Cuarto escalón: Esperanza = Ilusión.

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Esperanza... ¿cómo definir esperanza? Para Wikipedia Esperanza es un estado de ánimo optimista, Para RAE es confianza en que ocurra algo que se desea, Para los cristianos es Jesús, Para la matemática es una variable aleatoria y para la gente es la espera de algo bueno. Sin embargo ella lo definiría como Ilusión. Esperanza es ilusión. Ilusión, por creer que todo lo poco alcanzable es alcanzable; que detrás de todo dolor hay una alegría allí escondida; que detrás de todo odio, el amor siempre permanecerá por más que este lo opaque. Eso es ilusión.

La esperanza se relaciona con un yin-yang. Detrás de todo lo bueno, hay algo malo. Detrás de todo lo malo, hay algo bueno. ¿no creen? En todo lo malo, siempre habrá una gota de esperanza para que todo cambie. En todo lo bueno siempre habrá una gota de mal, pero una esperanza casi completa para que esta se reduzca cada vez más. Sin embargo, el mal siempre permanecerá y la esperanza nunca se acabará. Todo es una ilusión. Los seres humanos creemos que siempre habrá algo bueno, reemplazamos lo doloroso por alguna diminuta alegría ignorando la realidad de la vida llevándonos a un mundo diferente en nuestro mismísimo mundo. La esperanza, la ilusión... esto era lo que sentía nuestra viajera en su camino antes de toparse y al toparse con su compañero.

Se sentía como en un sueño del que nunca quería despertar. Eran menos de 24 horas que se llevaban conociendosen el uno del otro (Claro está, si sumas las horas de hace unos días atrás y esta) y ella se podía sentir bien. La habitación se mantenía en silencio, pero todo era tranquilo. Ella mira disimuladamente al nuevo delantero del Bayern Münich varias veces más, no podía creer que él fuera su compañía, ni tampoco como se sentía de cálido en este momento aunque afuera estuviese haciendo un invierno de los mil demonios. Aunque la anemía le provoque efectos de sudor frío, la frialdad por todo su cuerpo, Ella se sentía cálida con tan solo sentir su presencia. 

Él se sentía cálido con tan solo mirarla a los ojos, se snetía bien, tanto, que ni recordaba el dolor que tenía en su tobillo.

la nieve, la noche y las luces hacen sus bonitos efectos. Ella estaba maravillada porque toda su vida ha vivido en este hospital y nunca había visto algo como esto. Tal vez sea por la presencia de aquél hombre.

- Mel, ¿no tienes frío? - pregunta Robert mientras hace un intento fallido por volver su pie para acomodarse.

- Un poco. - Responde la mujer mientras se limpiaba el frío sudor que sus manos expulsaban. - ¿tú?

- Yo estoy bien. - habla como en un susurro que Melina casi no puede escuchar. - Ven acá, te compartiré un poco de cobija. Trata de no pisarme el pie. 

Los dos ríen. Melina se para de la esquina de la camilla. Robert le hace un lado y le deja la mitad de la cobija. 

- ¿Estás seguro? - pregunta ella con cierta inseguridad. - Le compartirás un poco de tu camilla a una extraña.

- Sé tu nombre. Eso me basta. - Él esboza una sonrisa. Una sonrisa que Melina casi no logra identificar. Ella había visto tantas sonrisas en su vida, pero todas hipócritas. Esta era una diferente. Esta era una sincera, llena de... ¿cariño? ¿ apreciación? ¿amor? sí, tal vez sea una de esas tres.

De repente, sabe a qué le recordaba esa sonrisa, o mejor dicho, a quién le recordaba esa sonrisa. Le recordaba a la persona que más amó en su vida: Su madre. 

Una sensación de esperanza se creó en su interior al recordarla, y al ver a Robert sonriendole. Se había acabado de crear una esperanza en su interior, como una ilusión que tal vez se convertiría en una mentira más. Como cuando le pronosticaron anemia aguda por primera vez a la chica, su madre estaba con ella, le diría que todo estaba bien y le esbozó una sonrisa como esas. Ella le dijo también que estaría ahí en todo momento en que la necesitara... Ahí se creó la primera y fallida esperanza de la chica hacía su madre. Un año después su madre murió de un ataque al corazón y todas sus esperanzas cayeron al instante. Ahí fue cuando comprendió que la esperanza solo era una ilusión de la cual las personas no podíamos escapar, la esperanza solo era un escape de la realidad dentro de la misma realidad.

Melina se sintió así por unos segundos. sintió como si hubiese escapado de la realidad dentro de la realidad. Como si su enfermedad realmente no iba a agravar y desaparecería. Como si sus problemas internos fueran eliminándose de a poco cada vez que veía aquellos ojos azules que admiraba.

Pero a la final todo era una ilusión. Una falsa esperanza más de la cual no podría escapar hasta poder liberarse de los pocos y buenos recuerdos que el futbolista le brinda.

Ella sonríe para el hombre y se acuesta en el lado donde él le hizo un campo, intentando ni rozar su tobillo lesionado.

Cuarto escalón: Esperanza e Ilusión.

Vamos viajera, no te desanimes... cambia tu perspectiva sobre lo bonito que es la esperanza.

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Hola a las que ven esto, tal vez en estos dos días publique uno o dos capítulos, pero tomaré como una semana completa

Primero: Iré a mi finca y eso significa estar despegada de aparatos grandes (pc's etc) y no voy a escribir en un telefonito porque es lo peor del mundo.

Segundo: aunque no tenga la compu, tal vez escriba en algún cuaderno algunos capítulos para después transcribirlos. Mi finca es a veces tranquila e inspira. me encanta. de hecho, tengo como ocho capítulos contando estos y todos esos los he hecho en mi finca jajaaj. 

Quiero hacer bien esta mini-historia porque me nace en lo profundo del corazón y eso significa que necesitare tiempo... Es que tenía pensado publicarlo cuando lo tuviese completo, pero creo que las ansías no me dejaron y también que esta novela va dedicada a una chica que me cae re bien. :D

Las amo y espero que comprendan.

lindas mua.

Escaleras al cielo. {Robert Lewandowski}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora