babysitter | norenmin

Capítulo 11

Fue inusual.

Renjun entró al departamento de Chenle usando la llave de repuesto que le dió el menor y encontró todo en silencio, algo bastante extraño, a decir verdad.

Estaba acostumbrado a escuchar gritos por todos lados causados ​​por Jaemin y Jeno que escuchar completo silencio era extraño para él. Aunque siempre era así. Chenle probablemente no estuviera en el departamento o estaría viendo una película con Jisung en su habitación. Los dos eran ruidosos pero solo en algunos momentos. No como Jeno y Jaemin que solo gritaban y discutían en cualquier momento del día.

—Oh, hola hyung —Jisung saludó con la mano al chino, quien solo se quedó ahí parado—. ¿Hyung?

—Jisung —Y Renjun acertó. Si Jisung estaba ahí, entonces él y Chenle podrían haber estado viendo una película. O sino, entonces podrían hacer estado haciendo lo que hacen todos los chicos hormonales, Renjun esperaba que no lo estuvieran haciendo—. ¿Y Chenle?

Jisung señaló la puerta de la habitación de Chenle. —Llorando porque Hans traicionó a todos.

—¿Estaban viendo Frozen? —Renjun colocó sus maletas en el sofá mientras veía sospechosamente a Jisung.

—Chenle dijo que no nos dejarías ver Cincuenta sombras de Grey, así que...

—¿¡Qué!? —Renjun quedó boquiabierto—, ¿cómo demonios sabes qué esa película existe?

—Hermano, somos estudiantes universitarios. Ya no somos tan inocentes —Jisung dijo, concentrado totalmente en el refrigerador que acababa de abrir. Ni siquiera se dio cuenta de que acababa de llamar a alguien mayor que él hermano.

—¿Hermano? ¿Qué acabas de decir Park Jisung?

—Hermano... —Jisung se dio cuenta de lo que acababa de decir y le dio al mayor una sonrisa tímida—, hyung.

—Jisungie, ¿por qué tardas tanto? Frozen acaba de terminar —Chenle salió de la habitación, frotándose los ojos—, rápido, antes de que Renjun ge regrese, veamos cincuenta sombras-

En ese momento se encontró con la dura mirada del mayor.

Chenle tragó saliva, —Cincuenta sombras de arcoíris y mariposas.

—¡Zhong Chenle! —El mayor tacleó al menor cuando se volteó para correr hacia la sala.

Jisung sacó tranquilamente algunas cosas del refrigerador para que Renjun les preparara el almuerzo. Aún no habían comido, ya que ninguno de ellos sabía cocinar y Chenle no quiso pedir comida porque Renjun llegaría para hacerles de comer.

Tomó una bolsa de doritos que encontró por ahí y la abrió, comiendo mientras observaba a los dos chinos peleando en el sofá. —Vamos Chenle, yo te apoyo.

—¡Ayúdame pollo! —El chino menor estaba dejando escapar ruidos de delfín.

—Hasta que terminé estos doritos —Jisung rió—, hasta entonces hyung, por favor no mates a mi novio.

—Oh, vas a ver Cincuenta sombras de Red antes después de que termines esos doritos —dijo Renjun.

—¡Ge, lo siento! —Los primeros segundos habían sido de Chenle riendo, pero ahora las lágrimas caían de sus ojos y eso hizo que Renjun se detuviera. El chino mayor se sentó en el sofá con una sonrisa satisfecha.

—¿Qué tanto hicieron desde que me fui?

Chenle no tenía la energía para responder. Solo estaba mirando el techo ya que podía sentir como su alma salía de su cuerpo. —Si sigo así me van a salir cuadritos.