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Hola, bienvenidos Chicas/os.

Una nueva actualización, después de tanto tiempo y se debe aprovechar la cuarentena, así que espero les guste este capítulo.

Los personajes de Dragón Ball Z, no me pertenecen, son propiedad de Akira Toriyama. Al igual que los personajes de Resident Evil pertenecen a la empresa japonesa CapCom.

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FanFiction: Mikashimota Z

PD: Perdón si tengo algún error de ortografía.

PD2: Perdón por demorar tanto

Capitulo: 43 de Dragon Ball Z

MoonWalker/Otaku/Jacksonera- She Drives Me Wild

Advertencia: Esta historia no sigue líneas del tiempo.

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Antes del salir del baño se las había apañado para acomodar las prendas que el moreno le había ofrecido, llevando sus ropas ensangrentadas en una bolsa donde antes había traído alimentos para el moreno, teniendo suerte de que el chico no hubiera ensanchado demás sus espaldas y a pesar que cada año que pasaba desde que se casaron parecía crecer, contaba con la suerte de los Gi que siempre usaba, solo tenía que acomodar las prendas y listo, estas encajaban a la perfección en su figura, solo que con ropas tan holgadas no podía hacerse su tradicional moño, teniendo que optar por el cabello a semi recoger como un par de años atrás, con una coleta floja casi rosándole la nuca. Esa mañana había contado con la suerte de no existir muchas visitas a esa hora del día y por ello el cambio de turno del personal le venía como anillo al dedo, saliendo al compás de ellos solo llamando un par de miradas al salir, pero nada que no fuera opacado por la aun macha de sangre que existía en la acera frente al hospital, una mirada rápida había sido suficiente para detallar que el cuerpo de ese chico ya no estaba ni mucho menos ese platino colar.

"¿Dónde habrá terminado?"

Por inercia llevo su mano al pecho donde recurrentemente sentía el dije, agradeciendo a la deidad que la salvo de ser descubierta, había estado muy cerca, pero decidido seguir su camino apretando progresivamente la bolsa que llevaba en su mano, accionando poco después la capsula de su lindo auto rojo, subiendo rápidamente en él, sintiendo la protección de la superficie metálica donde parecía ser parte del panorama, nada más necesitaba ser transparente para sentirse completamente segura, sin nada que la incomodara. Encendió el auto manejando por la amplia avenida aprovechando la soledad por esas calles a esa hora de la mañana, tardando un poco en salir de la ciudad no importándole ir hasta la corporación Capsule, no en esas fachas, ya tendría tiempo después para hablar con el viejo Brief. Siguió manejando hasta la montaña, viendo el día mucho más luminoso desde su ubicación. Dejando el auto en la entrada de su casa y encaminándose a ella a paso presuroso, escaneando cada rincón al mismo ritmo que caminaba, asegurándose de no encontrar más sorpresas en el camino, suspirando pesado cuando ya se hallaba en la planta superior y sobre su cama con brazos y piernas extendidas, abarcando la inmensidad de está sintiendo la tensión en su cuerpo, como si solo el mullido colchón fuera suficiente para relajarla, uno de sus brazos subió hacia su frente para hacerse mucha más sombra de lo que en la habitación había, cerrando los ojos un par de segundos antes de soltar un suspiro.

Doble CaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora