¿Y si nuestro destino no existe?

Cap. 36: Al Límite

Una fuerte vibracion se sintió en el cielo, algo malo estaba a punto de suceder, mis instintos están activos y mi corazón se agita ante tremenda distorsión. Me acerco corriendo a la habitación de Hotaru al escuchar un grito de una de las damas que la acompañan.

-Hotaru... Hotaru-le dice la rubia tomándola por lor hombros, pero la niña está en trance, sus ojos perdidos.
-"El Fin está cerca" -sus palabras son dolorosas-, "El corazón de la princesa ya no tiene salvación" -, me acerco a ella al escucharla. Jadeite, Zoisite y Nephrite me secundan. Hotaru me mira y toma mi mano con fuerza-. ¡Ayúdanos a despertar!-, me dice en casi súplica y yo no sé cómo hacer lo que me pide.
-Dime, ¿Cómo?.
-La sailor que controla el tiempo...-apenas logra decir cuando parece sufrir de una nueva convulsión incontrolable.
-¡Hagan algo! -grita con desesperación Michiru y Zoisite coloca algo en su vena, algo que el prin... Perdón Darien le había dejado.
-Listo, dejemos que duerma-dijo Zoisite, dejando a sus padres más tranquilos.

Salimos de la habitación, más preocupados que al inicio, aún se siente esa vibracion pero que poco a poco parece desaparecer. Miró al cielo, mientras Nephrite intenta llamar a Darien, pero este no contesta.

-¿Que haremos?-pregunta Jadeite, su semblante muestra su preocupación.
-Buscar a la Sailor del Tiempo.-respondo de inmediato.
-Pero, ¿Cómo? -me cuestiona Zoisite.
-Despertando a las chicas-responde Nephrite entendiendo el punto.

Aún no tengo idea de si funcionará, pero nuestras piedras siempre estuvieron conectadas con los cristales de las sailors. Jadeite, Nephrite y yo iremos primero, Zoisite se quedaría cuidando a Hotaru, no sabemos cuando tiempo el medicamento la mantenga tranquila, además corremos el riesgo de que el enemigo ataque.

Avanzamos en la profundidad del bosque en el vehículo de la rubia, ella en el afán de salvar a su pequeña Hotaru nos lo prestó. Darien nos dijo que la forma de trabajar de ellas es muy distinta, pero que son sailor muy poderosas y leales. Las he tratado poco pero puedo ver que son capaces de sacrificar lo más sagrado por quienes quieren.

Reviso los pocos datos que reuní de lo que Darien nos dio a conocer de las inners, esperando poder despertarlas por completo. Primero llegamos al templo Hikawa, veo a Jadeite inquieto, nervioso, con su corazón desbordado. ¿Será que me sienta así, cuando vea a mi diosa del amor?.

Una vez allí, lo dejamos solo, debemos avanzar lo antes posible y espero que la estrategia funcione. Luego dejo a Nephrite donde se supone que es el departamento de Lita y yo me dirijo presuroso a la puerta de Mina. Mi bella y amada Venus.

Cuando estoy frente a su puerta, le envío una señal por nuestro comunicador a Zoisite, el debe despegarse de su cuerpo y llegar hasta Amy. Tocó el timbre, un par de veces, y cuando la tengo en frente mi mundo se detiene.

-Hola, perdón... ¿Pero que necesitas?-me dice mirándome extrañada.
-Hola mi bella Venus-le digo y ella me mira mas que extrañada. Veo de reojo mi intercomunicador y al parecer todos ya han tenido contacto con las sailors.-vine a ayudarte a recordar.
-¿De qué hablas?-ella retrocede un poco temerosa, pero está vez no la dejó ir.

La estrategia es emitir el poder de nuestros cristales sobre ellas, para poder transmitirles nuestros recuerdos y permitir que ellas recuerden y se conviertan en nuestras aliadas.

Mina aún me mira con miedo y estoy casi seguro que las otras chicas deben estar pasando por el mismo proceso que ella, cuando envío la señal final por el intercomunicador, todos emitimos nuestro máximo poder, sabemos que esto puede llamar la atención del enemigo pero es un riesgo que debemos correr.

Nuestros espíritus se elevan y confluyen en un mismo punto para salir disparados hacia ellas. Sin embargo el resultado no es alentador, veo como Mina parece entrar en trance y su espíritu sailor se presenta frente a mi.