*Joyel y más planes.

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Agigolada, con mucho pesar, sostiene su brazo con gran dolor. Podía hasta oír su sangre cabalgar con furia e impotencia, ¿y cómo no?. De nuevo, falló.

No iba a perder, incluso si ambos gustan de las victorias.

El bastardo, el mismo diablo, soltó su cabellera bruscamente. Haciendo que la contraria reciba un impacto en su mejilla por el frío piso.

Los golpes de los armados del otro lado de la puerta eran insoportables para la aturdida mujer. Tragó con dureza y dejando de lado el grito de sus extremidades, propinó un golpe con su codo la pierna de Tord.

No suficiente para darle dolor, pero si distraerlo.

El armado corrió para derribar al Líder (el mismo que borró su sonrisa torcida por un ceño furioso).

La extranjera no estaba en condiciones de correr, ya que su pierna y brazo estaban lastimados (abuhados en el peor de los casos) luego de haber sido aventada en el escritorio y seguidamente, caer al piso. Tragando sus lágrimas y pinchazos de dolor se arrastra hacia la puerta bloqueada y ayuda a los profesionales a abrirlo.

Como por milagro, es abierta. El primer policía con el que habló se dirigió hacia su compañero que luchaba contra el experimentado líder. El mismo tenía fama de su gran potencia, pero gran valentía debían para atraparlo de una vez.

"¡Estúpida!. ¡Cuando te agarre, te voy a quebrar la columna!." Gritó con la cara roja por las presiones que hacía para quitar al primer oficial.

Tord buscaba depauperar a estos profesionales. De por sí, en segundos, pudo tomar a primer irrumpidor de su momento y lo aventó hacia el hombre uniformado que venía.

Se veía como un toro feroz que fácilmente atropellaba con dominio a aquellos dos. El segundo que había estado encerrado, quitó su arma y disparó hacia el hombre del líder.

...El Líder Rojo siseó de dolor pero; logró mandar su ojo sano hacia su agresor. 

Como si aquel dolor no fuera la gran cosa, usó su brazo lastimado para usar su arma y disparar hacia el segundo. El hombre se echó al costado, haciendo que la bala vaya hacia la puerta. Acto seguido, ambos comenzaron un tiroteo, contratacando con velocidad.

Patibulario de rojo luchaba por poner ventaja de hierro. Era como un campo de batalla donde la justicia quería hacerse cargo del imputado.

Los ruídos de los disparos incesantes lastimaba los engranajes de la consciencia de la víctima, la que nada tenía que ver. Luego de intentar tener una vida normal, se alejó de los sometimientos para entregar su cuerpo, por lo que estos golpes realmente la tienen fuera de su órbita. No ayudó en nada el hecho de que sus párpados querían entregarse, caer en la oscuridad. Había pasado por tantos gajes que lo único que quería su cuerpo era desmayarse. Y tomarse un merecido descanso.

Por el zaino mundo; cayó inconsciente, dando una última mirada hacia la ventana, donde la luna brillaba como diamante.

Lo que no sabía, es que el comunista luchaba contra más personas, esta vez; vestidas de negro. (...)

...












×Gritos Del Silencio× (Eddsworld y Lectora){2da Temporada}.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora