Dodici

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Y los años fueron pasando, y para desgracia de nuestra protagonista esta tuvo que irse a Japón  unos años antes de que Giorno cumpliera quince. Alice aún recordaba su despedida con Giorno y la entrega de su relicario.

Flashback

—Giorno, debo irme a Japón—le informo Alice con tristeza.

—Pero, ¿por que?—pregunto el pelinegro con tristeza.

—Como creo que ya sabes, yo soy rica. Mis padres acaban de fallecer y debo tomar las riendas de la Industria familiar y para eso debo ir a Japón y organizar lo todo.

—Bueno...¿por cuanto te iras?

La ojiazul hizo una leve mueca de tristeza.

—No lo se, Giorno. Pueden ser meses o años.

El ojiverde bajó la mirada, no quería llorar frente a ella.

—Giorno...—ella lo tomo del mentón y le hizo mirarla—. No importa que tan lejos este, por mas que no me veas siempre voy a estar ahí, vigilando te y cuidándote —lo abrazó.

El abrazo duro alrededor de tres minutos, y finalmente ambos se separaron.

—Antes de que me vaya...—la rubia sacó su relicario y lo puso en manos de Giorno—. Cuando vuelva, te diré quienes son las personas en la foto. Y ten a mano el relicario cuando estés en problemas.

Beso la frente del pelinegro y dijo una última vez:

—Adiós, Giorno.

End Flashback.

Cada vez que pensaba en su sobrino, le daban ganas de empacar y salir corriendo hacía Italia. Pero sabía bien que aún había asuntos por arreglar, pero una vez que todo estuviera en orden, iría por Giorno.

"Es una promesa."

***

La rubia empacaba apresurada mente sus maletas. Finalmente había resuelto todos los problemas de la empresa familiar y finalmente podía volver a Italia. Podía volver a Giorno.

Antes de seguir empacando, esta reviso la fecha en el calendario de su escritorio. Año 2001.

"Giorno ya tiene 15...Espero que haya recibido todos los regalos que le mande estos años."

Decidiendo no distraerse, volvió a la labor de guardar toda su ropa. Si quería ver a su sobrino con anticipación era mejor que se apresurara. Estaba realmente emocionada de verlo.

Claro que también estaba emocionada de contarle de su familia. Sobretodo de los Joestar, estaría mas que feliz si Giorno y los miembros de la familia Joestar tuvieran contacto fijo.

—Señorita, ¿Ya esta lista?—pregunto una sirvienta del otro lado de la puerta.

—¡Ya casi! ¡Dile a los demás que suban el equipaje ya listo a la camioneta!—gritó la rubia mientras seguía empacando.

—¡Entendido!—y se oyó sus pasos alejarse.

Alice suspiró algo irritada, quería irse de inmediato.

Guardian Angel [Vento Aureo]Where stories live. Discover now