Meses después estaba dentro del templo jedi, en una de las habitaciones, con el resto de mis compañeros, como nos había dicho el maestro Dooku, a la mayoría no los conocía, de hecho a casi nadie, ya que aunque estuvimos encerrados por mucho tiempo con el hombre malo, muchos no fueron muy simpatizantes conmigo o algunos cambiaban de lugar o incluso, habían sido llevado por las otras personas en ese planeta. Ahora, estaba teniendo mis estudios para entrenar como una jedi, pero al ser muy pequeña, siempre se empieza con lo básico, es decir, a leer en básico, escribir, a hacer ejercicios para nuestro entrenamiento futuro, pero aún estando con mis compañeros, nunca faltaba aquél que le encantaba buscar problemas y molestar a los menores. Por ejemplo había un niño llamado Roland Kross, yo al ser chica no sabía qué pasaba a mi alrededor, pero la primera vez que me topé con ese niño de diez años, me hizo una broma pesada, me ensució con salsa picante provocando que mi piel quedara irritada y la gran mayoría de los niños se burlaron de mí, haciéndome llorar. Supe después que estuvo castigado por al menos tres semanas, pero eso no lo detuvo a seguir haciendo sus burlas, hasta ahora no me lo he vuelto a topar, pero siempre estoy vigilando que no esté por los pasillos y si acaso se encuentra cerca, trato de buscar otro atajo, aunque luego se vuelva largo el camino; sin embargo, hoy no tuve tanta suerte.
- Vaya, vaya....¿qué tenemos aquí? - escuché la voz de quien he estado intentando evitar durante meses, volteé y mis ojos se abrieron al ver que ahora Roland no estaba sólo, sino que traía a otros dos de los bravucones - Xil, Jaei, ¿se acuerdan de la niñita cobarde que no pudo aguantar la salsa redvel? - los otros dos niños se rieron recordando mi primer acto de vergüenza, intentaba tomar para calmarme, pero era difícil teniendo a tres chicos más grandes que yo.
- La lloroncita, como algunos le llamaron - me llamó el niño Xil, apuntando su dedo a mi pecho, sentía que las lágrimas querían salir, pero pensé en lo que el maestro Plo me había dicho esa vez, no importa cuánto te ataquen, debes ponerte firme ante el reto y aceptar lo que venga, los que me hagan daño, son los que pagarán las consecuencias de lo que me hagan, pero en este punto, el chico que se llamaba Xil, me empujaba con su dedo hasta intentar tirarme al suelo - ¿quieres llorar, lloroncita? ¿Por qué no haces lo mismo que la primera vez?
- No le conviene llorar, Xil, la última vez que lo hizo, llamó la atención de uno de los maestros del consejo, lo que nos mantuvo en castigo por semanas - dijo Roland y se puso más enfrente de mí, para intimidarme, pero yo no me dejaba tanto - ¿qué te pasa, lloroncita? ¿Tienes miedo de enfrentar tu culpa?
- Lo que te pasó en el castigo, fue porque tú lanzaste salsa muy irritante a mi piel, dejándome en la sala médica por cuatro días - le dije segura, admito que era sorprendente para alguien de mi edad - no me culpes a mí y en segundo lugar, Roland.....ya no te tengo miedo, porque los muchachos como tú sólo tienen miedo a que no los acepten - los ojos de los tres se abrieron con sorpresa y sin demostrarles nada, yo también me quedé sorprendida de lo que dije, pero Roland no estaba nada contento.
- ¿Cómo te atreves a llamarme miedoso, mocosa? - su mano se volvió un puño y sabía que me iba a pegar, pero justo cuando iba a dar el golpe, se escuchó que alguien gritaba su nombre.
- ¡DÉJALA EN PAZ, ROLAND! - la cara de Roland se puso más tensa, siempre era tensa pero creo que al escuchar al otro niño se puso más todavía, cuando se acercó todavía más, pude reconocerlo de la vez en que lo vi en el hangar cuando nos habían traído aquí al templo la primera vez - ¡NO TE BASTÓ CON LA PRIMERA VEZ QUE LE HICISTE DAÑO! - su voz sonaba muy enojada y podía sentir algo extraño en su interior mientras se dirigía a Roland, pero su nombre, el maestro Plo me dijo cómo se llamaba, esperen, casi lo tengo.....
- ¿¡QUÉ HACES AQUÍ, ANAKIN!? - ése mero, Anakin Skywalker - ¿Vienes a presumir como siempre, siendo el héroe en todo? - le reclamó mientras se acercaba y cuando estuvieron frente a frente, los otros dos muchachos se hicieron para atrás, yo me imagino que no quieren tener más problemas, pero no entiendo para qué juntarse con él siquiera.
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Ahsoka y Plo Koon en una nueva familia
FanficAhsoka es una pequeña de tres años, que fue secuestrada por un pirata del borde exterior y la iba a usar como esclava en un mercado ilegal en Tattoine, pero antes de que lograra hacerlo, el maestro jedi Plo Koon, llegó bajo las órdenes del consejo a...