CAPITULO 11.

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Mina caminaba con Yaten rumbo a su casa, su mirada demostraba felicidad y como no podía estarlo si el hombre que ella amaba estaba a su lado es ese preciso momento. Pero algo no estaba bien algo dentro de ella tenía miedo, en el fondo ella sabía que su antiguo amor tenía algo que ver con eso.

-Mina está todo bien?- le pregunto Yaten al notar que ella, no hablaba.

- si, Yaten todo bien - sonrio amargamente, pensando en Armand. Mientras llegaba al pórtico de su casa – porque lo preguntas?

- has estado muy callada durante todo de este tiempo – susurro mientras se acercaba a ella para tratar de darle un beso.

- Mina... - susurro un joven alto, de tez morena clara, cabello negro azabache – podemos hablar?

Yaten voltio a verle con rencor y eso, lo confundía, jamás había odiado a nadie como a ese chico en ese momento.

-Armand...- susurro Mina con un hilo de voz mientras una lagrima traicionera corría por su mejía. Y sin darse cuenta camino hacia el y lo abrazo, ese emotivo abrazo. Ese pequeño gesto hizo que la sangre del peli plateado hirviera.

Yaten sin hacer ruido se marcho del lugar, sin decir nada. Su furia hacia que un fuerte dolor de cabeza nublara su vista y caminaba sin rumbo fijo.

-Armand, por qué?- dijo en un mormullo entre lagrimas. – que haces aquí?

-Mina yo creí que estabas muerta- dijo mirándola a los ojos – estas viva y estas aquí- susurro abrazándola fuertemente – no te dejare ir de nuevo, mina tu eres mi familia.

- no entiendo como...?- dijo se parándose de el- eres un guerrero de Andros?

Armand sonrio – Mina no, no necesitas hacer saber nada de eso – acaricio su cabeza – los recuerdos llegaran a ti poco a poco, tranquila no puedo decirte nada, no me es permitido.

Mina comenzó a llorar de nuevo, no podía controlar las lagrimas – no puedes volver aquí y hacerme esto- murmuro – no puedes aparecerte aquí, y mover mi mundo asi.

-Mina, siempre has sido como una hermana para mi – le dijo a cariando su mejilla – mi corazón siempre le a pertenecido a una solo mujer desde tiempos inmemorables y ella es... Eos – susurro – y tu mejor que nadie lo sabes. Siempre lo has sabido en el fondo. Desde que nos conocimos sabes que la amo. Incluso desde que la conociste sabes que ella es la única que me importa.

Mina reflexiono lo que Armand, le acababa de decir y el tenia razón, desde que conoció a Setsuna le tenía un poco de envía y coraje, envidia por que los pocos recuerdos o sueños que ella tenía era una Mina de niña y una Setsuna una adolescente, y era muy hermosa, su hermosa piel morena de Setsuna brillaba bajo el sol, para Mina era muy hermosa y ella quería ser igual a ella sin embargo en algunas cosas para su corta y tierna edad ella era un poco torpe. Ahora ella entendía que no eran sueños, si no recuerdos, pero el que más le dolía era su recuerdo era el a ver visto, una vez a Setsuna besando a Armand.

Sailor Moon El Ultimo EclipseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora