Capítulo 12

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"Es un camino largo, nena; huyendo"

Las aventuras deben comenzar con escaparse de casa – William Bolitho


Dos semanas pasaron desde que habían ingresado al hospital.

Esta mañana, Jisoo con su sonrisa sin fin, se veía cómo un niño que tenía exceso de azúcar. Saltando en la cama de hospital de Jennie, imitó la pose de Tarzán antes de llenar sus pulmones con aire y expulsarlo todo en un rugido ensordecedor por la exaltación.

"¡Libertad!" Gritó desde el interior de sus pulmones.

Rosé se disparó de su silla, caminó casualmente hacia la joven y le dio una palmada en el hombro. "Jisoo", la reprochó, "Sé que estás emocionada de que tú y Jennie se puedan ir, pero Lisa está durmiendo. ¿Puedes mantener un tono bajo?" La castaña miró a la muchacha que estaba inmóvil en su cama, acurrucada en una sábana recién lavada. Lisa fruncía el ceño y apretaba los labios. Pensó que quizá su mejor amiga sentía mucho dolor o que estaba teniendo una pesadilla terrible, esperaba que fuera lo último.

Jisoo dejó de saltar antes de arrastrarse fuera de la cama. "Lo siento, se me olvidó."

"Está bien", respondió Rosé con una leve sonrisa, "Sólo... celebra tranquilamente."

La chica mayor asintió con la cabeza antes de darle un signo de 'ok' con sus dedos. "Oh" comenzó Jisoo de nuevo, apoyándose en el hombro de Rosé, "Ya han pasado dos semanas, ¡Dos semanas!"

Intrigada por lo que había dicho, Rosé arqueó una ceja. "¿De qué estás hablando?"

"¡Dos semanas han pasado y Jennie recuerda todavía!" Jisoo se regocijó tranquilamente. "Esto es, simplemente lo sé. Va a recordar, ¡Lo va a recordar todo!"

Rosé quería recordarle que Jennie tenía amnesia anterógrada permanente, por lo que dudaba de que la chica se curaría espontáneamente de ella. Pero no quería borrarle esa sonrisa, así que guardó silencio.

"Eso es genial, Chu", respondió Rosé suavemente.

"¿No es así? Yo sabía que todos los meses de oraciones iban a dar sus frutos", dijo Jisoo antes de saltar hacia el baño de la habitación. La puerta estaba cerrada y golpeó tres veces antes de llamar a su novia que se estaba bañando en el interior.


"¡Jen!" Susurró Jisoo, "¿Estás casi lista?"

"¿Qué?" La voz preguntó desde detrás de la puerta.

"Dije: ¿Estás casi lista?"

"Lo siento, no puedo oírte ¿Qué dijiste?"

"Dije", gimió Jisoo, "¡¿ESTÁS CASI LISTA?!"

"SHHHHHHHH", Rosé la regañó con su dedo índice en los labios.

Se escuchó un arrugamiento que venía desde detrás de Rosé, ella y Jisoo se congelaron mientras giraban la cabeza en dirección al sonido. Lisa se removió en la cama antes de abrir lentamente los ojos.

Lalisa no estaría simplemente caminando fuera del hospital, pensó Rosé mientras su expresión se oscurecía, estaría encerrada fuera del hospital; en el interior de un ataúd.

La chica mayor se tragó el nudo en la garganta antes de preguntar por enésima vez esta semana, "Lo siento Chae, ¿Te hemos despertado?"

Por lo general, Lisa destellaría una sonrisa antes de responder con algún tipo de comentario sarcástico, pero no hoy. Se frotó los ojos, dejó escapar un bostezo y miró a las dos chicas con los ojos vacíos. Daba miedo cómo las cosas podían cambiar tan rápido y sin previo aviso; apenas ayer Lisa y Jisoo infantilmente rapeaban mientras llevaban máscaras quirúrgicas en la frente, al parecer su mejor amiga les había dicho que las hacía ver como 'pandilleras'.

Buscando ángeles [Adap. Chaelisa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora