One-Shots MarcKyle

¡Déjame en paz!

(Universo basado en los Headcanons del libro "Pride Month MarcKyle". En este universo, Tadashi no muere debido a que no logra entrar a tiempo para salvar a Callaghan, pero los sucesos de la película Big Hero Six ocurren mientras él está en coma. Los sucesos de la película Coco son exactamente los mismos, solo que con Marco de metiche siguiendo a Miguel)

-Ya te dije que no, Miguel

-Por favor, Marco. Solo es una fiesta pequeña.

-No, Miguel. Ni siquiera los conozco. -Respondió el chico mientras tocaba un par de acordes.

-Son los amigos de Hiro

-Ah, ¿entonces por él quieres ir a esa dichosa fiesta? ¿Por tu novio?-Se rió, logrando que las mejillas de Miguel enrojecieran.

-No es mi novio.

-Es tu futuro esposo

-¡Marco, basta! Mamá dijo que tienes que acompañarme.

-No, mamá dijo que si yo no te acompañaba no ibas. Y yo no quiero ir.

-Eres un mamón, por eso no tienes amigos.

-Corección. Nadie es lo suficientemente aceptable para ser un amigo mío.

-Te coquetea una chica y ya te sientes inalcanzable.

-Un chino greñudo te trata bonito y ya besas el suelo por donde camina.

-¡Marco, ya! Si me acompañas haré lo que quieras

-¿Lo que yo quiera? ¿Qué estás dispuesto a hacer?-Cuestionó, más interesado.

-Haré tus deberes de... Dos semanas-Al ver la mueca de Marco, se corrigió. -¡Tres semanas!

-¿Y qué más?

-¿Más? -Soltó un gruñido

-Tu postre de una semana

-Marco, estás abusando

-Dos semanas.

-¡Bien! Tus deberes de tres semanas y mi postre de dos, ¿Irás?

-¿Cuando es esa fiesta?-Miguel sonrió y buscó entre sus cosas una invitación con el nombre de Marco. El mayor rió

-Que lindo, con invitación y todo, ¿La próxima semana? ¿Qué le gusta al chico? Le voy a tener que buscar un regalo

Al instante Marco se arrepintió de preguntar, pues eso había dado cuerda a que Miguel hablara de Hiro, el genio de la tecnología que habían conocido cuando él y un grupo de amigos viajaron a Santa Cecilia hacia unos meses para un trabajo escolar. Desde entonces, se la había pasado entre México y Estados Unidos, aprovechando la repentina fama de los Rivera y especialmente, de Miguel y Marco, y las becas otorgadas por el colegio donde estudiaba Hiro.

Estaba claro que Miguel tenía a Hiro en un pedestal, y el asiático no parecía estar muy lejos de aquello; admiraba muchísimo a Miguel. Se llamaban diario, al menos una videollamada cada dos días y una visita al mes.

No era que Marco desaprobara su relación, pero ¿Miguel tenía que ser tan empalagoso? Le estaba escribiendo una canción por su cumpleaños. Ni que se fueran a casar.

Lo peor fue tener que dar vueltas entre cientos de tiendas tecnológicas escuchando un montón de explicaciones que no entendía porque Miguel quería llevarle algo bonito además de la canción a su nonovioperosifuturoesposo. Al final, Marco se decantó por un videojuego, no iba perder 3 valiosas horas de su vida en un regalo para un chico cuyo nombre ni siquiera era capaz de pronunciar correctamente.