En la era otomana durante el siglo 16 donde el gran sultan Vikham reinaba con sabiduría y mano dura, el sultán era reconocido no solo por sus hazañas de guerra si no también por ser un sultán con un gran harén. En esta época llega un joven asiático...
Otabek y Yuri se habían movido hacía la cama. Estaban cansados y somnolientos, todo ese ejercicio de hace rato estaba cobrando la factura. Yuri después de un rato se quedó profundamente dormido, por otro lado Otabek estaba despierto, veía al hermoso rubio dormir. La emoción no lo dejaba cerrar sus ojos sin importar cuán cansado estaba.
''Voy a ser papá''
La felicidad lo invadía, Otabek pasha estaba tan contento que no lo podía creer. El nunca creyó en formar una familia. Otabek jamás creyó que podría encontrar a su persona especial y formar una familia. Ahí estaba el rubio, la persona más bella en esta tierra. La belleza del rubio era tan, tan exagerada que Otabek creía que se trataba de una alucinación. Ahora podía comprender bien a Viktor, ahora sabía el porqué estaba tan emocionado cuando conoció a su ninfa del bosque.
Otabek sonrió una vez más y se acercó al rubio. Su amado sol. Cerró sus ojos y se dejó envolver en un sueño hermoso, sueño donde aparecía él, su hermosa hada.
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Ya era el mediodía, y era un día muy frío, más fría del día anterior y ambos omegas buscaban el calor de sus compañeros, los cuales no estaban.
Los soldados que Viktor envió para buscar un lugar seguro para el azabache nunca regresaron. Preocupado de que algo pudo haber pasado, Viktor buscó a Otabek para conversar tan pronto amaneció. Después, los dos creyeron que ir a buscarlos era lo más conveniente. Cabalgaron unas horas y no encontraron nada. Preguntaron a unos aldeanos de por ahí y supieron que una caravana de soldados imperiales había pasado no hace mucho. Cuando indicaron la dirección, Viktor y Otabek supieron que era la dirección del palacio. Rápidamente subieron a sus caballos y cabalgaron esperando llegar antes que ellos. Viktor no tenía idea de quién podía ser la persona en la caravana. Podría ser su hermano, el príncipe Ivakham, pero fue desterrado por mandato de la valide cuando Viktor subió al trono. La Valide no era madre del príncipe Ivakham, así que cuando el difunto sultán murió, la valide sugirió a su excelencia que matara a su hermano ya que podría ser una amenaza en el futuro. Viktor no tuvo corazón para hacer tal acto. A Pesar de solo ser medios hermanos, Viktor le amaba y no quería dañarlo. En estos tiempos era muy común matar a todos los hermanos para que no presentaran ningún tipo de amenaza, sin embargo Viktor conocía bien a su amado hermano y sabía que jamas tomaria la espada en contra de él. Así que Viktor lo mandó a otra ciudad y lo puso a cargo. Acción que dejó en descontento a la madre sultana ya que quería acabar con la vida del príncipe y su madre, la cual le siguió a la provincia en la que gobernaba.
—Viktor, quien crees que sea?
—No tengo idea—respondió el peli plata apresurando al caballo. Llegaron y bajaron del caballo. Les recibieron soldados del palacio así que sabían que esta persona debería ser alguien del palacio y no del ejército. . A Viktor le llegó el nerviosismo al pensar que podría ser su madre.
