siempre serás tú | TAEKOOK

18.

Taehyung

Me siento como un estúpido, no, lo soy.

Después de que Bogum saliera de la escuela, jamás había quedado más descolocado. Es como si le hubieran avisado que me estaba yendo perfectamente, para que viniera a arruinarme mi maldita cabeza.

Ayer Jimin me dijo que Jungkook se puso a llorar por la escena que monté con mi ex novio, y lo entiendo, lo entiendo mejor de lo que podría aparentar, pero mis sentidos en ese momento se nublaron. Yo no merecía eso, mucho menos él.

Flashback

-Adivina quien sooooy.

Me congelé, esa voz, esas manos, ese perfume...

Bogum, no, no. No puede estar pasandome esto, no.

-¿B-bogum?

-Así es, dulzura.- destapó mis ojos. Yo en serio no quería verlo. Y esa estupida palabra, maldición, odio no poder reaccionar.

-H-hola.- al fin lo encaré, pero aparte mi mirada de inmediato. Estoy muy incómodo.

-Niño, ¿me puedo sentar?

-Claro, yo ya me iba.

Perdóname, pero juro que no me puedo mover, siento tu mirada mi amor, pero estoy igual que tú.

-Amigo, ¿ya te vas? Quiero sentarme a platicar con mi novio.

Novio, ja, novio mis pelotas.

-¿Tu novio?

Kookie, mi amor, no cuestiones eso por favor. Quiero hablar, levantarme y darte tu lugar, pero estoy tan perdido que no puedo reaccionar ni a mis propios pensamientos.

-Sí. Amor, ¿no le contaste sobre nosotros?

Le diré todo lo que tengo en mi maldita cabeza en cuanto procese algo de lo que está pasando. Mi subconsciente me está jugando una muy mala pasada, estoy bloqueado hasta para parpadear.

De repente, me encuentro solo sentado con Bogum a mi lado. Se fueron todos de la mesa y nos dejaron solos. Qué mierda.

-Mi novio...

-¿De qué hablas, primor?

-¿Dónde está mi novio?

-Con que ese niño era tu novio, eh.

Imbécil, ¿qué acaso no se dió cuenta?

-Maldición, sí. Es mi novio.- dije con obviedad y molestia.

-¿Y qué pasó con lo que me prometiste? ¿Acaso ya no sientes nada por mí? Tae, yo te amo.

¡No! Carajo, no.

Yo estoy con Jungkook. ¿Qué putas preguntas son esas?

Sólo quiero ser feliz, sus palabras no me harán cambiar de opinión.

-No debí prometerte eso. Ahora alguien más ocupa mi corazón y no lo dejaré ir.- me levanté de la banca -Soy feliz, Bogum. Soy feliz con un chico hermoso que lo merece todo. Si me disculpas, tengo que retirarme. Espero que te vaya bien, cuídate mucho. Y por favor, si me amas como siempre me lo has dicho, me dejarás ser feliz.

Diciendo eso último, sonó el timbre que indicaba que había terminado nuestro descanso.

No vi a Jungkook en todo el día. Necesitaba su tiempo, se lo daría, además de una muy buena explicación.

Fin del flashback

Primero, decidí marcar límites con mi amistad con Bogum. Nos reunimos en una cafetería, no muy nueva ni conocida, no quiero que esto se confunda con una cita.

-La razón por la cual te contacté fue porque necesitamos marcar límites, ayer fui muy grosero contigo, pero fui sincero. En verdad soy muy feliz.

Él estaba serio y algo triste, lo delataba su mirada.

-Te entiendo, Tae. En serio pensé que regresando seguirías amándome como yo a ti.-

Qué equivocado estabas...

-Pasó mucho tiempo, mis sentimientos cambiaron en cuanto lo conocí. Me di una oportunidad de ser feliz, Bogum. Espero y tu también lo hagas.- le sonreí para aligerar el ambiente.

-Tienes razón, igual, gracias.

-¿Porqué?

-Por no romperme el corazón.- dicho eso, se puso de pie, pero le cambió su cara a una extraña, estaba sonriendo cierta malicia en el rostro -¿qué tal si sellamos esto con un abrazo?

Yo asentí, me paré y le di un abrazo. Cerré mis ojos y se dibujó una sonrisa en mi rostro, ese abrazo me dió paz. Significa que nadie podrá intervenir entre Jungkook y yo.

Abrí mis ojos separándome de él y desvíe mi mirada un segundo, un segundo en el que el alma se me fue del cuerpo.

Jungkook estaba mirándonos con lágrimas en sus ojos y cuando conectó su mirada con la mía, salió del lugar y comenzó a correr.

No, no, no

-¡JUNGKOOK!

Decidí seguirlo, pero en el momento en el que mis pies reaccionaron tropecé, perdería segundos de ventaja, pero me paré y seguí corriendo fuera del lugar.

No lo veía por ningún lado. No está, no, no. No puede ser.

Mi amor, ¿dónde estás?