Nunca entendí por qué todo cambió, decían que iba a ser fácil, que en un abrir y cerrar de ojos aquel tormentoso día acabaría, es una lástima que haya sido de esos días con sabor a años. Vemos lo monótonas que pueden ser las rutinas de la vida y su curso y pensamos: "¿Por qué no cambiarlas?", pero con el paso del tiempo lo más simple se vuelve complejo y comprendemos que los elementos básicos de la vida son intocables, algo que muy pocos de nosotros (honestamente ninguno) logramos entender: el verdadero significado del "¿Por qué NO?".
Todo comenzó como cualquier historia comienza, de la peor forma posible. Y yo se las voy a contar, de la mejor forma posible;aunque haya cosas que sean mejor no contar...
Ahora que me pongo a analizar mis recuerdos, me doy cuenta que es curioso y extraño cómo algunas memorias se vuelven lo suficientemente grandes para trascender en la historia de las humanidades. Muchos no conocen más allá de lo que se les ha contado en realidad: saben que hay una mitología griega, pero su ignorancia no les permite contemplar más de 6 o 10 dioses; saben que tienen un océano, pero nunca se preguntaron qué había debajo; conocen personas día a día, pero pocos llegan a encontrar el verdadero significado de la existencia de esas personas, algo que yo no tuve la capacidad de ver claramente en su momento.
Hace tres meses los chicos y yo nos reunimos en París después de mucho tiempo para charlar (debo admitir que no le tomó mucho tiempo en recuperar su especial resplandor; además era una de las pocas ciudades que aún nos abrían las puertas tras el "incidente"). Bueno, ¿dónde iba? Ah, sí, sí la charla. Pasamos horas ahí sentados mirándonos las caras, bebiendo café barato y llegamos a tener la idea de que aquello que nos rodeaba era nuestra culpa; no sé si la sociedad crea que es justo echarle todo el peso de la balanza a 12 "inocentes" jóvenes pero la realidad era que la llamada inocencia se había perdido. Ya no había una creencia global, ya no había una razón por la cual seguir viviendo, ya no existía una meta o un sueño, todo se había vuelto banal, el sol podía brillar días enteros pero nosotros no teníamos una razón para contemplarlo o admirar su imagen...ya no había nada.
Uno de nosotros llegó a sugerir que quizás la solución más lógica era que nosotros debimos haber muerto el día del "incidente", que quizás un nuevo mundo florecería tras el deceso de quienes levantaron la maldad del anterior.
Recuerdo cuando pensaba todo lo contrario, quería ser uno más: el típico alumno de primer año de secundaria dispuesto a ser, simplemente, uno más; la misma mochila de moda, el mismo uniforme "reluciente", los mismos niños frente a mis ojos igual que cada miserable año de mi existencia... pero al día siguiente todo era cambio tras cambio.
Dicen que la vida es una sola; la cruda verdad es que cuando empieza la siguiente uno ya no recuerda la anterior, no se sabe si es por el simple hecho de que el cerebro le deja espacio a las nuevas cosas que uno irá aprendiendo con el paso de sus nuevos años, o es quizás porque la anterior fue tan miserable que la persona misma solo desea olvidar. Tal vez ese sea mi caso, o tal vez el de muchos, pero lo más importante: es mi caso. Sigo sin entender los hechos por más que los ordene de un millón de maneras, ¡Era solo un niño! Tenía apenas 12 y ya tenía cargas en la espalda hechas responsabilidades: liderar un equipo de chicos que ni caso me hacían, me hacían estar día tras día en la seca y ardiente soledad, cosa que tal vez al final haya cambiado, pero seamos honestos: el corazón solo sana por afuera pero por dentro la llaga se encuentra tan abierta como la de nuestro "Señor". Tenía que entrenar día y noche para dominar algo que yo no quería, encerrarme en mi elemento clave y alejarme del resto del mundo solo porque mi destino era estar por encima de él, pues tal y como decía mi mentor: "Uno no puede atraer las bondades de lo ajeno si primero no controla los defectos de lo propio". Sabias palabras, ¿no?
Pero, ¿a mí qué me importaba? Tenía 12 años, apenas estaba empezando a descubrir la pornografía y él ya quería introducirme a la filosofía espiritual. En fin, sigamos: había una guerra avecinándose y yo no estaba "listo" por así decirlo. "El ejército de a uno", un gran honor ser llamado así, ¿no lo creen? Tonterías, todo estaba bien antes de que ellos lo arruinaran.
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Spirithia I - Asesinos
FantasySpirithia es un universo post-mórtem donde se juntan las almas de todas las personas cuando mueren. Al morir, las almas deberán conectarse con 1 de los 12 elementos naturales del mundo que juntos forman la vida. Esta conexión elemental permite que l...