TU ACTITUD
justifica la mía.Y lo recuerdo cómo si hubiera pasado hace unos instantes. Un recuerdo incesante, palpitante, susurrante en los oídos de la mente.
La mejor amiga de La Chica De La Pulsera De Elefante, o mejor conocida: La Chica Que Fuma En Vez De Respirar.
Ésta organiza una cena, una noche para no dejar de mirar. Sin dudar, al principio era de lo más aburrido, con el pasar de los instantes se volvió más interesante.
El sencillo y ridículo juego de verdad o reto, se dirigió a mí como una burla que debí predecir. Respuestas y acciones inolvidables.
Y, una de aquellas acciones, hizo que todas aquellas indirectas, diálogos y coqueteos se aclararan de una vez. Puede que haya captado mal las señales.
Aquella acción no debió de ser una broma. Si no, un minucioso juego de asaltos entre cadenas perpetuas de miradas.
Aquel reto patético, decía que debía besar a mi izquierda. Aquel beso le pertenecía a La Chica De La Pulsera De Elefante.
Nos reímos al principio. Luego nos miraron, nos miramos y como si estuviesemos conectadas nos acercamos al mismo tiempo. Ella acercó muy despacio sus labios carnosos a los míos y yo, pues, acerqué los míos para terminar el sello.
Admito que no fue asqueroso. Se sintió muy bien. Aclararon muchas cosas y confundieron muchas más. La masa de mis sentimientos seguía con grumos, y era inevitable dejar de revolver.Fue un beso cálido, suave, amistoso y puedo jurar que en esos instantes pude haberme quedado con más ganas. Más ganas de sentir sus manos sobre mi cuerpo.
En instantes, estábamos de nuevo en aquella agonía de quedar bien delante de otras chicas.
Necesitaba entablar una conversación, en algún momento, sobre lo que sucedió. Sin embargo, no podía, porque lo que mi cuerpo pedía era un sufrimiento en silencio.
Su cuerpo sobre el mío. Sentir sus besos en mi cuello y entre mis pechos.
Y SI QUERÍA QUEMARME,
quería que fuese con ella.Era verdad. Quería fundirme en su piel. Leer sus pensamientos. Poder tocar aquellos pechos de pura lujuria. Sin embargo, debía quedarme en mis cabales. Sería insensato querer algo así sabiendo que eres hetero.
¿Y sabés? Estaba tan confundida que no sabía si era hetero o no.
No la veía mucho, pero cada que la veía, necesitaba compartir un cigarro con aquella boca.
Con el tiempo, entendí que quizás era pura cosa mía. Con el tiempo, descubrí que había más personas en el club de sus encantos. Que había más gente incluida en el estar enamorada de su belleza.
Podría decirse que no debía de estar de esa manera. Sentirme despreciada de mi misma. A veces, creí que no le agradaba y solo me hablaba por ser amiga de La Chica Que Fuma En Vez De Respirar.
La locura de sentir esa sensación de no saber que sientes en realidad por esa persona. Descubrir que no solo te gusta un género, si no, que te gusta tu mismo género.
Nunca creí que me pasaría algo así.
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La Chica De La Pulsera De Elefante © ✔️
Short StoryLa Chica De La Pulsera De Elefante. Alguien tan misteriosa. Alguien tan sarcástica, pero graciosa a la vez. Su cabello de rulos oscuros. Sus ojos ocultos detrás de cristales por su tan poca visibilidad. Sus labios gruesos, y húmedos a lo que alguna...