American Boys: Crónicas de la Sala Kuntú

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Erik

Mi padre era un señor con un alto nivel de estudios y se consiguió a una mujer que nació bajo una familia adinerada. Cuando se casaron los dos juntaron sus riquezas además de juntarse de una manera de que yo llegara a este mundo.

Después que naci, nació mi hermana Valeria, como era la primera mujer de nuestra generación le hacían más caso que a mi, durante un largo tiempo me sentí olvidado por parte de mis padres y de mis tíos. Recuerdo una vez cuando llegué tarde a casa por que había ido a una fiesta donde mis amigos me habían invitado. Entre a la casa y vi a mis padres que me estaban esperando en la sala.

Mamá: ¿En donde estabas Erik?

Erik: Estaba en una fiesta a la que me invitaron mis amigos

Papá: ¿Y porqué no nos dijiste?

Erik: Claro que si les dije, de que no me hagan caso y se olvidarán de mi es otra cosa

Mamá: ¿Quién dice que nos olvidamos de ti?

Papá: Erik, esto es algo inexplicable, ¿De dónde sacaste esa idea de que nos olvidamos de ti?

Erik: Papá, con sus actitudes, se fijan más en mi hermana que en mi, siempre que hago algo bien por ustedes no lo toman en cuenta. Cuando hago un pequeño erro ustedes lo ven como si fuera el fin del mundo, como si me hiciera daño las cosas malas que hago, como si matara a alguien.

Papá: Erik, si te regañamos es porque queremos que seas el mejor de nuestra familia

Erik: Si quisieran que fuera el mejor, ¿Porqué no hacen lo mismo con mi hermana? ¡Ya estoy harto de todo esto! -levanta la voz-

Mamá: Hijo, cálmate por favor

Erik: ¡No mamá, ya no quiero sufrir esto!

Papá: -lo quiere tomar de los hombros- ¡Ya hijo! ¡No le levantes la voz a tu madre!

Erik: -lo empuja algo fuerte- ¡Ella no es mi madre! ¡Ya no quiero ser parte de esta familia, me largo de aquí! -abre la puerta se sale de la casa-

Papá: -Va tras el- ¡Erik ¿A donde vas?!

Erik: -sale corriendo a la calle pero comienza a llover-

Después que abandone la casa caminé por las oscuras calles de la ciudad, estaba lloviendo muy fuerte, llegue a una casa tenía un pequeño techo y me acomode ahí para pasara la noche.

Amaneció y en eso abrieron las puerta me caí de espadas y vi a una joven de cabello negro, era un poco alta, me vio con una cara de sospecho, me levanté y le dije.

Erik: Perdón, por molestarla

Xx: ¿Quién eres, que haces aquí en mi casa?

Erik: Me llamo Erik ¿Y usted?

Isabela: Isabela

Erik: Tiene un bonito nombre

Isabela: ¿De dónde eres? Te vez muy arreglado

Erik: Soy de los barrios alto de la ciudad