VI

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—¿Aún no hay rastro de ella? —

No era como si le importara demasiado el hecho de que Yennefer no se encontrará por ningún lado, sabía que era a ella a quien Geralt buscaba, lo supo desde un principio, ¿a quien más si no?, ella era la hechicera más poderosa en todo el continente. Aunque aún se preguntaba quién le había lanzado esa maldición a Geralt y con qué motivo.
Sentía una fuerte presión en el pecho, no quería encontrarla, la odiaba con todas sus fuerzas; quería que desapareciera de su vida.

—¿Geralt? —preguntó, sin embargo el lobo parecía tener la cabeza y la nariz ocupada en rastrear— claro... Ignorarme...—susurro— eso sí que lo sabes hacer bien.

El lobo había escuchado eso perfectamente, sin embargo en eso captó el olor familiar de Yennefer, su instinto inmediatamente fue aullar y comenzar a correr, debía hacer que ella le quitara la maldición; Jaskier merecía una disculpa de verdad.

—¡Hey!,¡Geralt!, ¡no me dejes! —grito mientras tomaba las riendas de Sardinilla para cabalgar más rápido, pero incluso a la yegua le costaba seguirle el paso al brujo, contando también que Geralt era muchísimo más ágil.

Intentó seguirle el paso tanto como pudo, pero conforme el bosque de fue haciendo más denso no pudo ver más la mancha blanca que había estado identificando como Geralt, dejó de avanzar y miro de un lado a otro intentando encontrar al brujo por alguna parte, pero no había ni rastro.

—¡Geralt! —grito con todas sus fuerzas, escucho el eco de su voz resonar entre los árboles y a lo lejos unos pájaros revoloteando saliendo asustados, quizá por su grito— ¡Geralt!... ¡Demonios! —gruño comenzando a cabalgar con Sardinilla de forma tranquila.

Ese estúpido lobo, lo había abandonado de nuevo y de nuevo por ella, apretó las riendas de Sardinilla a la par que mordía su labio inferior, de nuevo se sentía patético, ¿creía que por haber compartido un lindo momento en el río ahora Geralt le tenía algún aprecio?... Por supuesto que no. Pero aún con todo, no podía dejar de sonreír cada vez que recordaba lo divertido que había sido jugar con el lodo y el agua; ojalá todo pudiera ser así de perfecto todo el tiempo. Sin ella metiéndose en su camino.

—Es un tonto ¿verdad Sardinilla? —preguntó acariciando a la yegua mientras continuaba su camino.

Estuvo unos cuantos minutos cabalgando en línea recta mientras gritaba el nombre de Geralt esperando que este le hiciera caso, sin embargo no sucedió y poco a poco su ánimo fue decayendo; era impresionante como una simple acción de Geralt podía levantarlo o derrumbarlo hasta tal punto, por eso lo odiaba y lo odiaba mucho.
Cuando menos lo noto estaban, tanto él como Sardinilla, en un claro del bosque, donde lograba entrar el sol y las copas de los árboles no eran tan espesas, ahí tan solo había césped verde y fresco, además de algunas rocas grandes con algo se moho y flores pequeñas de color blanco, lucía como un lugar bastante apacible donde nada malo pasaría, quizá debía esperar ahí a Geralt, a ver si se daba cuenta en algún momento que tanto él como Sardinilla no iban detrás de él.

—Idiota —susurro mientras iba a sentarse a una roca cercana, tomando su laúd y comenzando una melodía bastante tranquila.

Geralt por mientras continuaba corriendo por el bosque siguiendo aquel olor tan característico de Yennefer, estaba cerca, cada vez lo sentía más intenso con cada paso, no podría seguir corriendo por siempre.
Gruño; había desaparecido, maldita hechicera.
No podía enojarse como el quería por mucho que se esforzara, miró al rededor buscando al bardo y fue entonces que se dio cuenta de que no estaba, si fuera humano hubiera soltado una expresión de fastidio, ahora no sabía dónde había ido a parar, ni siquiera sabía que tan lejos estaba o en donde se habían separado, había estado tan concentrado en seguir el aroma de Yennefer que ni siquiera se había dado cuenta; y algo en eso lo hizo sentir culpable, se sacudió para así comenzar a olfatear, encontrando su aroma muy rápido; por esas zonas no solían crecer narcisos y mucho menos limoneros, además de que también podía reconocer el aroma de Sardinilla.

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