"El Pacto" Karmaland IV

Cap. 7 (Escape y una plaga.)

—¿Dónde estamos..?—Se incorpora.—¡Au! Maldito arbusto... ¡¿Arbusto?!—Grita.—¡¿Todo eso pasó?!

⟨¿Qué demonios estaba haciendo ayer? ¡¿Yo acaso le pedí a Auron tener sexo?! ¡Peor aún él mismo me rechazó! ¿Ahora qué pensará de mí?⟩

Nuestro héroe Luzu después asesinarse mentalmente, había logrado escuchar la voz de su compañero acercándose con una hoja grande.

—¿Auron?—Escabullido.—¿A dónde se habrá metido?

—¡Eh! Luzu, ¿Ya te sientes mejor?—Mirando fijamente.—Traje algunas cosas para ti.—Le extiende la hoja grande amarrada.

—¿A dónde te fuiste..?—Mira la hoja.—¿Y esto..?

—Medicina para ti.—Se sienta.—Comela para que te quite "ese celo" que traes.—Ríe.

—¡Oye! eso no fue...—Se cubre la cara con sus rodillas.—¿Que era lo que estaba pensando?—Sonrojado.

—Oye hombre, no te sientas tan mal.—Palmadita en la espalda a Luzu.—No fue tu culpa, esa agua extraña de ayer fue la que te hizo ponerte en... como lo digo, ¿"Modo Sexo"..?

—N-no es gracioso A-auron.—Avergonzado.—¿Pero como mierda va ser esa agua?

—Mira, gracias a mi investigación de anoche, pude salir del arbusto mientras dormías, (ya que no había aquellos guerreros).—Levanta su mano.—Me acerque a la aldea que habíamos visto donde salía el humo extraño. Camine hacia allá, me metí a una casa.

—¡¿Estás loco?!—Le jala una mejilla.—¡¿Qué hubiera pasado si te capturaban?!

—¡E-espera Lu-luzu!—Sujeta la muñeca de Luzu.—¡Déjame terminar! ¡ah! ¡Duele!

—Ah~ un día de estos nos vas a matar.—Sujeta la raíz de su nariz.—Continúa.

—Que malo~ después que arriesgue mi vida para salvarte de una violación.—Dramático.—Pero está bien... para la otra me dejo encantar por ti~

—¡A-auron!—Sonrojo.—D-de acuerdo... no es gracioso.

—Lo sé pero te molesta.—Sonriendo.—Bueno como te decía, entré a la casa, busque algo para ti pero no había algo que yo conociera entonces dije: "Bueno Auron deberás buscar algo que te sirva por lo menos...", registre lo que pude de esa casa y finalmente fui descubierto por un aldeano.

—¡Auron..!—Enojado.—¡¿Qué tal si ahora mismo fue con uno de sus guerreros y vienen a buscarnos idiota?!

—Tranquilo Luzu eso no pasara, era una dulce anciana, a pesar de que al principio hablaba en otro idioma extraño, logré entenderla con señales de mano.—Riendo.—Le explique que un compañero había caído en aguas verdes cerca de una cueva.

—Ajá ¿Y..?

—Bueno no entendí del todo lo que me explico pero me dijo que era un lago santo de su pueblo que se utilizaba para la fertilidad, ya sabes que se reproduzcan los animales al beberla, las plantas  y entre otras criaturas que ni de coña sé.

—Osea que si yo estuve en esos efectos... y los dos caímos en el lago.—Señala dudoso.—¿Que paso contigo..?

—¿Cómo que qué «pasó conmigo»?

—Sí, osea si a mi me dio...—Tos fingida—celo...—Susurro—¿a ti que demonios te hizo?

—Mmm... ¡Esa es una excelente pregunta!—Analiza sus sentidos y cuerpo.—Quién sabe la verdad, creo que no funcionó en mí.

—Esa es una idiotez.—Mirada Neutra.—¿Y que más te dijo la anciana?

—Pues me explico manualmente como hacer el "Antídoto" y pues ahí está la hoja.—Señala mientras come una fruta extraña.—Solo debes comer el queso blanquito.