CAPITULO 5

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CAPITULO 5
ME LO HICISTE A MI

Las cosas van de maravilla, hemos comenzado a fabricar el dinero, a veces me hubiera gustado que todo haya salido bien desde un principio. Habian llegado los medicamentos, dentro de ellos la pastilla abortiva de Mónica Gaztambide.
Pero tambien hay cosas que fallan, tienen la identidad de rio y tokio, que coincidencia los enamorados.
Pero alguien tenia un telefono, y gracias a eso han descubierto quienes eran.
Y adivine quien tenia el telefono, claro, monica y dinero para variar.
Obviamente para no poner el riesgo el plan. La mande matar. No la mate yo, la mato denver. Pero los rehenes están demasiado.

La banda está enojada conmigo, pero a mi no me interesa solo quiero el dinero para aislarme de una buena vez.

Moscu me debe de odiar, manche las manos de su hijo de sangre, que mas da, todos nos manchamos de sangre las manos de vez en cuando.

Detengo a Moscú en uno de los pasillos.

Moscu: que vas a hacer, pegarme un tiro, y después a todos, te quedaras solo en esta ratonera.

Veo como le da un ataque de ansiesdad, Denver y yo lo acostamos en el piso.
Dejamos a moscu en la sala de cafetería, en un sillon para que descanse.

Despues camino a mi oficina para encontrar a una Carmen muy enojada.

Carmen: que acabas de hacer?

La miro incredulo, como es posible.

Carmen: dime que acabas de hacer ?

Berlin: mande a matar a una rehen

Carmen: porque

Berlin: ponia en riesgo el plan

Carmen: te has convertido a ti y a el pobre denver en asesinos.

Berlin: tranquila amor, te he dicho que te ves linda cuando te enojas

No estaba enojada estaba furiosa.

Carmen: la ultima vez que te llenaste las manos de sangre, que te dije

Berlin: me

No lo quería decir, me daba vergüenza que ella tuviera que hacer tales escenas, por mi culpa.

Berlin: me lo h

Carmen: me lo hiciste a mi !

Y sale enojada, muy enojada, me deja con la palabra en la boca. Me llena la conciencia de ese recuerdo, la ultima vez que golpeé a alguien, porque veía carmen como un objeto.
Prometi nunca mancharme la manos de sangre otra vez, rompi la promesa.

El angel de la guardaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora