•¿QUIÉN DICE?• {•TRUENO•}

•31•

•Priscila•
Salí de la casa de Tania y pase por un supermercado para comparar fernet y coca ya que para cocinar en mi casa siempre hay de todo por suerte.

Llegue, abrí la puerta y ya estaba sola, fin de semana por medio mis viejos se van a la casa de mi abuela materna, tiene una casa enorme y ahí viven mis tíos y mis primos así que Eve se iba con ellos también, yo no voy casi nunca, solo en verano.

Guarde la coca en la heladera y al fernet lo deje en la mesada, me fijé que podía cocinar y se me ocurrió hacer tacos, una comida que nos gusta mucho a los dos y la receta que me había dado mi abuela paterna que en paz descanse, era la mejor y a Mateo le gustaba muchísimo.

Subí las escaleras me iba a bañar tranquila total Mateo me dijo que venía a las 20pm por qué tenía una reunión con una organización.

Entre al baño cargue la bañera y me sumergí en ella con agua bien caliente, apoye la cabeza en el borde relajando cada músculo de mi cuerpo, necesitaba esto.

Lo único que no se me relajaba era la cabeza, no podía creer las cosas que me pasaba con Mateo, osea siempre estuvo ahí para mí, adelante de mis ojos y no lo vi, me puse a pensar cómo me trata, como me cuida, la forma que me cela, fue todo eso lo que hizo que hoy este así, su personalidad, eso que tiene que a lugar donde llega se hace notar sin darse cuenta, tiene una energía que te trasmite tanto, es muy comprensivo, compañero y así podría estar horas hablando de él.

Negué pensando que estoy re enganchada y me daba miedo, mira si no siente lo mismo, si no estoy a su altura aún que siempre me dice lo contrario, pero decirlo en forma de amigo a decirlo en otro sentido es muy distinto.

Tenía miedo por lo que llegue a pasar hoy, y si no puedo actuar igual que siempre y la cago, mil dudas y preguntas pasaban por mi cabeza.

Decidí bañarme y ya salir, fui a mi pieza, me puse la ropa interior, un short que uso para dormir, una musculosa y arriba un buzo que me queda enorme, me peine y deje el pelo suelto que se seque sólo, baje puse YouTube en la tele para escuchar un poco de música mientras esperaba a Mateo.

Estaba boludeando en Instagram mientras escuchaba música va sonaba por qué no le estaba prestando atención, cuando suena el timbre, los nervios se hicieron notar más, lo veo todos los días casi, hace ya 5 años y no me pasaba nada, pero hoy era distinto, me levanté y fui a abrir, ahí estaba él con una gorra con la vicera para atrás, un pantalón negro de gimnasia, sus zapas blancas y una campero inflable azul oscuro, me sonrió e hice lo mismo.

—negrito—dije dándole un beso en la mejilla y me corrí para que pase.

—picu—me saludo y entró.

Camine atrás de él yendo al living, se sacó la campera y tenía una remera negra abajo, se sentó y yo a su lado.

—que onda hoy estás mejor?—dijo y me reí

—si, por ahora estoy de buen humor—contesté—vos que onda?

—nada todo tranqui—agarro el control de la tele y cambio de canción, puso una en inglés de rap, me copaba aún que no entendía nada.

—adivina que voy a cocinar, soy la mejor—dije levantando una ceja agrandandome un poco

—decime que vas hacer tacos y me caso con vos ahora mismo—me reí asistiendo—naaa sos la mejor pricu—se estiró a abrazarme

—sabia que te iba a gustar, hay algo más—dije aferrada a él, que lindo se siente estar abrazada con mi cabeza en su pecho

—mas?—pregunto sorprendido y me separé—uy no se, que es comida?—pregunto y me reí, él siempre pensando en comida