C.C. [Seongjoong]

Bañeras y viajes sorpresa.

Es así como ahora ambos se encontraban dentro de la bañera de aquel baño. El espacio dentro de ella era reducido, pero no en demasía, así que ambos podían relajarse mientras se veían uno frente al otro sin necesidad de sentirse incómodos.

Seonghwa se dedicaba a proporcionar un pequeño masaje al cuero cabelludo de su novio mientras este le contaba lo que había sido de su día. Una vez que terminó con el masaje, se deshizo de la espuma provocada por el shampoo de este, para ahora proceder a simplemente pasar agua por las extremidades que no alcanzaban a ser cubiertas por el nivel de agua en aquella tina.

Luego de eso decidieron tomar un pequeño momento para relajarse de todo el estrés y problemas que habían ocurrido en ese día o anteriormente, así que cada uno recargó su cuerpo en una de las paredes de la tina y se quedaron en silencio por un momento. Ambos se miraban sin emitir palabra alguna; solo admiraban las facciones del contrario en silencio. Se echaban de menos; pese a que se veían todos los días, hace semanas que no compartían un momento tan tranquilo e íntimo como ahora. Se sentían felices por poder pasar sus últimos momentos con dos años de relación juntos y despiertos.

En algún momento se dieron las doce en punto; el teléfono de Seonghwa se los indicó al sonar, ya que el dueño del aparato había establecido una alarma que le haría saber cuando el momento llegara por si no estaba junto a Hongjoong, o si se quedaba dormido.

Una vez que apagó la alarma, se giró a donde estaba su novio y le sonrió de la manera más feliz que había. Su novio correspondió de la misma manera.

-Feliz tercer aniversario, Hwa.
-Feliz aniversario, Joongie.

Ambos se acercaron, eliminando la distancia que estar en ambos extremos de la tina representaba para acto seguido, besarse. El beso fue corto, pero fue suficiente para trasmitir sus sentimientos al otro.

Una vez separados, Seonghwa habló.

-Creo que deberíamos salir pronto de la tina; es tarde y probablemente no quieras despertar temprano en la mañana. - Dijo con simpleza.
-¿Pero por qué?- Se quejó. Quería estar más tiempo con su novio; había pasado suficiente tiempo sin él a su lado como para que encima quisiera ir a dormir tan temprano. -Es sábado, Hwa; yo no tengo escuela y tú no tienes que ir a traba...- Hongjoong dejó sin terminar su oración. Bajó su cabeza para después formar un puchero imperceptible, o al menos eso creía él, ya que Seonghwa apenas lo vio, tomó la mano sana de su novio y la jaló un poco para que este le prestara atención.
-Hong. Bebé.- Sin embargo, su novio insistió en permanecer con la cabeza baja así que, sin más, continuó con lo que tenía que decir. -Joongie, escucha. No, no tengo que ir a trabajar ningún turno; ni el de la mañana, ni el de la tarde. Los dobles turnos diarios se han acabado.- Hongjoong entonces se permitió alzar la cabeza para comprobar si lo que su novio le decía era verídico y no se trataba de una broma.
-¿Lo dices en serio?- Preguntó lleno de ilusión en su voz. Seonghwa sintió a su corazón hacerse chiquito ante la mirada llena de brillo de su novio, así que consideró que sería buen momento para contarle sobre su salida.
-Es muy en serio, Joongie. En realidad te he dicho lo de salir pronto de aquí porque en la mañana partiremos a casa de tus padres.- Hongjoong se mostró completamente sorprendido ante la respuesta de Seonghwa.
-¿Eh? ¿Estás de broma?- Inquirió ahora un poco descolocado. -Si estás bromeando me voy a molestar mucho, Seonghwa.- No planeaba sonar tan severo como lo hizo; es solo que el pelinegro sabe lo mucho que extraña a su familia, y el recordatorio indirecto de que no tenía las posibilidades para permitirse ir con ellos que acababa de recibir le había molestado.
-Nada de eso; sabes que no tendría por qué bromear con esto, bebé.- Aclaró para después proseguir. -He planeado un itinerario para los cuatro días que pasaremos allá, tomando ventaja de que regresas a clases hasta el miércoles y no tienes proyectos pendientes. Porque tomé eso en consideración antes de planear el viaje, no te preocupes. Aunque... Bueno, en realidad tus padres me ayudaron en gran parte con la planeación; ¿sabes? Ellos se ofrecieron a darnos hospedaje todo el tiempo que nos quedemos.- Comentó con alegría mientras Hongjoong solamente lo veía con una expresión que no supo definir. -Oh, cierto. Es buen momento para confesar que el viaje es la razón por la que estuve trabajando doble turno el último mes; quería asegurarme de tener el suficiente dinero para cuando nuestro aniversario llegara y, si me permites presumir, después de eliminar el gasto del hospedaje, me atrevo a decir que nos queda dinero adicional para después. Y la mejor parte de todo es que yo no tengo que volver a la cafetería sino hasta el próximo lunes. Verás, Chris me dio una semana en compensación por todo un mes cubriendo dos turnos; dice que fue de gran ayuda para él y el personal de la cafetería. ¿No es genial? Podrás ver a tus padres, podremos estar más tiempo juntos y no tendremos que preocuparnos tanto por el dinero, Joongie.- Paró de hablar cuando notó que Hongjoong seguía mirándolo sin expresión alguna. En su mente imaginó algo distinto a la mirada perdida de su novio cuando le contara sobre la salida. Entonces se preocupó. -¿Hongjoong? ¿Todo bien?- Los ojos del mencionado empezaron a derramar un par de lágrimas que se habían acumulado mientras escuchaba a su novio hablar.

Seonghwa al percatarse de eso, hizo el amago de acercarse para limpiar dichas lágrimas, pero Hongjoong fue más rápido y, de alguna manera, se colocó encima de su novio dentro de la tina. Rodeó su cuello con sus brazos y repartió varios besos efímeros en los labios del contrario para proseguir con el resto de su rostro y así llenarlo con más besitos; se aseguró de no dejar ninguna parte de su rostro sin uno. Se separó momentáneamente para ver el rostro de su amado. No podía creerse todo lo que su novio había hecho solo para poder complacerlo por su aniversario.

-¿Qué hice para merecer a alguien como tú?- Dijo Hongjoong con una sonrisa enorme.
-Eso debería preguntarme yo.- Le sonrió mientras tomaba su mano herida con cuidado y acariciaba el dorso de esta. -Y aunque no estoy seguro de la respuesta, sé que haría lo que fuera para hacerte feliz, porque el mero hecho de tenerte a mi lado sabiendo que correspondes mis sentimientos me convierte en el ser más afortunado en la faz de esta tierra.- Hongjoong rió.
-Cursi.- Golpeó con suavidad el pecho del contrario y sonrió mientras su novio depositaba un beso en su nariz.
-También te amo, Hongie.

Hongjoong vaya que amaba al chico frente a él.

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Originalmente esto se centraba en el corte con el cutter, pero a veces planeas una cosa y sale otra distinta. Igual no me desagrada el resultado (¿?).

En fin, espero que les haya gustado leer esta historia. Si tienen algún comentario al respecto, adelante.

Nos leemos luego.

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