Era como si fuese un renacer... no, mucho mejor, una fantasía. Los viajeros se complementaban el uno al otro, encajaban casi a un cien por ciento y parece como si el ángel le estuviese protegiendo de cualquier mal y peligro que se le acercara. Perfección. Todo es una ilusionante perfección, de esas que te dejan extasiado y lleno de ti mismo y es como si todo lo bueno aplacara lo malo, desapareciendolo. Pero a la final todo es una simple y perfecta ilusión, algo que se debe aprovechar y nunca desperdiciar. Nunca hay mal que desvanezca, pero, a la final, no hay mal que no se pueda luchar.
Ma voi ...
Ti stai trasformando in il più bello della mia vita.- Wow. - es lo único que pronuncia Robert al ver la majestuosa Fontana di Trevi. Le encantó cada parte de ese lugar, hasta los pequeños detalles que estaban a punto de desmoronarse. Sin embargo, lo que más le llamó la atención no fue el lugar, sino la chica que estaba a su lado: Su cabello recogido en una coleta, dejando ver mejor su limpio y bello perfil, como sus labios se curvan y sus ojos color miel tornan un brillo espectacular.
En ese mismo momento, Robert se dio cuenta de algo tan maravilloso que despertó en él una mezcla de mil y una emociones, y lo hizo sentir tan confortable dentro de sí mismo pero tan inquieto a la vez. Su mundo interno se desordenó al instante.
Mordió sus labios y no apartó su vista de ella.
- ¿Qué? - Pronuncia ella.
-¿Qué? - Repite él.
- ¿Por qué me miras así? - Pregunta sonriendo. Claro, sólo para disimular el nerviosismo que le provoca la mirada del hombre que está a su lado.
- Es que me di cuenta de algo...
- ¿de qué te has dado cuenta? - Su nerviosismo se ha alborotado mas al escuchar las palabras de Robert¿de qué se habrá dado cuenta él? pensó ella y rezó al ángel para que lo que dijese fuera algo bueno.
Robert dio un paso adelante para acercarse más a ella, y poderla observar detalladamente. Se perdió en sus ojos color miel y obtuvo un muy luchado éxito al salir de ese trance. Tomó sus manos frías y las cubrió por completo para darle un poco de calor. Miró sus labios y se pudo enamorar más de aquél rosado pálido tenían estos. Arrimó sus dedos hacía esos delicados labios y, con la yema de su dedo índice, delineó sus labios.
suspiró.
- De que eres la mejor cosa que me ha pasado en la vida. Eres perfecta.
- ¿De qué hablas, Ro-ro? - pregunta riendo. - Soy una persona normal.
- Tan sólo cállese. ¿sí? - interrumpe y luego la toma de sus hombros y la acerca a él, formando un abrazo. - No se aleje de mi nunca. Por favor, no lo haga. Yo a usted la necesito tanto como la sangre necesita al corazón y ser bombeada por el.
- Robert....
- Usted es como mi corazón: una parte vital de mi. - susurra entre sus labios. - y yo soy como la sangre, necesito ser bombeado por usted. Es decir, yo no puedo vivir sin usted.
- Deja de ser tonto, Robert. El corazón necesita la sangre para poder funcionar.
- Entonces yo no puedo vivir sin usted, y usted no puede vivir sin mi.
>> y sólo puedo agradecerle una cosa a Dios en esta vida, y es a la mujer que tengo en este momento besando porque en ella he podido ver cosas que no he podido ver, y que ningún hombre en su sano juicio lo podrá. Doy gracias a Dios, al cielo, a los ángeles por juntarme con esta mujer... porque ahora no quiero separarme de ella ni un centímetro más.<<
tomaron cada uno tres monedas, se pusieron de espaldas a la fuente y cerraron sus ojos con mucha fe, y pidiendo felicidad para sí mismos tiraron las tres monedas por encima de su hombro izquierdo.
ESTÁS LEYENDO
Escaleras al cielo. {Robert Lewandowski}
FanficCada escalón representa una nueva etapa y una nueva sensación. He aquí pues, las escaleras al cielo, una pequeña historia donde se relatan los pequeños desafíos y los nuevos sentimientos que los viajantes encontraran a medida que van subiendo.