Rosas • wos

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"Sobre todas las cosas en las que deseo creer acerca del amor, la verdad y lo que significas para mi, la verdad es que, nena, eres todo lo que necesito"

Esa noche te quedaste conmigo, abrazándome como si tu peor miedo fuera que me aleje.

Me habías dicho que desde que nos cruzamos en la puerta aquel 2018, no habías dejado de pensar en mi, y que coincidencia que yo tampoco haya dejado de pensar en vos desde ese momento.

Susurrabas un "te quiero" cada cinco minutos, como si sintieras que me los debias. Me pediste disculpas y aproveche ese momento para confesarte todo lo que me hacias sentir.

Esa noche te vi llorar de impotencia, te vi reír por anécdotas viejisimas, te vi ser libre sobre un beat que sonaba de fondo, te vi soñar abrazándome y te vi amarme al reflejarme en tus ojos.

Habías jurado insistir todo lo que podíamos para hacer funcionar esto, pero ir contra tres personas importantes, para vos más que nada, era complicado.

Roma mordía sus uñas nerviosa explicándome las razones que tenía para aceptar el matrimonio y en todas aparecian sus padres. No quise meterme en eso, es su decisión y aunque no esté de acuerdo debía respetar lo que elegía

Me había dejado claro que una punta eran sus progenitores y otra yo, era razonable, le daba el gusto a los papis y viviría como una dama lujosa de aquellas que vacacionaban los sábados en Canadá y los Domingos en París, mientras que si me elegía a mi ¿Qué iba a conseguir? ¿Qué tenia yo para ofrecer?

Un poco de talento tal vez, rimas viejas en un cuaderno sin tapa, canciones tristes que pocos comprenden, una vida de nostalgias, adicciones y malas miradas, que por ella estaba discuesto a cambiar. 

Esa noche me besaste como nunca te habías animado a hacerlo, pasaste tus dedos por mi cara tantas veces como si estuvieras guardando las medidas perfectas en tu cabeza, repetiste que me querías y te dormiste en mi pecho escuchando a mi corazón latir por vos.

Se sentía todo tan soñado, tan lejos de la realidad que al día siguiente no me sorprendí de no verte al despertar.

¿Esto era una despedida Roma?