11 - No sé cómo ponerle, está bien raro O.o

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Narra Astrid:

Me desperté, miré la hora, la de siempre, 1 de la tarde, medio día desperdiciado.

desayuné, me duché, y todo eso.

hoy no tengo ganas de nada, solo quiero estar encerrada en mi casa sin hacer nada, hoy es un mal día, hace mucho que no me pasa eso, es uno de esos días donde por alguna razón estoy mal, y no entiendo el porqué, solo pasa, es muy raro.

Luego de vestirme, me acosté y volví a dormir.

Sueño de Astrid (narrador omnisciente):

Se encontraba con Caleb debajo de un lindo cerezo de flor japonés, en una montaña con una linda vista, hacía viento, las hojas caían.

Al parecer estaban en un tipo de "picnic" o algo por el estilo.

Caleb llevaba un lindo overol negro, con una camiseta blanca, sus tenis eran unas vans negras, todo se veía tan bien en el, se veía hermoso, sus ojos resaltaban con la luz del sol, Caleb le sonreía a Astrid de una manera tierna.

Astrid, llevaba una camisa blanca con unos dibujos (no sé como explicarlo, pero son tipo, caras), una falda negra acompañada de unas medias del mismo color pero en la parte de arriba tenían 2 rayas blancas, tenía tenis converse blancos, y tenía el cabello suelto, el cual se movía con el viento.

Los dos se miraban a los ojos, sin decir nada.

Caleb, realmente se veía hermoso, y no solo lo pienso yo, o tú, sino, que Astrid también lo pensó.

Caleb: yo...tengo que decirte algo -dijo Caleb sonrojado

Astrid: si...dime -le sonreía tiernamente

Caleb: yo...-bajó la cabeza- siempre te he amado, desde que nos conocimos, desde ese día sentí que eras para mí, como si alguien te hubiera mandado para mí, eres la mejor persona que he conocido, yo...agh -rió

Astrid se había sonrojado, ella también sentía lo mismo.

Astrid: espera...¿enserio? Caleb...yo... -soltó una risita nerviosa- yo siento lo mismo que tú, desde el día que nos conocimos -sonríe

Caleb sonrió, y le dio un lindo beso en los labios, duraron así unos segundos hasta que se tuvieron que separar por la falta de aire.

Caleb comenzó a reír, mientras que todo a su alrededor se volvía más obscuro, el árbol desapareció, y derrepente estaban en el antiguo colegio de Astrid, en un salón, estaban ellos dos, y sus antiguos amigos también, era una escena que ella recordaba perfectamente, cada segundo que Caleb reía, Astrid se sentía más triste y oprimida.

Caleb: ¿enserio creíste que me gustabas? solo mírate...eres horrenda, una plana -dijo mirándola de arriba para abajo, con cara de asco

Astrid conocía esa escena, ya le había pasado.

Caleb: una maldita tabla, y mira que hay tablas más lindas que tú, pero, tu pareces betty la fea, mentira, betty la fea es más linda que tu...quierete poquito y cambia un poco, así capaz y te quiero -rió

Astrid lloraba, mientras lo escuchaba.

Caleb: no...no llores, tabla de planchar, me haces sentir mal...-dijo actuando- es mentira, muévete -la empujó y se fue

Todos sus amigos estaban riéndo

¿¿¿: ahora disfruta tu mala reputación...-dijo y todos menos una persona, se fueron, esa persona era parecida a Benji.

Astrid: pero...tu si eres mi amigo, ¿verdad? -dijo mirando a Benji

Benji: yo...lo siento...no quiero mala reputación -dijo tímido y se fue

Su Sonrisa - Caleb Finn (Cancelada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora