Narra Lola.
Hoy es un día soleado, hace calor, bastante en realidad. Me desperté temprano, me levanté y fui a ducharme, dejando a Oscar solo en la cama. Cuando salí me puse un lindo conjunto, me peiné y me maquillé un poco, algo super natural.
Salí de la habitación, después de llamar a Oscar, hice el desayuno. Cesar debía estar en camino, o no lo sé.-Buenos días princesa- dice besándome
-Buen día cariño- respondí luego de separarnos, el tomó asiento a mi lado
Desayunamos mientras hablábamos de muchas cosas. Yo estaba feliz, me gusta estar con Oscar.
-Oscar, hay un tipo parado afuera- dice Cesar entrando rápido a la casa
Oscar se levanta rápidamente mientras agarra su arma y sale afuera. Cesar y yo lo seguimos.
-QUE VUELVAN ADENTRO, AMBOS- dice Oscar empujando a Cesar
Nosotros nos quedamos ahí parados, pero el se detiene, mientras se queda mirando al hombre.
-¿Quién es él?- pregunta Cesar
-Es nuestro padre- responde Oscar
Hicimos que entre en la casa, él se sentó en la mesa de la cocina mientras fumaba un cigarrillo. Nosotros estábamos sentados en el sofá.
-Voy a la habitación, estoy de vacaciones pero debo organizar unos archivos- dije levantándome, Oscar se levantó también, besó mi cabeza y luego me fui
Después de organizar todo, era casi la hora de almorzar. Así que fui a la cocina. Pero Oscar no estaba. Su padre estaba en el sofá.
-No me presenté, soy Ray- dijo acercándose a donde yo estaba
-Soy Lola- respondí sonriendo
-¿Eres de la pandilla?- preguntó
-No, no soy de la pandilla- respondí con una pequeña sonrisa
-¿Y cómo conociste a Oscar?-volvió a preguntar
-Mi nueva hermana, Monse, es amiga de Cesar, por ella conocí a Cesar, y luego conocí a Oscar- respondí- Por cierto, ¿Donde está el?- pregunté
-Salió, con un chico de la pandilla, iban a resolver algo- respondió
-¿Quieres comer algo?- pregunté
-Si, gracias- responde
Yo comienzo a cocinar, algo rápido, pues tenía hambre, y mucha, supongo que Ray también.
Olvidé algo, voy a comprar un auto, con lo que he ahorrado en mi trabajo, me alcanza para comprar un auto muy lindo, pero debo esperar a que me llamen para cerrar el trato y traer el auto.
Cuando terminé de cocinar, lleve la comida a la mesa y nos sentamos a comer. Estuvimos hablando un poco, no es una mala persona, solo tomó las decisiones equivocadas, creo que merece una oportunidad. Al terminar, él se sentó en el sofá mientras yo limpiaba la cocina y lavaba las cosas sucias.
Justo cuando estaba por sentarme junto a Ray, me llamó la mujer que me ayudó con lo del auto, debía ir a cerrar el trato. Llamé a un taxi, y fui a buscar mi cartera, con el dinero dentro de ella. Cuando llegó el taxi, me despedí de Ray y salí de la casa.
Al llegar al lugar, estaba la señora esperándome. Nos saludamos y entramos, me hicieron firmar el contrato de la venta, y luego me dieron los documentos para el auto, estaba todo en orden.
Me despedí de las personas que estaban ahí, y me subí al auto, para luego ir a casa. Al llegar, bajé del auto y entré a la casa.
-¿Donde estabas? Me preocupé, te llamé y no contestaste- pregunta Oscar apenas entró
-Lo siento, mi teléfono estaba en silencio, y yo estaba comprando el auto- respondí
-¿Lo compraste?- preguntó y yo asentí- ¿Está aquí?- volvió a preguntar
-¿Quieres verlo?- preguntó ahora yo y él asintió- Pues vamos, está afuera- dije y ambos salimos
-Es hermoso, me encanta, tienes buen gusto- dice viendo el auto
-Lo sé, te elegí a tí, así que seguro tengo un buen gusto- respondí sonriendo, y él solo ríe
Entramos a casa, luego de guardar mi auto, y nos sentamos en el sofá.
-Lo siento por irme y no avisarte, era algo urgente, perdóname- dice Oscar
-Está bien, lo entiendo- respondí mientras lo abrazaba, en verdad amo a este hombre
-Pero de todas formas no debí dejarte sola con Ray- vuelve a decir
-Dije que está bien, además pudimos conocernos- respondí
-Bien, pero igual lo siento- dice con una sonrisa
-Okey- respondo riendo un poco
Nos quedamos abrazados por un largo rato. Hasta que decidimos hacer de cenar, ambos teníamos un poco de hambre, y yo estaba cansada, seguro Oscar también.
Cenamos entre muchas risas, de parte de ambos, en realidad nos reíamos de cualquier cosa, parecíamos borrachos. También hablamos, de cualquier cosa, Oscar me contó sobre su infancia, sobre Ray y su madre. No tuvo una vida fácil, y ahora tampoco la tiene.
Estábamos cansados, así que después de limpiar la cocina, fui a ponerme mi pijama y luego me acosté al lado de Oscar. El me abrazó, y así dormimos toda la noche, juntos.
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Hola babys! Espero que se encuentren super super super bien!! Gracias por votar y comentar, alegran mi cuarentena!! Besos y abrazos❤😄😙
PD: Aquí les dejo una imagen del auto que Lola se compró, para que se lo imaginen un poco, pero si no les gusta, pueden imaginarse el que ustedes quieran❤❤(Tengan en cuenta que no puede comprarse un Lamborghini).