El Oscuro

¿Héroe o Villano?

Tomar el valor necesario, un beso verdadero que durará por siempre, y estar dispuesto a morir por aquello en lo que creén, es lo único que los héroes requieren. Ellos cuentan con las armas que necesitan, saben que son fuertes, y que será difícil detenerlos, saben que el amor por los suyos es de donde proviene su poder, su fuerza, pero siempre olvidan que allí mismo habita su punto vulnerable.El amor es su fortaleza y a la vez su mas peligrosa debilidad.

El amor lleva al héroe a hacer las cosa más nobles, a llevar a cabo las acciones más altruístas, pone en riesgo su vida, se sacrificaría sin pensarlo por una sola mirada de auxilio, a pesar que que aquel sea un desconocido, incluso aunque no haya posibilidad de salvarlo, solo lo acompañaría en ese simple instánte en el que ambos desapercieran, en el largo camino a la vida eterna.

El héroe. Tan noble, tan idílico, tan utópico, tan... tan surreal, tan falso y tan estúpido. ¿Quién de verdad se atravería a llamarse a sí mismo un héroe? ¿De verdad existen estos héroes? ¿Siquiera, en algún tiempo habrá existido algún héroe; o en algún momento existirá?Estoy seguro de que un verdadero héroe no se reconocería sí mismo como tal.

Tal vez los héroes no existan, tal vez nadie vele por nosotros, por nuestra seguridad, tal vez estemos solos, a la deriva, en un mar de bestias infernales y despiadadas pensando solo en sí mismas, defendiendo a quienes son iguales a él, mortifiacando a aquellos que considera inferiores, inútiles o hasta perjudiciales para su supervivencia y la de los suyos; tratando de extinguir a "los otros" sin siquiera acercarse, sin intentar comprender, sin esforzarse por conocer sus motivos; solo juzgando aquello que parecen ser, como si un poco de piel y cabello, y un poco de tela cubriendo nuestro cuerpo fuese suficiente para determinara quienes somos en verdad, como si esas simples cosas nos definieran.

¿No les suena conocida? ¿No les parece familiar?

Es que tal vez es más fácil ser el villano, ser frío y calculador, tener todo previsto y no aferrarse a nada. Porque a fin de cuentas eso es lo único que tenemos: Nada.

No tenemos nada. Solo nos tenemos a nosostros mismos, el único a quien podemos poner en peligro, el único al que podemos culpar, el único con quien podemos contar y el único que va a a hacer las cosas exactamente como querés hacerlas.

Es difícil decidir a quien admirar. ¿ A aquél que de defiende sus ideas hasta la muerte? ¿O a aquél que solo busca sobrevivir sin importar el precio?

Lo cierto es que no quiero caer en la romántica estupidez de arriesgarlo todo por mis idílicas e inimaginablemente desinteresadas razones; pero tampoco quiero caer en la gélida crueldad de sacrificar mi alma, mi corazón para llevar una vida de sombría soledad.

Lo cierto, es que no créo que ninguno de estos dos exista, no créo que ninguno de ambos puedan ser reales; y por ello encontrar un punto medio entre ambos es la perfección en este dabate ético y moral que se desata en mi cabeza.

A veces ser un héroe...y otras el villano. Pero lo importate es.. que yo decido cuando.