Cuídalo bien

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(One-Shot basado en la canción cuídala bien)

Kyle era bastante joven cuando conoció a Tadashi.

Era claro que con el enorme parecido que tenían, de alguna manera terminarían relacionados. Kyle comenzó trabajando de vez en cuando en el Lucky Cat Café, cuando cursaba sus primeros años de preparatoria junto a Tadashi. El mayor de los Hamada siempre pasaba sus tiempos libres en la cocina, intentado innovar con cosas que terminaban en desastre. Kyle tuvo la paciencia necesaria para soportar a Tadashi y con el tiempo, volverse mejores amigos.

Por eso, incluso antes de Hiro o Cass, Kyle se enteró de la orientación sexual de Tadashi y a su vez, de la relación que mantenía con Marco Rivera.

Marco, de origen mexicano y con una prometedora carrera en el mundo musical junto a su hermano, era apenas unos años menor que Tadashi. Lo conoció en un parque, cuando Tadashi fue a liberar toda su frustración por el hecho de que su proyecto no estuviera funcionando. Una dulce voz, el sonido de una guitarra y algunas palabras alentadoras bastaron para flechar a Tadashi.

Su proyecto comenzó a funcionar en óptimas condiciones ese día.

Semanas después empezaron una relación, que con tropiezos se volvió algo sólido y con futuro. La familia Hamada le abrió los brazos, pero sobre todo Kyle.

Habían conectado de la nada. Lo que creían que sería una enemistad en su estado más puro cargada de insultos y miradas de odio por la atención de Tadashi, de un día para otro se volvió la amistad más pura y sincera unida por música, comida y Tadashi

El momento decisivo fue en la presentación de Hiro a la universidad.

La muerte de Tadashi Hamada

Todo iba maravilloso. Desde días antes Kyle se encargaba de que el pequeño genio comiera bien y Marco de hacer todo más ameno con música.

—Marco, ¿Necesitas algo de ayuda?—Kyle se acercó al ver que Marco peleaba con las ruedas del contenedor que llevaba los microbots.

—No. Yo puedo... Gracias... —Kyle dió un tirón con firmeza para hacer avanzar el contenedor —¿Dónde está Tadashi?

—Con Hiro. El niño está hecho un manojo de nervios.— Kyle señaló con la cabeza hacia los Hamada. El menor era consolado por todos sus amigos.

—Es totalmente contrario a Tadashi. Él estaba tan tranquilo el día de su presentación.

—Sí. Tú también eres muy distinto a Miguel. Quizá por eso esté tan enamorado de Hiro. —Ambos miraron como Miguel intentaba calmar a Hiro y a su vez, parecía anonadado con el japonés. No pudieron evitar reír antes de avanzar para llevar los últimos microbots.

Cuando la presentación de Hiro terminó y la mayoría comenzó a dispersarse, Kyle salió al jardín a descansar un rato. La ciencia no era lo suyo.

—¿Todo bien, Kyle?—Marco se acercó a él y se recargó sobre la mesa en la que el pelinegro estaba.

—Sí, solo que allá adentro me siento...

—¿Fuera de lugar? Ya también. Nunca me he podido relacionar muy bien con la tecnología. Aunque hago mi esfuerzo por Tadashi.

—Al igual que el hace su esfuerzo con la música... Deben amarse mucho para congeniar con mundos tan distintos.

—Lo hacemos... —Marco sonrió con un cariño sincero y Kyle supo que era el momento de hacer la pregunta que tanto acomplejaba a su mejor amigo.

—¿Te imaginas una vida junto a Tadashi?

—¿A qué viene la pregunta?

—Marco...—Kyle soltó un suspiro—Tadashi te ama, demasiado. Y él... En verdad parece querer una vida a tu lado. Pero temo que se llene de fantasías imposibles. Tú eres alguien muy libre. Se que eres joven todavía, pero, ¿Estarías dispuesto a pasar tu vida con él?

One-Shots MarcKyleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora