Eʟɪᴢᴀʙᴇᴛʜ Sᴡᴀɴ

003 "ᴀɴ ᴀɴɢᴇʟ ᴀɴᴅ ꜱᴜɴꜱᴄʀᴇᴇɴ"

Al ser nuestro primer día, al entrar al gimnasio, la escuela nos proporcionó un uniforme. Desgraciadamente solo quedaba un par de pantalones, que se me fueron entregados a mí. 

Bella refunfuñó y pasamos a los vestidores. Sabía que ella no iba a estar cómoda para nada, solo empeoraría su humor y su desprecio a este lugar, así que le entregué el pantalón y tomé el short que le habían dado a ella. 

—¿Qué haces?— inquirió desconcertada. 

—Puedes quedártelos tú, sé que así estarás más cómoda. Además se que no te has depilado las piernas hermana.— Lo último lo agregué para hacerla sonreír, y funcionó.

Me coloqué los shorts un poco ajustados, al parecer las tallas no habían sido correctas. 

Caminamos hasta la cancha, donde ya se estaban formando equipos. La entrenadora nos dio la bienvenida y nos puso a cada una en un equipo diferente. 

En estos momentos es cuando me alegraba bastante haber sido animadora en Phoniex. Bella había dicho que era una estupidez, pero sabía que no solo me mantendría en forma, si no que también podría sacarle provecho algún día; y ese día había llegado. 

Al haber sido animadora debía asistir a miles de partidos de diferentes deportes, y claramente después de tanto tiempo había aprendido observando.  

Mientras Bella me miraba con horror desde el otro lado de la cancha, yo intentaba explicarle la posición que debía adoptar para recibir el balón.  

El partido comenzó, mientras yo recibía el balón para que alguna de mis compañeras con más experiencia rematara, Bella era la presa de todo mi equipo. 

Fue cuando pidieron tiempo fuera que me acerqué a ella para ayudarla. 

—Debes mantener los brazos firmes, así.— Ella imitó mi acción pero realmente si el balón llegara a sus brazos probablemente se los quebraría— Muy bien hermana, solo manténte alejada de la red, y en el segundo tiempo tú y yo vamos a escaparnos a los vestidores. Después de todo hay que asearnos, debemos apestar por el sudor. 

—No tenemos toalla o si quiera jabón Beth.

—Supuse que tendríamos gimnasia en algún momento del día, así que dejé las cosas en la camioneta. Iré por ellas cuando escapemos. 

Bella asintió y regresó a su posición en la cancha.  El partido volvió a iniciar y esta vez Bella fue masacrada en la cancha, una de mis compañeras la golpeó fuertemente así que fui corriendo a socorrerla. 

—Creo que fue suficiente por el día de hoy. — anuncié , mientras la ayudaba a levantarse. 

—¿Estás bien?— inquirió un chico rubio mientras se acercaba a ambas. 

—Sí, no ha sido nada.— respondió mi hermana tomando mi brazo para levantarse.

—Soy Mike, Mike Newton, y ustedes deben de ser Isabella y Elizabeth— Fue más una afirmación que una pregunta, todo esto lo dijo mirando no tan disimuladamente mis piernas. 

—Oye, oye, mis ojos están aquí arriba chico.— Le dije agitando mis manos para llamar su atención.