Libérame || Taekook

Parte 12

Jungkook empezó a despertar por el fuerte apriete que tenía su vejiga y al despertar del todo, empezó a sudar como un animal.

Nunca en su vida había sentido tantas ganas de ir al baño y estaba entre la contrariedad de si ir al baño o no.

No tenía permiso de ir al baño aún.

Pero no quería estropear la cama de su nuevo dueño.

Recordaba que uno de sus dueños anteriores, el primero, no le permitía ir al baño más de una vez al día, y eso estaba bien para Jungkook porque rara vez ingería alimento, así que no lo necesitaba mucho.

Ese hombre se hubiera merecido que Jungkook le estropeara la cama, pero su nuevo dueño no lo merecía.

Su nuevo poseedor era bueno.

Sin poder aguantar más, Jungkook se levantó de la cama, con dificultad puesto que aún le dolía muchísimo el cuerpo por el último castigo que había recibido, y caminó apresurado hacia el baño.

Sus ojos se aguaron de alivio al estar allí dentro y al terminar incluso se tomó la libertad de abrir un poco el lavado para enjuagar sus manos.

Cuando estaba saliendo, vio a su nuevo dueño entrar y Jungkook notó que estaba serio y tenía la cara roja.

El miedo se apoderó de Jungkook y se lanzó al piso a arrodillarse en súplica.

"¡Perdón, señor, perdón!" Sollozo Jungkook y Taehyung se sobresaltó, asustado al ver aquel extraño comportamiento. "¡Por favor no se enfade, le juro que no me podía aguantar y usted no se merece que le estropeara la cama!"

Taehyung miró entre el chico arrodillado y el baño y logró entender que sucedía. Tal como lo había hecho las veces anteriores, se arrodilló frente al esclavo y esta vez le tomó las manos.

"Regla #3: Eres libre de ir al baño cada vez que lo necesites, cuantas veces lo necesites." Susurro Taehyung y soltó una de sus manos para poner un dedo bajo su barbilla y levantar su cara. "Jamás me enfadaría por algo así, Jungkook."

Jungkook lo miró calculador unos segundos y luego asintió despacio, sintiendo como su cuerpo se relajaba por la pequeña sonrisa que tenía Taehyung en los labios.

"Pero, ¿porqué—?" Empezó a preguntar Jungkook y se calló al instante, sorprendido de que frente a su nuevo dueño tenía la necesidad de decir cosas que nunca jamás a sus anteriores poseedores se hubiera atrevido a decir.

"¿Qué pasa?" Pregunto Taehyung y movió sus dedos de la barbilla de Jungkook a su mejilla, dándole suaves caricias con su pulgar.

Jungkook se estremeció al sentir la caricia.

"Si no estás enfadado, ¿porqué tienes la cara roja?" Pregunto Jungkook susurrando y Taehyung se sintió orgulloso de que con solo un par de horas el joven esclavo ya demostraba tenerle un poco de confianza y le hablaba de una manera menos formal.

"Es solo que estuve—" empezó a decir Taehyung pero se interrumpió; no le iba a decir que era porque había estado llorando por él. "Es solo un poco de alergia, dentro de un rato se me quita, no te preocupes."

"Oh." Suspiro Jungkook y de pronto sus ojos brillaron con emoción. "¡Yo podría aplicarle alguna crema o algo para que se alivie, señor! Soy muy bueno cuidando heridas, ¡se lo prometo!"

Taehyung sintió como se derretía su interior al ver al fin un poco de vida en los ojos del chico, emocionado por ayudar a su poseedor.

Por lo mismo, no tuvo el corazón para confesarle que en realidad no tenía alergia y no era necesario, así que asintió y se levantó del piso, jalando la mano de Jungkook y ayudándolo a levantarse, dejándolo esta vez sin la posibilidad de negar su ayuda.

"Quédate ahí sentado, ya vengo con la crema, ¿si?" Taehyung dijo y Jungkook asintió enérgicamente.

Jungkook se sentó en la cama y al ver a Taehyung caminando tras la puerta, sintió algo extraño en su corazón.

No sabía que era lo que sentía, pero sabía que su poseedor merecía todas las cosas buenas y Jungkook estaba dispuesto a darle todas las que estuvieran a su alcance.