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Hermione  habia llegado a su hogar, despues de estacionar su coche, tomó una bocanada de aire. Sabia que Draco ya estaría en casa, pues de no ser así, no se habria presentado en su oficina y le hubiese pedido hablar. Una vez dentro, se encontró a Draco sentado en la sala con una copa de vino en su mano. 

-Ya estoy aqui ¿De que querias hablar? -pregunto con voz firme- 

-¿Desde cuando sabes que tengo una amante? -solto de golpe- 

-No fue dificil deducirlo, cambias de asistente cada 1 o 2 meses a lo mucho, no soy estupida si eso creias -espeta-

-Jamás lo crei. Pero ya aclarado el asunto, no hay mucho sentido en seguir hablando de esto -da un sorbo a la copa- 

Hermione sintio que el dolor incrementaba, tontamente penso que él negaria todo y le diria que nunca la ha engañado, que todo habia sido una confisión por parte de ella. Pero no, ni siquiera se inmuto. 

-Si era todo me iré a la cama. 

-Espera, aun no he terminado -Draco se levanta de su asiento- 

-Dime -hablo tratando de parecer indiferente- 

-El próximo fin de semana habrá un evento en la empresa, se llevará a cabo una obra de beneficencia. 

-Entiendo no te preocupes, haré lo que siempre hago. Fingir ante todos que somos el matrimonio perfecto. No tienes que decirme lo que se de sobra. 

Draco se sorprendió ante lo que acababa de decir la castaña. 

-Si no tienes mas que decirme, me voy a mi habitación -dice por último, dejando a Draco totalmente perplejo-

Draco se paso las manos por el cabello rubio, actuó como un idiota. Lo que realmente queria decir era que lo sentía, sentía el haber actuado como lo hizo. Sin embargo, solo le causaba más daño. Queria liberarse del gran peso que lo atormentaba, le dolía esa situación pero en el fondo sentía que lo merecía. 

Hermione en cuanto llego a su habitación no pudo evitar llorar, se sintió tan patética al aparentar algo que no era, se sentía como una niña pequeña, frágil e indíferencia en ese instante deseo no amarlo como lo amaba.

A la mañana siguiente, Hermione optó por ponerse un vestido entallado en corte V color ciruela y unos tacones nude, al bajar a la sala se topo con Draco. 

Él al verla quedo asombrado, jamás le habia prestado atención a los atuendos de la castaña, pero ese vestido le quedaba perfecto, resaltaba su figura, se sintió un poco incómodo, incluso avergonzado, como un adolescente. 

-Buenos días -dijo al fin, tratando de manter la compostura- 

-Buenos días, crei que ya te habías ido -responde la morena- 

-No, aun no lo hago ¿Gustas que te lleve al trabajo? 

Hermione se quedo muda ante lo que acaba de escuchar. 

-Claro, no veo porque no -respondio intentando restar importancia a tal petición- 

Ambos salieron del hogar,  Draco abrió la puerta del copiloto para que  la morena pudiera entrar, rodeo el auto y se sento en su asiento. Comenzaron a andar, rápidamente se intensificaba al trafico matutino que se hacia todos los días. 

-Luces hermosa con ese vestido -Draco rompe el silencio-

-Gracias -Hermione no pudo evitar sonrrojarse- 

-¿Te gustaria ir a comer en la tarde?

Definitivamente Draco estaba actuando raro ¿Seria un sueño? Se estaba portando atento con ella. 

-¿Mione? -pregunto Draco al no obtener respuesta-

-Lo siento, yo.. Ya tenia un compromiso -no pudo evitar sentirse apenada- 

-Entonces paso por ti y te invito a cenar. Vamos una cena no me las vas a despreciar ¿Verdad?

La castaña no pudo evitar esborzar una sonrisa y sentir un cosquilleo en el estomago, quiza esto seria buena señal.

-Esta bien, acepto -Respondio intentando ocultar la emocion que sentian-

-Perfecto, entonces paso por ti y te invito a cenar.. -Dice esto ultimo y le da un casto beso en los labios, algo casi dulce- 

Ese gesto hizo que el corazon de la castaña latiera desbocadamente y su piel se erizara, no pudo evitar sonrrojarse y sentirse como un niña que se enamoraba por primera vez. 

Hermione entra a su oficina, siente que todos pueden escuhar el latido de su corazon. Se interna en su oficina, al sentarse no puede evitar tocarse los labios. 

-Señora Malfoy -interrumpe la asistente-

-Liyu, jamás habia estado mas emocionada de que me llamaras "Señora Malfoy" -responde con euforia- 

-¿Esta bien Señora?

-Mas que bien Liyu.

-¿Gusta que le diga lo que tenemos para hoy?

-Si, si ... -tratando de tomar una postura seria- 

-Al medio dia tiene una videoconferencia que terminara a la 1:30 pm., tiene la comida con Haziel Lamphar a las 4:00, tambien tenemos que revisar el manuscrito de Sophia Lievano para la publicación que se tiene programada para el mes de Abril -cierra su agenda- 

-¿Ya esta lista la sala de conferencia?

-Se esta ventilando -responde- 

-Bien, quiero que te prepares, estras ahí conmigo para tomar algunas notas -hace una pausa- Me ausentare por algunos días, me gustaria que te hicieras cargo de la editorial en mi ausencia, te iré enseñando conforme a la marcha, es por ello que tienes que estar conmigo hoy. Mandare algunos correos avisando de ello, auno se cuando dejare de venir. 

-Señora no se que decir, me toma por sorpresa ¿Cree que yo podré manejar esto? 

-Por supuesto Liyu

-Gracias Señora 

Mientras tanto Draco estaba saliendo de una junta muy importante, se dirige hacia su oficina, al llegar ahi, estaba una mujer, con la fotografia de él y su esposa en la mano. 

-¿Que haces aquí Rachel?

-Visitandote, ya que me tienes abandonada -hablaba de manera muy probocativa- 

-Ya te he dicho que no me gusta que vengas a mi trabajo -camina hacia ella y le arrebata de las manos el cuadro. dejandolo en su sitio- 

-Pero no te enojes, estaba aburrida y dicidi venir, ademas... nadie sabe que relacion tenemos -se acerca a Draco y lo rodea con los brazos- Me haces tanta falta. Deberiamos ir a hacer travesuras por ahí o si lo prefieres podemos hacerlo aqui en tu oficina.

-Te vere en la tarde Rachel, en el departamente.. Ahora vete,que tengo que trabajar -apartandola- 

-Me iré, pero prometeme que vas a ir 

-Lo haré 

-Bien te espero esta tarde -se dirige a la puerta- Por cierto, tu esposa esta muy linda -dice por ultimo antes de cerrar la puerta tras de si. 

Draco desvia los ojos hacia el cuadro, no dudaba que su esposa fuese linda, el mejor que nadie lo sabia, sonreia para si mismo sintiendose el hombre mas afortunado del mundo, por tenerla a su lado, sin embargo algo lo atormentaba, por lo que sentia que estar con ella era dificil, él la amaba pero el pasado lo atormentaba. 

En su cabeza resonaba la voz de Astoria una y otra vez diciendole que le dijera la verdad,  una verdad que solo Astoria y él conocian. 

Always.    ~~Dramione~~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora