V

22 7 2
                                    

—Solomon, Solomon, Solomon.

—Dime.

—¿Qué haremos? ¿Qué haremos? ¿Qué haremos?

—Solo han pasado 3 días los cuales fueron el fin de semana y un festivo. Nunca sales un fin de semana y mucho menos un festivo.

—Pero eso no quita el hecho de que quiero hacer algo. Estoy aburrido.

—¿Cómo qué quieres hacer?

—¿Vemos una serie?

—Claro, si es lo que quieres.

—No.

—¿Entonces...?

—¿Jugamos a algo?

—Sí, por mi bien.

—No, ya no.

—¿Bueno?

—¿Cocinamos juntos?

—De acuerdo, sería divertido.

—No, tampoco.

—¡¿Entonces?! ¡Decídete!

—Es que... yo quiero que también escojas, que elijamos juntos.

—...Pero, yo estoy bien con lo que tú escojas.

—¡Así no cuenta! Quiero que también te diviertas, no solo yo.

—Cariño, sabes muy bien que con todo lo que tú escojas yo estaré feliz de hacerlo y también me divertire porque es contigo.

—Mm. Igual, también debes escoger.

—Ya, me rindo.

El arte de estar encerrados.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora