Casi perfecto

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¿Qué es la perfección si no es ese momento cuando te despiertas del lado de tu amor y crees que quieres que sea eterno?

Filosofando para decir que este capítulo es para ti, con todo mi corazón ...

PD: caliente, caliente, caliente! 🔥🔥🔥

...Palabras de su autora...

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El concepto de perfección siempre ha sido visto por mí como sobrevalorado. No sé tú, pero aprendí de estos últimos años de mi vida que cuando alguien dice que algo es perfecto, puede estar equivocado, a propósito o no. Esta cosa de querer mostrar a los demás que no hay defectos en nada, física, mental, en la relación, en el trabajo, en la familia, es pura ilusión. Ni siquiera entiendo el concepto de la palabra porque mi vida nunca se ha acercado siquiera al estándar de ella. Mi cabeza siempre ha sido un caos y nunca ha seguido a mi cuerpo. Este, a pesar de estar más en paz con mi cabeza, tenía cicatrices por todos lados. Ellos, causados por berrinches de la persona que amaba, que también tenía problemas de cabeza y cuerpo. Ni siquiera titubeó en su propuesta de matrimonio, en medio de cables conectados a mi cuerpo y mi novia, sí novia, recién salida de un coma. Pero analizándolo bien ahora, creo que Valentina y yo podemos decir que nuestro "perfecto" es de esta manera caótica. Nos complementamos en nuestro pequeño mundo, donde una se retrasa y la otra es astuta. Una dulce y conquistadora, la otra introvertida y seria. Incluso podrían pensar que no embonamos, pero ¿qué sería más perfecto que hacer de la adversidad nuestra rutina?

Hace tres días estábamos en casa. Increíblemente, ella fue dada de alta antes del hospital. De hecho, no era sorpresa, si pensara que mi condición de lentitud podría tener algo que ver con eso. Salí justo después, acompañada por mi madre, que nos cuidó a las dos como si cuidara a un pajarito que se cae del nido, dándonos golosinas y el calor de la madre. A veces miraba a Val sabiendo que estaba pensando en cómo extrañaba tener una madre, cómo extrañaba tantos momentos con su familia y que nada podía reemplazar este amor, incluso si su suegra le prestaba más atención que a mí, Su verdadera hija.

Antes de ser dadas de alta, pasamos por tantos exámenes que ni siquiera sé cuántos litros de sangre perdí nuevamente. No les importó la pobre niña que había dado casi toda su sangre a su novia en peligro de extinción. Pero lo que se encontraron es, que debido a que tenemos este tipo de sangre, tan raro, tenemos la ventaja de que su producción sea diferente, al menos eso es lo que entendí cuando el médico nos explicó y nos pidió, de una manera delicada, sin obligarnos, donar sangre y tiempo para estudiarnos más profundamente. Val y yo nos mostramos reacias al principio debido a nuestro pasado, donde nos pincharon varias veces y nos trataron como ratas de laboratorio. Dijimos que pensaríamos, lo que satisfizo al médico que nos ayudó en este tiempo.

Nos encontrábamos en nuestro departamento, después de lo que pareció una eternidad. El primer momento estuvo lleno de emociones. Tan pronto como Val abrió la puerta para que yo entrara, ya estaba llorando y abrazándome fuerte, como si no me hubiera visto en años. Sentí que comenzaba de nuevo con ella. Sería nuestro cuarto comienzo, nuestra cuarta oportunidad y esperaba que fuera la última vez que tuviéramos ese sentimiento, en lugar de solo vivir y estar juntas. Solo quería ser, estar, vivir con ella. Solo necesitábamos no pensar que mañana tendríamos que sobrevivir a otro torbellino de emociones o que no íbamos a disfrutar, comer y amar.

- Mi amor, estoy preparando algo para que comas. ¿Tienes hambre? - Eran las tres de la tarde, pero confieso que no quería comer. Solo quería acostarme con ella en nuestra cama y quedarme allí hasta que nos cansáramos una de la otra, lo cual estaba bastante segura de que no sucedería.

Lo que queda atrás | Juliantina I TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora