeó tratando de esquivar a su amigo.

—¡Xiao Zhan! —Le llamó su madre—. Esas no son formas de tratar a un invitado. 

Realmente la señora Xiao no estaba molesta, pues sonrió al pronunciar aquello, al tiempo que se detenía detrás de Wang Yibo y con su mano sobaba ligeramente justo donde su hijo había golpeado.

—Lo siento tanto, mi niño. Este hijo mío que no tiene educación.

—¡Mamá! —Se sorprendió Xiao abriendo la boca con incredulidad, mientras Yibo mantenía su risa y hacía un ligero mohin dejándose consentir por la señora—. Te recuerdo que yo soy tu hijo, ¿sabes?

—Por eso te tienes que comportar, ya no eres un niño.

—¡Él tampoco lo es!

—Es más pequeño que tú, así que aún lo es. Mejor sigue comiendo, anda, anda.

—¡Sólo le llevo seis años!

—Come, gege, come —sonrió divertido Yibo acercando el plato a su amigo—. Vamos, hazle caso a Mamá Xiao.

Xiao Zhan arrugó la nariz y aprovechando que su madre no le veía le mostró la lengua al menor mientras ambos se golpeaban de nuevo, pero tan pronto la señora Xiao regresó fingieron comportarse.

—¿Deseas algo más, Yibo? Aún hay comida

—Muchas gracias, señora Xiao, todo ha estado delicioso, mas me temo que he comido suficiente.

—De acuerdo, de acuerdo. Cualquier cosa que necesites sabes que puedes pedírmelo. Esta es tu casa.

—Gracias, gracias —agradeció sinceramente haciendo una ligera reverencia mientras Xiao Zhan miraba sorprendido la escena.