Dos almas, un mismo camino.

Ojos que no ven...

Notas:
¡Hola!
Que tal?
Un capitulo casi diario!
¡Esto amerita muchos comentarios!
¿No les parece?
¡Gracias por leer!
 

 La mujer de cabellos azulados estaba apretando muy fuertemente a Sakura mientras reía de felicidad por tenerla ahí.

-Mikoto-san. –Susurro la chica totalmente morada por falta de aire.

-Mamá, la estas asfixiando. –Comento Shisui quien bajo de un salto de las escaleras.

-Después de esto ten por seguro que jamás volverá a venir. –Se burló Fugaku.

-¡Oh! Querida, lo siento. –Se disculpó Mikoto mientras la soltaba.

-No se preocupe. –Dijo mientras se inclinaba un poco para recuperar el aliento.

-Mamá. –Hablo Sasuke. –¿Le puedes preparar? un caldo de pollo a Sakura, es receta del doctor. –Dijo mientras le daba un receta la cuál contenía una lista de comidas y otra lista de medicamentos.

-¡Enseguida! –Dijo mientras corría a la cocina.

-Un gusto verte de nuevo. –Dijo Fugaku mientras extendía los brazos para abrazarla.

-El gusto es mutuo, Fugaku-san. –Dijo mientras aceptaba el abrazo.

-Pero valla que has crecido. –Alego Shisui mientras corría a su padre y la abrazaba él. –Ya pareces una chica.

-Gracias Shisui, tú aún sigues pareciendo una babosa. –Bromeo

-¿Qué? –Gruño mientras se separaba de ella. -¿Sabes? Sigues siendo un chicle.

-Y tu un fanfarrón.

  -Al menos no tengo el cabello rosa.

-Al menos no tengo cara de idiota. –Dijo mientras le sacaba la lengua.

Todos los varones comenzaron a reír menos el mencionado.

-Olvídalo Shisui, te mato con eso. –Hablo Itachi mientras le daba un ligero abrazo a la chica. –¿Y ese milagro que estas aquí?

-Nada más, para saludar un rato.

-¿Y qué es eso de la receta médica? –Pregunto Fugaku

-Lo que pasa es que esta mujer se esta muriendo. –Dijo Sasuke mientras soltaba un bufido.

-Claro que no. –Replico ofendida.

-El doctor dice totalmente lo contrario.

-¡Vamos! Sasuke estoy perfectamente bien. –Refunfuño.

-Esto dice totalmente lo contrario. –Dijo mientras le enseñaba unos papeles los cuales se los arrebato el señor Uchiha y comenzó a leer.

-Te odio. –Dijo la chica mientras le mandaba una mirada fulminante al moreno, este solo sonrió de costado al ver a su papá leyendo.

-Valla. –Dijo Fugaku mientras doblaba el papel. -¿A caso no sabes que existe algo que se llama comida y agua? –Pregunto mientras tocaba la cabeza de la chica y revolvía su cabello. –Valla que te has descuidado en este tiempo.

Sakura no pudo hacer otra casa más inflar los cachetes y mirar el piso. ¿Cómo responder o argumentar con unas personas a las cuales conoces desde el día en que naciste?

-Vamos pasa. –Hablo Shisui mientras la jalaba de la mano y la guiaba a la sala. –Tenemos tantas cosas de que hablar. –Dijo mientras arrastraba a la chica por toda la casa.

-Claro…

-Si se ve que estamos hablando. –Susurro la pelirrosa quien traía un control de la consola de videojuegos en manos, ya que los tres hijos Uchiha y ella estaban jugando un videojuego de carreras de coche.