de cara a la pared

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La tunda había terminado, el trasero de Ian estaba rojo y ardiendo además que le dolía mucho.
La mano de su castigadora estaba sobre su trasero acariciándolo y deleitándose con la sensación  que este le otorgaba.
Has sido un niño muy travieso, es por eso que mami tuvo que castigarte, y te aviso desde ya amor, que si vuelves a reprobar alguna asignatura, te daré los azotes con un cinturon, y creeme que no te va a gustar.- le dijo Samantha con voz suave pero autoritaria.
No, mami, le prometo que nunca más lo hago.- le respondió el "niño" .
Bien cariño, ahora te quedarás de cara a la pared por lo próximos 10 minutos y sin tocarte el trasero , entendido.
Si mami.
Samantha ayudo al joven a ir a la pared eso le permitiría a ella ver su obra de arte en todo su esplendor.
Una vez que Ian estaba en la pared más por un acto inconsciente se llevó las manos a su trasero para apasiguar el dolor, ese movimiento no paso desaparecido por su madre, la cual no dudo en regañarlo.
Que te dije, nada de llevar tus manos a tu trasero, es que no eres capaz de obedeceme.- dicho esto estampó su mano en una de las nalgadas del "niño" con una fuerza que no ha la aplicado en toda la "tunda".- vas a obedecerme y la única manera de que lo hagas es que vuelvas a mis piernas.- Samantha se acercó a su bolso y de el extrajo un cepillo de madera, una vez que ese instrumento estubo en sus manos se sentó en la cama.- ven acá jovencito es una orden.
Ian estaba parado viendo a esa mujer con un cepillo en sus manos diciéndole que volviera a ponerse sobre sus piernas para que le azote sus ya doloridas nalgas con eso.
Samantha al ver que no se movía se paro y lo afirmó fuerte y de su brazo y lo jalo a la cama.
Te voy a castigar por desobediente, vas a aprender que a la mamá se le hace caso, y si no lo haces habrán consecuencias.- después de decir eso y aprovechando que el joven estaba en shock, Samantha lo jalo hasta dejarlo sobre sus piernas, lo acomodo, levanto su mano con el cepillo y lo dejo caer sobre la nalga izquierda del joven.
Esta vez no le pregunto sobre su palabra de seguridad, está tunda sería un bono extra que ella le daría a ese lindo niño.
Paf paf paf paf paf paf paf paf paf paf paf paf paf.
Era lo que se escuchaba en la habitación, el sonido que emitía el cepillo sobre el las nalgas del joven.
Ay aya aya ay ay basta. Por favor, Pikachu, Pikachu.
Por más que el niño dijera su palabra de seguridad la mujer no se detenia
Después de 20 azotes en cada nalga, cuando ya el joven se canso de gritar y solo lloraba sobre la cama, Samantha se detuvo.
Sabes por qué castigue siendo que ya había terminado con tu castigo por las malas calificaciones.
Por haber desobedesido.- dijo Ian apenas en un susurró.
Bien, ahora te vas a levantar y te vas a poner de cara a la pared hasta que yo te diga lo contrario y sin tocarte el trasero.
Si mamá.- el joven se levantó y esta ves si la obedeció, estubo mirando a la pared unos minutos hasta que "su madre" le permitiera salir de esa penitencia.
Unos minutos después la joven lo llama.
Cariño ven a la cama
Cuando el joven ve la cama se da cuenta que habían unos cojines en ellas, el había visto en algunos vídeos ( videos que vio para saber un poco que de se trataba esto antes de esa cita) que los cojines se usaban para que el presento del Spankee quedará más levantado y disponible al castigo que el Spanker le diera. Eso significaba que volveria a ser castigado por esa hermosa mujer.
Ven necesito que te recuperes en la cama,  coloca los cojines en tu abdomen bajo.
El joven con paso lento se dirigió a la cama he hizo lo que se le ordenaba, una ves acododado espero que volvieran a azotar su trasero pero no fue así, la mujer estaba aplicándole una crema.
Esto ayudara a qué te sientas mejor, es una crema hidratantes y cicatrizante, es a base de Aloe vera, rosa mosqueta y mágico.- la  voz de la chica era dulce y sus manos se sentían muy bien en su trasero, tanto cuando lo azotaba como ahora que lo acariciaba.
Ya se va a acabar el tiempo por el cual contrataste mi servicio, espero que lo hayas disfrutado de esta experiencia y si quieres volver a repetirla solo seleccioname en la página, con gusto vuelvo a ser la madre de un niño tan lindo, ah y discuplame por los cepillados pero te los ganaste por desobedecerme, te regalo la crema usala tres veces al día.- dicho esto la mujer se levanta de la cama y se acerca a su bolso y sale de la habitación.
Ian se levanta de la cama se arregla la ropa toma la crema que esa mujer le regaló y salió de esa habitación,  deseoso de volver a su casa prender el PC y agendar otra cita con esa chica.

niño bueno, se merece un castigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora