Always. ~~Dramione~~

XV

Hermaione  iba destrozada, sus lagrimas no cesaban  y su  pecho dolia, sentía que el mundo se le habia derrumbado. Draco y ella. Rapidamente llego a su casa, de forma rapida entro y subio a su habitación,  tomo sus maletas y comenzo a llenarlas de ropa.

Su cabeza comenzaba a doler, multiples imagenes se cruzaron por su mente, estaba recuperando sus recuerdos.

-No, no... no es verdad -decia para si misma, sentia el alma destrozada y sus sentimientos heridos.

Por inercia llevo sus manos a su abultado vientre, se sento en la cama  y miro a su alrededor.

Todo habia sido una fachada, las cosas que habia imaginado en el futuro eran solo un espejismo que se habia creado, una mentira que Draco se encargo de hacerle creer. Nuevamente fue una ilusa, antes y ahora lo seguia siendo. 

Presa de la ira se levanto, arremetio contra lo que habia a su alrededor comenzando por las cosas que habia en el tocador, fotografias.

Escucho pasos en la estancia, supuso que era Draco.

-No quiero verte, quiere que te vayas. Vete Draco! -dice sin voltear a ver.

-Me temo que no soy Draco

Hermaione se queda estatica, era la voz de aquella mujer, lentamente se da la vuelta mirando a su alrededor en busca de cualquier cosa que pudiera utilizar en caso de ser necesario.

-¿Que quieres? -pregunta temerosa aun con lagrimas en los ojos.

-¿Que es lo que quiero?  Esa es la pregunta mas estúpida -alza la voz- Tu sola presencia arruina todo y la de ese estorbo -señalando el vientre abultado de Hermione.

-Yo no te he hecho nada -de forma automatica Hermaione cubre su abultado vientre- Me voy a ir y no voy a regresar. Pero por favor, no me hagas daño -su voz  comenzaba a quebrarse.

-Crees que soy estúpida, él te va a buscar y no va a descansar hasta encontrarte  -lleva sus manos hacia su espalda y saca un arma y apunta a Hermaione.

La castaña siente como sus latidos comienzan a acelerarse, un sudor frio recorrió su espalda y sentía como se dispersaba de pies a cabeza. 

-Crei que ibas a morirte en ese accidente, pero de nada sirvio estropear tus frenos. Fue sencillo hacer parecer que solo eras una estúpida mujer loca que el embarazo le estaba haciendo mal, además de que me facilitaste las cosas por haber ido en aquella carretera -se pasa las manos por el cuello. 

-Estas demente.

-Cállate perra!! 

Escuchan el ruido del motor apagarse, la pelirroja se acerca a la ventana sin dejar de apuntar a Hermaione. Mira a Draco bajarse del coche.

-Vino a buscarte -comienza a reirse- Vamos a tener una reunión familiar bastante divertida. 

Hermaione no paraba de llorar, temía por su vida y la de su bebé. 

-Dejame ir, te aseguro que no voy a interferir entre ustedes de ninguna manera. 

-Dije.. que te callaras! -camina hacia la castaña y de forma agresiva la toma del brazo, mientras apunta su vientre. 

Al subir y ver a Rachel amenazando a Hermaione, Drco sinetio que el alma se le iba. 

-Rachel suelta el arma y deja ir a Hermaione -caminaba de manera lente hacia ellas. 

-No des un solo paso más o disparo -lo amenaza.

-No tienes que llegar a esto, ni ella ni mi hijo tienen nada que ver. 

-'¿No tienen nada que ver? -arruga el entrecejo-  Me enamore de ti Draco, yo estuve en tus peores momentos, yo te habria perdonado todo, cualqueir cosa... menos el que hayas dejo.

-Lamento haberte lastimado, pero jamas te prometi algo. 

-Estuve para ti. A pesar de mis intentos por seducirte y hacer que me vieras como la mirabas a ella, de que me tocaras como lo hacias con ella. Nunca nada funciono.

Draco miraba a su alrededor, en busca de algo que pudiera utilizar, sentia que su mente se fragmentaba en pedazos, asi que acudiria a su ultimo recurso. 

-Si eso es lo que quieres, eso podemos hacer. Solo tu y yo Rachel, pero no tienes que hacer esto, podemos irnos de aqui  y empezar una nueva vida -iba acercandose lentamente. 

La pelirroja comenzaba a ceder, escuchaba idiotizada las palabras del rubio, era lo que mas deseaba en el mundo, tenerlo solo para ella.

-¿Lo dices en serio?

-¿Porque tendria que engañarte? -el  rubio se encontraba a unos pasos de ella, podia percibir el miedo de Hermione. Pues todo su cuerpo se encontraba tembloroso. 

-¿Me crees estupida? Todo eso lo dices para que no le haga daño a esta maldita. Y si no eres mio, no serás de nadie más  -hablo con rabia. 

Hermione cerro los ojos con mucha fuerza, esperando a que pasará lo peor. Draco se lanza sobre ella de un solo moviemiento, comenzando a forcejar. La  castaña se da la vuelya y mira como los dos comienzan una lucha. Draco trataba de quitarle el arma, trataba de no hacer un mal movimientos provocando que algun disparo se escapara. 

-No te interpongas -decia la pelirroja. 

-Basta de esto -responde Draco. 

Hermaione deseo salir de ahí, como pudo saco fuerza para moverse, pues sentia que su cuerpoo se habia congelado. Al tratar de salir de la habitación, escucha un sonido sordo y  puede oler la polvora en el aire, se da media vuelta y puede ver como Draco y la pelirroja se quedaron quietos. 

Sus piernas se volvieron de gelatin ver como el cuerpo de Draco iba callendo lentamente al suelo. 

-Dra.. Draco -dijo en un susurro. 

La pelirroja se queda mirando el cuerpo, con el arma en las manos y manchadas de sangre.

-Yo... yo no ... -no podia articular palabra alguna. 

Deja caer el arma y sale huyendo de la habitación. Hermione corre hacia Draco, rapidamente comienza a hacer presión en la herida y como puede toma el teléfono y llama a Astoria. 

-Te vas a poner bien -decia, quiza para tranqulizarse a si misma- Maldita sea -exclamo, sus manos estaban temblorosas y torpes, su vista comenzaba a volverse turbia  por las lagrimas que comenzaban a salir sin parar.

-Lo... lo siento -habla el rubio con dificultad- Por todo, h-hice las co-cosas mal, te puse e-en peligro a ti y a - a mi hijo.

-No hables ahora, estoy tratando de llamar a Astoria. Trata de respirar pausadamente y tranquilamente. 

-T-te quite todo -comienza a llorar- Estabas tan llena de vida, te qu-quite a tus pa-padres, tu felici-dad

-Maldición Astoria, contesta -estaba cayendo en la desesperación- No hables Draco.

Desesperación, miedo y anguistia. Muchas fueron  las sensaciones que sentia. Tan solo unos minutos se volvieron una eternidad, sentia el tiempo encima y cada segundo que pasaba tenia nulas posibilidades

-No cierres los ojos -le tocaba el mentos- Mírame 

Podia ver los ojos desorbidatados del rubio, luchando por mantenerlos abiertos.

Tenia que actuar rapido y tenia que hacerlo ya.