Nuevo día, despierto tarde como de costumbre, los días fríos solo me dan ganas de dormir y dormir, como un oso si es posible pero no puedo, mis padres hicieron planes de comprar útiles y salir a comer, solo me queda obedecer y no resongar, no quiero empezar una pelea el segundo día de mudanza.
-¡Emma Dayan Ross espero que ya estes lista o sino veras como te va!- me comunica Sara, mi hermosa y adorada madre.
-¡Voy, solo falta cambiarme!- que mentira mas grande.
Bueno hay que mantener la calma, solo me falta bañarme y arreglarme, no es mucho, considerado que cuando mi madre me grita solo tengo veinte minutos de plazo para bajar, sip, todo en orden, un baño de 15 minutos y ponerme lo primero que vea, no hay fallas en mi plan.
-Hasta que al fina bajas cariño, ya te iba a bajar de las greñas, sabes que no me gusta que me hagan esperar- pobre de su marido.
Solo asiento con la cabeza y me dirijo a la cocina, tomo una taza con café y tostadas, no hay tiempo y creo que tengo dos ojos quedándome la nuca por que me estoy tardando, amo a mi madre pero que necesidad de estar apurando a las personas, solo es comprar unos útiles y ya. No es que fueramos a ver a la Reina de Inglaterra. En el auto me pongo a inspeccionar mi atuendo, en realidad solo me coloque un jean negro, un buso azul bebé y mis converse altas negras, todo normal, y mi cabello esta alborotado, se me olvido peinarlo, no son penas, total solo es para salir a una tienda, ni modo que me encuentre un galan salido de película y se me quede mirando como un bicho raro que viene del espacio.
-Emm esperas en el auto o vienes con migo- dice mientras retoca su maquillaje con ayuda del espejo del auto.
Viendo bien a mamá, su atuendo es muy, como decirlo, ¿llamativo? Un vestido color azul rey con escote en v, corte hasta las rodillas y unos tacones de aguja negros, la descripción que hize puede parecer sencilla, pero viniendo de ella es todo lo opuesto, y mas con su maquillaje, cualquiera dirá que no tiene esposo, tal ves ella sigue aquel comentario que escucho mucho "primero muerta que sencilla".
- y que dices tesoro, ¿si o no?- pregunta viéndome a los ojos con una ceja alzada.
Como coños hace eso, yo lo intento y nunca me sale, ni para perrear soy buena..
-Si, no quiero quedarme aquí encerrada y morir por falta de oxigeno- digo saliendo del auto.
Mamá solo pone los ojos en blanco sale también, la tienda no es que se vea bien, pero tampoco mal, los cuaderno son de un solo color y aburridos, creo que extrañaré los de muñequitos, elegí todos mis cuadernos de color morado y azul, los lapiceros, bolso y marcadores, aunque sea maniática por las cosas de oficina aquí no hay nada que me llame la atención. Siguiente punto, supermarket, tenemos que hacer las compras de la casa y eso significa, helado y nutella para ver películas, mi madre se encarga de las frutas, verduras y carnes, yo me encargo del cereal y golosinas, soy muy fan de las gomitas de oso, así que me encaminó al pasillo avisándole a mi acompañante, no estaba muy lejos, solo a la vuelta y mano izquierda, el pasillo llamado paraíso, al menos este pueblo tiene golosinas super ricas, le hecho un ojo a la lista que hice en el auto..
Compras para la casa a cargo de Emma
-ositos de goma
- tres litros de helado de chocolate y limón
-cinco tarritos de nutella
- serpientes de goma
-cereal del tigre, elefante y loro
- solo por si queda presupuesto, unas galletas con chispas de chocolate.Fin💟
Bueno, a cumplir con mi deber, osos de goma, camino por el pasillo, tengo todo localizado menos los osos, ?será que ya no hay? No seas pesimista Emm, aun hay que mirar lo estantes mas altos, los que una enana de 1.59 no llega, miro cada cosa que hay hasta que por fin, ahí están, en toda su gloria, ya quiero saborearlos, cuando me dispongo a alcanzarlos una mano me los arrebata, WTF!!!!, se atrevieron a hurtar mis osos de goma, con mi peor cara de enfado me dirijo hacía aquel personaje lo llamo...
- ¡Ollé tú, ladrón de osos de goma, dame lo que es mío!- digo con mi ceño fruncido y postura tiesa.
-Solo te los iba a alcanzar, hice cálculos y ni saltando podrías tomarlos- dice de forma natural y tranquila.
-Bueno ya los alcanzaste ahora dame los- sigo con mi postura.
Sin mas solo los dejo en mi mano y se fue, ja, quien se cree este, no soy ninguna damisela en peligro para que venga un principe palido y de ojos dorados a rescatarme, doy media vuelta y me dirijo donde mi madre cuando ya tengo todo lo de mi lista.
-Te tardaste cariño, ¿con quién andabas?- me pregunta alzando su maldita pero bendita ceja.
-Solo... No encontraba mis osos de goma- dije sin mas- además, ¿por que dices que andaba con alguien?-.
- Te vi con un chico eso es todo, y tengo intriga, segundo día y ya haces amigos, ¿acaso eso no es bueno?- pregunta mientras pasa las compras.
- Solo era alguien que me ayudo con los osos de goma.... Aunque yo hubiera podido sola- lo último lo dije solo para mi.
No comento nada, solo cogió sus debidas bolsas y me paso las mías, fuimos al auto y guardamos todo, ya que lo pienso, nunca vi a alguien tan palido y con ese color de ojos, quizá se metió un polvo y fue a caminar por las calles, llego a un supermarket y me ayudo, y lo palido, tal ves sea desendiente de Drácula, es es la explicación mas lógica.
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Verde, Azul Y Dorado
FanfictionEmma Ross, una chica que nació con una enfermedad hermosa, pero el mundo no lo ve así, en sus anteriores escuelas sufría de tales abusos que les tocaba mudarse, ahora están en Forks, un pueblo donde lo sobre natural esta latente, pero claro, las per...