La caída de Ashcorp

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El almacén estaba lejos de mí, tardé dos horas en llegar, estaba agotado, y era la una de la madrugada, pero no me podía detener por eso. Encontré el lugar, tenía las ventanas tapadas y rotas. Entré por una de ellas, dentro estaba todo el ejército de androides, pude notar al que rastreamos, pero no parecía haber ningún humano y todos estaban apagados. Me acerqué a uno de ellos, no reaccionó, lancé un fuerte golpe contra su abdomen, y se movió más rápido de lo que pude ver, agarró mi brazo y me aplicó una llave china, sabía cómo quitármela: tomar su brazo e inclinarme hacia adelante con fuerza. Lo sostuve, pero el androide era más fuerte que yo y no me permitió inclinarme. Me giró hacia otro lado, Charles estaba ahí.
—Me ofendes si piensas que no sabía que vendrías —dijo acercándose lentamente—. Jayden y yo vulneramos el software de estas máquinas, hemos trabajado con ellas desde que escapamos, ¿Y aún así crees que no íbamos a saber lo que pasa si uno de ellos se secaba y oxidaba de un momento para otro? —Le hizo señal al androide para que me soltara—. Pero debo admirar tu voluntad, creí que sólo llamarías a la policía, sin embargo viniste hasta aquí, es algo de admirarse. Te daré la oportunidad de terminar lo que viniste a hacer —dijo poniendo guardia y endureciendo su piel.

Retomé el aliento, Charles estaba esperando un golpe, era una trampa, pero no tenía indicios de querer golpear primero. Distraerlo era mi única opción.
—¿Todo esto lo haces sólo por Troy Ashford? Él los lastimó a ti y a Jayden, pero ustedes dos también lastimaban a los demás, ¿No te das cuenta?
—Deberías agradecernos, gracias a nosotros tienes esos poderes y te has vuelto famoso.
—Yo nunca los quise, y aunque fuera así, lo que han hecho nunca será bueno —Charles lanzó un ataque, tomé su brazo y golpeé con fuerza su codo, no se rompió.
—Un empresario corrupto e inhumano... —Se dio la vuelta rápidamente y me ahorcó desde atrás—... que secuestra personas con el fin de hacerse más rico, él es el verdadero enemigo —aplicó menos fuerza al asfixiarme—. Y hablando de personas secuestradas, tu amigo lo fue, ¿Dónde está ahora? Supongo que te habrá encargado a su familia, ¿Cómo vas con eso? —forcejeé con las últimas fuerzas que me quedaban— ¿Qué te parece si les hacemos una visita? Jayden, prepara todo, vamos a ir a dar un mensaje.

Un androide me tapó la cara con una bolsa y, con mis manos hacia el frente, las amarró, me metieron a una camioneta y comenzaron a moverse en pocos minutos. La radio estaba prendida, el conductor cambiaba constantemente las frecuencias para escuchar a varios noticieros, hasta que se detuvo para escuchar correctamente uno de ellos.
Troy Ashford se encontraba en Monterrey hace unas horas durante las manifestaciones en la ciudad contra su compañía, después de que el justiciero conocido como Eagle Warrior lo fuera a enfrentar, fallando en el intento, los dos desaparecieron y están ahora mismo en un avión privado de Ashcorp dirigiéndose al Estado de México de nuevo.
¿Oíste eso? —preguntó Charles por la radio, Jayden respondió afirmativamente desde el asiento del conductor—. De acuerdo, tú dirígete a la casa, cuando termines, nos vemos en los laboratorios.
—Está bien, regresa al almacén para que lleves a las tropas —dijo Jayden—. Sirve que la araña no tendrá a dónde ir.
—Los detendré a los dos, no conseguirán dar un mensaje de ninguna manera.
—¿Qué te hace pensar eso? —dijo mientras reía—. Literalmente te hemos derrotado todas las veces que nos hemos enfrentado, ¿Crees que ahora será diferente?

Me sentía exhausto e impotente, no veía nada y no estaba seguro de qué iba a pasar. Me acosté y cerré los ojos. Después de un rato, nos detuvimos, Jayden bajó del vehículo, abrió la puerta donde iba yo y me jaló hacia afuera de la camioneta. Comencé a forcejear para liberar mis manos mientras él me dirigía. Nos detuvimos y lo oí patear una puerta, derribándola, escuché los gritos de la hermana menor de Brandon y Jayden comenzó a disparar hacia arriba.
—¡Escuchen, el hijo de esta familia, antes de irse del estado, le encargó a este joven que los cuidara, ¿Alguien me puede decir cómo le fue con eso?! —El lugar quedó en silencio, sólo oía a las hermanas de Brandon sollozar y a su padre tranquilizándolas—. No puede ser —me dio una patada en la pierna, haciendo que cayera de rodillas. Apliqué más fuerza contra las cuerdas, mis muñecas ardían—, sé que ustedes lo conocen, su hijo es su mejor amigo —me quitó la bolsa y luego la máscara, aflojé la cuerda en mi brazo izquierdo—, al parecer, nuestro camarada tenía mejores cosas que hacer en vez de cuidar a la familia de su mejor amigo, que seguramente iban a estar siendo vigiladas por Ashcorp —seguían sin hablar, sin mi máscara comenzaba a tener problemas para enfocar mi vista—. ¿Nadie aquí sabe hablar? —disparó su arma cerca de la familia de mi amigo. Mi mano se podía deslizar hacia afuera de la cuerda, pero mi pulgar estorbaba su salida—. La niña más grande, ven para acá —dijo apuntándole con el arma, la hermana mayor se acercó lentamente—. Tú serás la primera que recibirá el mensaje —le puso el arma en la clavícula derecha—. Para que conste, si no fuera por Ashcorp, esto no habría pasado —coloqué mis brazos alrededor del cuello de Jayden y tiré de ellos antes de que disparara.

Spider-Boy 0.5: Un nuevo héroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora