8

460 15 0
                                    

Entramos y nos acercamos a Sofi y Santi que estaban en la barra ya pidiendo algo los borrachos. Pedimos con ellos y nos pusimos a bailar, ellos dos y nosotros dos.

Al rato se acerca Pedro con Leo atrás. Este último me mira un poco culpable, y es obvio porqué. Admito que soy bastante vengativa y probablemente no tendría que haber hecho lo que hice.

— Podes dejar de bailar con Tomás? —me dice Pedro con cara de orto.
— No, por? —le digo apenas mirándolo mientras sigo bailando.
— Vamos a hablar afuera, no seas inmadura.
— Inmadura yo? Vos te comiste a Camila pelotudo. —le digo enojada.
— Para Vicky, tiene razón, mejor vayan afuera. —me dice Tomás tranquilizándome.

Lo miro y le hago caso, salgo y Pedro viene atrás mío. Lo miro esperando que diga algo y veo que tiene cara de que algo le parece gracioso, lo cual me enoja más.

— Qué, para que querías hablar? Conta el chiste así nos reímos todos.
— Me da risa que me reproches lo de Camila cuando vos te fuiste con Tomás y probablemente te lo comiste también.
— Ah sos un pelotudo. —le digo dándome la vuelta para irme. Que estupido, se pensó que porque subi arriba con Toto lo había "cuerneado" si se le puede decir así.
— Que decís Victoria? —me dice confundido agarrándome del brazo.
— Que subi con Tomás a dejarle en claro que estaba con vos y que no iba a estar con nadie más. Pero sabes qué, para vengarme me comí a Leonardo, así qué ahí tenes algo por lo que enojarte. —le dije re caliente, y me fui caminando adentro para seguir bailando, no iba a dejar que esto me arruine la noche. Ya tendré tiempo para llorar en casa.

Veo que Pedro entra recontra caliente al boliche y sale con Leo a hablar afuera. No quería darle problemas, solo quería que Pedro se ponga en mi lugar, pero creo que me zarpé.

Después de un largo rato le pido a Santiago que me lleve a casa porque no estoy de humor la verdad. Cuando llegamos mi hermano mira al individuo sentado contra la puerta y luego a mi riéndose. Yo la verdad no se que pensar. Santi me saluda y se va.

Pedro está dormido contra la puerta.

— Pedro, despertate. Que haces acá? —le digo tocándole el hombro. Abre los ojos y se sobresalta un poco. Rápido se pone de pie y me mira. Hace silencio unos segundos como pensando que decir.
— Vicky, perdón en serio. Soy un pelotudo. Estuvo muy mal suponer cosas, actuar en base a eso y ni siquiera preguntarte. Perdoname por favor.
— Me comí a tu amigo, no te importa? —le digo mirándolo raro, porque a quien no le importaría?
— Obvio que me importa Victoria, pero me lo merezco. Ya sabía que Camila te caía mal y lo hice a propósito. Aparte se que lo hiciste para vengarte y que no te importa Leo. Te importo yo. —dice acercándose con una sonrisa. Bue pa que vamos a mentir nocierto? Usted es muy lindo De la Vega.
— Dale, pasa. —digo abriendo la puerta y tratando de ocultar mi sonrisa.
Pedro sonríe super grande y me abraza. Me agarra de las piernas y me sube a su cintura.
— Perdón, perdón, perdón, perdón —dice entre beso y beso.
— Bueno Pepo calmate jajajajaj —le digo riendo de su carita feliz.

Subimos así hasta mi habitación y me baja para que me saque la ropa y el maquillaje. El se desviste quedando en boxers. Ay mamá. Me siento una pecadora pero igual lo observo de arriba a abajo porque puedo y quiero. No hay una sola cosa que no me guste de él.

El sonríe sabiendo que me re calienta solamente mirarlo, y se acerca para agarrarme y ponerme en la cama. Nos empezamos a besar mientras siento que sube la temperatura. Esta sobre mi cuerpo y siento como se aprieta más contra mi, por lo que entrelazo mis piernas por su cintura y también lo acerco. No saben cuánto me gusta que nos rocemos así. Seguimos besándonos hasta que empieza a bajar sus besos por mi estómago llegando hasta mi zona. Me saca la tanga que tengo, y la tira al suelo. Me abre un poco más las piernas y rápidamente mete su cabeza entre estas empezando a lamer. Me toma un poco por sorpresa pero no puedo evitar sentir placer. Sigue un rato más en el que solo se escucha como gimo, hasta que decido hacerle el favor a él. Bajo su boxer y agarro su pene entre mi mano. Me acomodo y bajo mi cabeza para chupar la punta mirándolo a los ojos, porque se que eso les gusta. Sigo ahora metiéndolo todo en mi boca y empiezo a subir y bajar, mientras me ayudo con la mano. Pedro gime y aumento la velocidad, después de unos minutos me avisa que va a acabar y sigo hasta que siento el líquido caliente en mi boca. Lo trago y Pedro se acerca para besarme. Abro el cajón de la mesa de luz y saco un preservativo. Tenía un par, hay que estar preparadas. Se lo paso y paramos para que se lo ponga. Cuando lo hace se pone arriba mío y entra en mi sacándome un gemido. Tenía ganas de esto, y más con el. Empieza a moverse más y más rápido mientras yo siento que estoy gritando un poquito fuerte así que me calmo. Al rato le pido si me deja arriba y empiezo a subir y bajar mi cadera sobre el cada vez más rápido hasta que se queja y siento como el liquido caliente llena el preservativo. Salgo de arriba suyo para que se lo saque. Le hace un nudo y lo tira al piso. Se da vuelta para abrazarme mientras yo nos tapo con las sábanas.

— Sos tan hermosa. —me dice abrazándome mientras nos acurrucamos.
— Vos lo sos, Pedro. —le digo mirándolo a los ojos.

difícil -Pepo De La VegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora