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    Volvimos a la "recepción" y Rose se sentó en su asiento y volvió a prepararse para terminar el formulario.

- Bueno Viviane, querida, ahora que te hemos explicado todo recuerdas como... llegaste hasta aquí. – me dijo Rose con una amable y reconfortante sonrisa.

Ahora que sabía que estaba muerta intentaba. con todas mis fuerzas recordar lo que había pasado. recordar como morí. Pero por más que intentara no recordaba nada de forma concisa, solo pequeños fragmentos que no lograba ordenar.

Cuando me explicaron que estaba muerta comencé a recordar esos pequeños fragmentos. Veía imágenes de mi vida que, si lograba recordar, pero cuando se acercaban al final, a mi final, se volvían turbias y no lograba recordar nada. Solo algunas pocas imágenes comprendía, como la cara de un guapo chico que parecía tener mi edad, una gran ventana y una luz resplandeciente, tanto que de solo verla me cegaba, era como si estuviese viendo el sol.

Les explique eso mismo a Albert y a Rose.

- Recuerdo las cosas más básicas- empecé – mi infancia, mis padres, lo que hacía todos los días. – dije con una pequeña sonrisa llena de nostalgia. – pero...- mi sonrisa fue desapareciendo poco a poco. - ...no recuerdo a mis amigos, si tenía muchos o pocos, tampoco recuerdo como morí. Solo logro recordar pequeños fragmentos. – gruñí sintiéndome insuficiente. No iba a lograr irme de aquí si no recordaba nada.

Albert se dio cuenta de mi lucha interna y me tranquilizo, o intento hacerlo, ofreciéndome una cálida sonrisa.

- No lo fuerces Viviane, tus recuerdos vendrán a ti con el tiempo. A veces cuando nos obligamos a recordar es más difícil hacerlo. Por qué no intentas describir esos pequeños fragmentos, te aseguró que te ayudara. –

Asentí en su dirección y tomé una gran bocanada de aire, si es que un muerto puede hacer eso, se las describí.

Les describí como veía la cara de un chico, evitando decir que me sentía atraída a él. También describí la gran ventana, que parecía estar en piso lejos, muy lejos del suelo, y la intensa luz que me cegaba.

Rose lo escribió todo y cuando termino se levantó y tomo los papeles diciendo que iba a hacer una copia del formulario para dármela, porque eso me ayudaría a recordar.

- ¿Que pueden significar esas imagines? – le pregunte a Albert mientras Rose volvía de hacer la copia.

- Pueden significar muchas cosas. Pueden tener que ver con como moriste o no. Por ejemplo, el chico que mencionaste puede ser que haya sido uno de tus amigos...- sonreí ante ese pensamiento... - ... o puede ser tu asesino, si es que te asesinaron claro. Dijo el con un tono divertido. Yo lo mire horrorizada, ya no podría ver como un lindo chico por su culpa.

- No digas eso. – me cruce de brazos molesta y el solo se quedó allí riéndose de mi actitud. – lo digo enserio. – lo mire muy molesta esta vez. Sabía que me estaba comportando como una niña pequeña, pero me sentía mejor pensando en esto que en que estoy muerta.

Rose volvió poco después. Me entrego la copia que había hecho y se volvió a sentar en su escritorio, preparando todo para escribir un nuevo formulario.

Al verla hacer eso sentí que ahora que ya me habían explicado todo me dejarían a mi suerte, solo pensarlo me sentía entrar en pánico. ¿Qué haría yo sola vagando por ahí en el limbo o como sea que este sitio se llame?

Cuando vi a Albert arreglando su saca y su cabello como si estuviese preparándose para salir no lo soporté más.

- ¿Ahora que voy hacer? ¿Me van a dejar sola? ¡No sé nada sobre este sitio! - les dije desesperada y asustada de lo que me pudieran responder.

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