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¿Porque debería?

-capitulo dedicado a EveNeria gracias cariño, tu también eres arte. Y a una de mis lectoras favoritas Bswett123 quien permanece fiel a la historia, gracias bebé<3-

|WINWIN|

¿Porqué me sentía tan nervioso?, mi corazón latía fuertemente viendo aquella mano apoyada sobre la mesa.

-SiCheng- La voz gruesa y seria esta vez logró que levantara mi vista hacia él, sus ojos negros y tan fríos como si fuese a la Antártida solo para comer un helado y sin suéter.

-Yo... ¿Profesor? hmm yo... -Mi voz temblaba me sentía débil y sumiso ante la manera en que estaba parado en frente de mi-

-El joven Ten y usted están saliendo -Apartó su brazo de la mesa y cruzó sus brazos como esperando una respuesta a la afirmación que dio-

-Nosotros... -Miré hacia la caja de pagos viendo a Ten allí parado y hacerme señas de que si, como si escuchara lo que estaba hablando con el maestro-Nosotros... si estamos saliendo- aquellas palabras habían salido de mi, ¿En que estaba pensando? pero no podía decir ahora que no.

-¡Maestro Nakamoto! que sorpresa ¿Qué hace aquí? -Ten le sonrío con malicia a Yuta y pasó por su lado empujándolo un poco para poder sentarse a mi lado y dejarme un poco lejos de él quien lucia bastante molesto- toma tu orden cariño- lo mire dejar la comida a mi lado y acercarse rozando mis labios cuando me aleje antes de que lograra besarme bien.

-Ya me iba, lo veré luego Ten, hasta pronto Si Cheng, recuerde cerrar bien sus persianas- Se alejó de la mesa tomando lo que parecía ser su orden y salió del lugar no sin antes mirarme y hacerme sentir intimidado.

Me estremecí pensando en la mirada que me había dado Yuta antes de salir de la cafetería, ¿que era este sentimiento de peligro?

-¿Qué pensabas hacer? ¿Besarme? ¿¡estás loco!?.

-¿Que? no hice nada malo además es obvio que te incomoda el maestro de cierta manera, bebé, deberías agradecerme soy un buen amigo que estuvo dispuesto a besarte por que te dejaran en paz.

Lo miré serio tomando mi café y bebiendo de este tratando de concentrarme en lo que fuera que mi amigo decía.

-Me llevaras a casa Chittaphon, y me compraras un abrigo de camino porque me lo debes, ya no tengo por tu culpa, además dormirás conmigo- saque mis lentes cuando la vista comenzó a molestarme, termine mi café y me levanté tirando de la mano de mi amigo quien decía no querer ir de compras aunque eso era una completa mentira, el siempre quería comprar ropa.

-Mejor vamos a tu casa, te invito a comer ramen- levantó ambas cejas acompañadas de una sonrisa picara y lanzó un beso.

-Ah tu pervertido, levántate a menos de que quieras que te de una buenas patadas de aquí a Tailandia.

-No aguantas mi amor,Dong SiCheng.

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Al llegar a casa me quité los zapatos en la entrada y mi abrigo junto a Ten quien se quejaba por no haber podido comprar unos lentes nuevos. Lo ignoré efectivamente pasando a el interior de la casa en donde ya me esperaba mi lindo bebé maullando por mimos.

-Ah mi hijo adoptivo, si que estás guapo como tu padre ven acá- El de cabello negro tomó a el pequeño felino en brazos y lo arrastró con él hacia la habitación.

Rodee los ojos y reí al escuchar a el gato maullar por mi, tal vez Ten no era lo que él esperaba, fui a la cocina buscando algunas cosas para comer, todo estaba bastante tranquilo, de hecho todo estaba bastante silencioso, demasiado como para ser algo bueno teniendo a Ten y a el gato juntos, una fría respiración chocó en mi nuca, me estremecí y temblé apretando mi mano contra el vaso.

-Canis... No trates de desafiarme, me perteneces Canis, y te tendré tarde o temprano.- el susurro en su oído me hizo apretar mis ojos rogando a todos los dioses habidos y por haber- Vamos canis, ¿creíste que trayendo a alguien contigo yo no regresaría? Sabes que te gusta cuando vengo, o niegues tu oscuridad, te gustará cuando la pruebes -La voz y ahora la respiración se sentían en su cuello al igual que unos fríos dedos rodearle la cintura y cabellos rozar su oreja.

-¿Po...porqué debería creerle a un producto... de mi imaginación!?- con una pequeña pizca de valentía abri mis ojos viendo aquella mano oscura como el carbón rodeando mi cintura-

-¿Un producto de tu imaginación, Canis? -La voz ahora era un poco mas fuerte pero algo distorsionada, una risa burlona llenó el lugar- ¿Esto te parece bastante real? -Aquella mano que rodeaba mi cintura me apretó fuertemente y sentí otra tomar mi cuello haciendo que hiciera mi cabeza hacia un lado-

-Déjame en paz~ por favor- el miedo me ganó nuevamente haciéndome derramar lagrimas y llevar mi respiración a un limite nuevo cuando la sensación de unos labios rosó mi cuello.

-Dime Canis, ¿esto es real para ti? - miré asustado hacia mis manos, Aquella voz... sonaba como...

-Agh~ -Jadee y cerré de nuevo mis ojos cuando su lengua tocó mi piel humedeciéndola y dando siguiente paso a su boca y dientes quienes chupaban de mi piel- mgh~ de... déjame por favor - Las lagrimas salían y salían sin fin, las manos me temblaban tan fuerte que dejó caer el vaso a el suelo quebrándose completamente y como aquel día ya no pude ver nada después de eso-

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o(*▽*)ブ Holaaaaaaaaaaaa perdón por no haber actualizado hasta ahora pero creo que lo estaré haciendo más seguido, gracias por leer, comentar, darle like y seguirme, es una gran motivación.

Un Caos Llamado Oscuridad •yuwin•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora