Mentiras

658 78 16
                                    


Las clases comenzaron cuando la profesora de aritmética ingresó al aula, dio una rápida bienvenida a los alumnos. Pero se la veía un poco frustrada, así que decidió no dar clases hoy, le interesaba saber lo que sus alumnos hicieron en las vacaciones; ella fue la profesora del grupo desde que comenzaron el primer año así que de alguna forma se llegó a encariñar con ellos.

Uno a uno fue preguntando a sus alumnos sobre sus vacaciones, cada uno tenía la misma historia y le gustaba saber que la pasaron bien. Otros sin embargo se dedicaron a rescatar el año rindiendo los exámenes en la última oportunidad para estar aquí.

-Me enteré por allí de que una alumna se casó con otro. - la profesora miró directamente a los hermanos.

Todos los ojos voltearon hacia ellos, pero los dos solo se rieron.

-No estamos casados, profe, somos hermanos. - comentó Sharon.

Tanto Steve como Pepper fruncieron el ceño ¿Qué? espera ¿No eran novios? Los de la pandilla también pensaron lo mismo.

-Nuestros padres se casaron hace como dos meses, pero ya viviamos juntos. - continuó Tony.

-Oh ¿Y dónde fueron a festejar la boda? Por aquí no escuchamos nada de eso, no sabíamos que el famoso Howard Stark se volvió a casar. - La profesora se sintió intrigada ante eso.

-Bueno, es que nos fuimos a Inglaterra, allí se casaron. - Sharon habló.

-¡A Inglaterra! ¿Por qué hasta allí? - Tony frunció el ceño ante la curiosidad de la profesora.

-Pasamos una temporada en el Roehampton. - el castaño quiso alargar la pierna para patear a su hermana por ser tan lengua larga. - es que Tony tenía que mejorar en la danza y yo en el canto.

-Ah, si es por la presentación de la clausura ambos estuvieron fantásticos. -

Tony miró amenazadoramente a Sharon, Ty se aguanto la risa, debía felicitar a la rubia por la gran safada que dio.

-¿Y vos, nuevo alumno? Tiberius Stone. - preguntó la maestra.

-Pues estaba en Europa, de vacaciones con mis padres. - comentó, la maestra se sorprendió.

Luego de preguntar a cada uno sus actividades hechas en las vacaciones decidió empezar las clases; los alumnos asintieron.

-------------------------------------

Iban caminando con dirección a sus casilleros, Tony regañaba a Sharon por ser lengua larga y mencionar al hospital; la chica se defendía con la excusa de que ni ellos mismos conocían el hospital antes de buscarlo en internet; así que sus compañeros y maestra no lo reconocerían ni buscarán en el internet. El castaño no veía la hora de estar en su casa, acostado en el sofá jugando videojuegos con Sharon, de seguro Howard estaría trabajando al igual que Peggy, así que podrían holgazanear por mucho tiempo.

-Ya verás hermanito, hoy te mataré. - desafió la rubia abriendo su casillero.

-Eso lo vengo escuchando desde la semana pasada. - se burló.

-Mirá, son los incestuosos. - la voz burlona de Clint hizo que los dos pusieran los ojos en blanco.

¡Un jodido momento de paz! suplico Tony.

Ninguno de los dos les prestó atención, simplemente se dedicaron a guardar sus cosas y a cerrar su casillero para después caminar hacia la salida. Divisaron la camioneta negra que los esperaba; desde que regresaron, Jarvis no les quitaba el ojo de encima, parecía un búho vigilando a ambos jóvenes; se portaba como una mamá gallina.

Con cierta alegría se subieron a la camioneta comentando al mayordomo sobre su primer día de clases.

Omitiendo la parte de Justin Hammer.

Cuando llegaron a la casa, claro, una nueva casa. Howard ni loco metería a su hijo en una mansión donde había vivido un infierno; así que vendió la mansión Stark y compraron otra. Más pequeña en la edificación, pero con un gran y hermoso patio en donde los cuatro pasaban más tiempo disfrutando de la familia. Estaba a las afueras de Brooklyn, mucho más cerca del colegio; además que la fachada era totalmente diferente a la otra; esta mansión tenía el estilo de las casas inglesas que tanto amaba Howard, tenía la piscina en el interior pero las grandes ventanas se podían abrir para dejar entrar el cálido sol.

A los jóvenes les encantó cómo la modernidad se mezcló con lo antiguo, Tony le presentó a Viernes y la IA ya estaba super instalada en la casa.

La parte favorita de Tony era el gran salón de arte, había un gran espacio para la danza con enormes espejos, el piso formaba un hermoso patrón de colores circulares; además había un piano de cola negra frente a uno de los ventanales. Habían caballetes de diferentes tamaños con lienzos y mesas con todos tipos de pinturas. Había cuadros que el castaño y la rubia había pintado en el hospital, cuando tuvieron que expresarse mediante pinturas. Una resaltaba entre ellas: la de Tony mirando hacia el exterior, con las piernas cerca del pecho y la cabeza entre las rodillas. Estaba pintada por Elizabeth, fue la que más encantó a Peggy entre todas. Esta pintura estaba colocada a la pared que miraba frente al piano.

Era el sitio favorito de Tony, desde niño aprendió a tocar el piano y, lo que antes era un hobbie, ahora era un tipo de escape, un modo de expresar sus sentimientos. De su alma salen las mas hermosas pero tétricas melodías, resonaban en toda la mansión, a Howard no le gustaba muchas veces como su hijo realizaba macabros sonidos, pero entendía que si no lo hacía se quedaría en el alma de su niño por la eternidad. Así que, como su amada esposa e hija se sentaban a contemplar al castaño, él lo hacía, a veces todos salían llorando. Había veces que Sharon y Tony cantaban canciones, liberando el alma de ambos.

-----------------------------

Los dedos de Tony se deslizaban con armonía sobre las teclas blancas, produciendo una melodía oscura que resonaba en todo el salón; la luz del atardecer le daba el toque oscuro que faltaba, no era algo triste sino algo oscuro, no había depresión en esa composición; Howard se dio cuenta de eso cuando entró al salón para avisar a su hijo de algunos cambios en la industria.

Y vaya que cambios; en una discusión antes del desastre, su hijo le había reclamado sobre la fábricas de armas que estaba financiando y realizando, diciendo que estaba matando a millones por más que la venda al ejército si o si terminarán en manos enemigas. Tony le dijo que además de matar a millones de personas, lo estaba asesinando a él. Así que, luego del intento de suicidio de su hijo, cerró totalmente la fábrica de armas, por astucia de Tony al dejar totalmente inutilizable el misil, el Jericó nunca abandonó su sítio.

Pues su retoño se encargó de desactivar de forma permanente el arma, eso sin su permiso, pero tampoco nunca la volvió a activar, y ahora menos.

-¿No fue bien? - preguntó cuando se sentó en la banqueta.

-No mucho, me odian. - respondió con simpleza.

-Bueno, tú lo quisiste así. - dijo. - pero existe algo llamado verdad.

-No, papá, no les voy a decir. - siguió, pero la melodía fue decayendo a algo tenebroso.

-Tony, no dejes que ella gané, sé lo mucho que amas a Steve y a tus amigos. - la melodía subió de tono. - además, si quieres liberarte de todo dolor, debes hacerlo por completo.

-¿Crees que me perdonarán? -

Howard tardó en responder.

-Sí ellos quieren, lo harán. -

La melodía terminó.

Teenage DreamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora