18. No puedo ignorarlo

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—¡Eres un idiota!—. La voz chillona y molesta de la chica se hizo escuchar en todo el salón.

Estaban los dos solos en el salón, saltándose una de las clases. Park ChanYeol se encontraba sentado en una de las bancas, con el cuerpo de ella encima. ¿Cómo era que se llama? Hye ¿algo? Vaya, no le importaba mucho en verdad.

La chica estaba encaramada en su regazo. Con las piernas abiertas y las rodillas a cada lado. Tenía lo brazos cruzados alrededor de su cuello. Movía sus caderas en un vaivén suave, buscando frotarse con la erección del alto. Erección que parecía no querer aparecer nunca.

ChanYeol no tenía intenciones de tocarla, por lo que mantuvo sus manos lo más alejadas de su cuerpo. Sacó sus colmillos y los enterró sin mucho cuidado en el cuello de la castaña. Ella soltó un gritito agudo de dolor. El vampiro alejó sus labios inmediatamente del cuello e hizo un gesto de asco. Llevó su pulgar a la herida para arrastrar un poco de sangre con él y luego llevó el dedo a su boca para lamerlo.

—... En serio...—. susurró más para si mismo.

—¿Eh? ¿Qué?—. preguntó ella, irritándolo con su molesto tono de voz.

—Sabe horrible. Suficiente—. dijo.

—¿Ah?—-. La chica se sentía confundida.

—¿No me has oído? Dije que es suficiente—. respondió sin expresión.

—¿Suficiente?—. preguntó desconcertada.

—Muévete. Pesas mucho—. La voz cargada de indiferencia terminó por irritarla. Ella apretó los dientes y se bajó de su posición.

—¿No fuiste tú el que me llamó? ¡¿Por quién me tomas?!—. gritó enojada.

El vampiro la observó y bajó la vista resignado y fastidiado.

—Sólo eres comida—. Soltó extremadamente calmado.

Ella lo escuchó llena de irá. Le dio una fuerte bofetada y se retiró de la sala donde se encontraban, dejándolo completamente solo otra vez.

ChanYeol se quedó unos momentos impresionado y aletargado por el golpe que no vio venir. Llevó una mano a su mejilla, levemente colorada.

—Cometí un error—. susurró para si mismo. —No la evité.

Se hizo un ovillo en la banca donde se encontraba sentado. Llevó las piernas a su pecho y escondió la cabeza entre ellas. «Ha sido horrible recientemente, esto está mal», pensó rendido. «No lo he estado comiendo apropiadamente...»

Abrió los ojos con pereza. Dejó escapar un largo suspiro. Se sentía completamente triste. La soledad le dolía. Y no es que fuera por causa de la chica que lo había dejado en la sala. ChanYeol sabía que su malestar era provocado por otro motivo. Por otra persona, en realidad. «...Desde ese entonces». El recuerdo de su ultimo día con el bajito de lentes le llegó. El recuerdo de su suave y cálida piel contra la suya; de su cuerpo pequeño estremeciéndose en sus brazos... de su rostro lleno de lágrimas y sus sollozos doloridos. Y quiso llorar.

*¨*¨*

ChanYeol volvió a su salón de clases en el momento en que el receso para el almuerzo estaba comenzando. Cuando estaba a punto de entrar, se encontró en la puerta con KyungSoo y su par de amigos. El bajito pareció no darse cuenta de su presencia mientras mantenía una conversación animadamente con el par que le seguía. ChanYeol se quedó en la puerta, observándolo fijamente, deseando con todas sus fuerzas cruzar la mirada con el pequeño, no obstante aquello nunca pasó.

KyungSoo, por su parte, sí había notado la presencia del vampiro, era imposible no hacerlo, menos cuando el alto se quedaba viéndolo como solía hacer desde que había cortado su extraña relación. El pelinegro no quería tener ningún tipo de contacto con el vampiro. Giró la cabeza hacia el otro lado, haciéndole prácticamente un desprecio, evitando su mirada, otra vez. Estaba intentando continuar con su vida como antes, lejos del alto, omitiendo e intentando olvidar todo lo que había pasado entre ellos. Su actitud parecía ser dura e indiferente, pero su corazón latía con fuerza y sentía las piernas temblar mientras se alejaba del más alto con rapidez.

ChanYeol se quedó en la entrada enfadado y anonadado, mientras veía como se marchaba de su lado, nuevamente. Abrió los ojos con asombro. Sus pupilas tomaron un tamaño más pequeño. Su boca tomó la forma de una gran "O" y sintió una pesadez que jamás antes había sentido. Gotas de sudor frío comenzaron a caer por sus sienes. Una punzada en el pecho lo hizo salir del trance en que se encontraba. ¿Esto se sentía ser desplazado y olvidado?. «no, no... ¿Por qué estoy tan enfadado?», se preguntaba una y otra vez.

El vampiro se encontraba de pie junto a su asiento, cuando KyungSoo regresó a la sala. «Maldita sea. Este chico dijo que era la última vez...». El pelinegro volvió a ignorarlo por completo, como llevaba haciendo las últimas semanas. «Por costumbre mis ojos terminan buscándolo, pero él no ha vuelto a conectar su mirada con la mía... Y aún así, se divierte con otros». KyungSoo le dedicó una brillante sonrisa a uno de sus amigos, mostrando en todo su esplendor la adorable forma de corazón de sus labios. El alto lo observó de reojo y apretó los dientes. Se mordió la parte interna del labio interior con tanta fuerza que comenzó a sangrar. «Estoy tan furioso». ChanYeol se sentó en su asiento. Se encontraba solo, como de costumbre. El bajito también estaba en su lugar, entablando una amena conversación con JongDae. «¿Por qué el asiento en diagonal detrás de mí me molesta tanto?». Cerró los ojos irritado. «Así no puedo ignorarlo».

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Finalmente se enlistó JunMyeon 😭♥️ se ve tan hermoso calvito 🤭 espero que regrese sano de sus obligaciones.

Tenía un poco de temor de que no apareciera JongDae despidiendolo. Estoy muy feliz de que haya aparecido pese a todo. Se ve tan hermoso con su cara de papá trasnochado. Le amo. Le deseo pura felicidad y salud a su familia.

También me llenó el corazón la historia de instagram de Lay ❤️ directo a mi ot9

¡We are one! ✊❤️

Yo estoy en extremo cansada. Lamento si la historia no cumple sus espectativas.

Sabor A Belladona / CHANSOO // AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora