❛ déjame amarte con todas tus imperfecciones ❜
Cara bonita y mente de demonio, Natsuki Watanabe era el mismísimo arcángel.
Llevando seis años trabajando para el Gobierno japones, es asignada de forma involuntaria a la misión de asesinato de un ser o...
NATSUKI ENTRÓ a la clase y todas las miradas recayeron en ella:
- Buenos días.- Dijo adormilada, llevaba su uniforme de educación física y había recogido su pelo en una coleta larga.- ¿Por qué estáis con el uniforme? No me digáis que me he equivocado de día.
- Que va- negó Nagisa acercándose a ella.- ¿Cómo te encuentras?- Preguntó haciendo referencia al resfriado que había tenido días atrás.
- Lista para ganar a esas pijas en el partido de voleibol.- Nagisa rio.
- Desde luego estás mucho mejor.- Koro-sensei apoyó uno de sus tentáculos en la cabeza de la joven.
- Me alegra verte de vuelta, Natsuki.- La joven sonrió.
- A mí también, la sopa que me trajo ayer estaba deliciosa. Muchas gracias.- Tras una última sonrisa se acercó a Karma y Nakamura.- ¿Lista para ganar, mi niña?
- Por supuesto.- Nakamura chocó los cinco con Natsuki y en ese mismo momento, Karasuma entró al aula.
- Cambiaos, en diez minutos iremos al campus principal.
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- MUCHA SUERTE.- Le susurró Natsuki a Karma antes de alejarse para ir con el grupo.
- ¡Lo mismo digo!- Las chicas se encaminaron hacia el salón de actos con Irina mientras los chicos caminaban hacia el campo de baseball listos para ganar al equipo del instituto.
Nada más entrar al salón vieron que las chicas del equipo ya las esperaban, todas con miradas de superioridad que Natsuki se iba a encargar de bajar.
- Acabemos con esto...- Susurró Natsuki colocándose para sacar.
El arbitro pitó y el partido comenzó, Natsuki no podía negar que el equipo contrario era bueno, pero ellas tampoco se quedaban atrás. Realmente, las otras chicas no iban a ganar, sino a ver a quien podían golpear en la cara.
- ¡Eh!- Gritó Natsuki de repente al ver como la pelota había rozado su oreja- ¿Eso no es falta?- El árbitro pitó y paró el juego.
- Yo diré cuando es falta y cuando no. ¡Se reanuda el partido!- El silbato volvió a sonar y Natsuki frunció el ceño. Estaba decidida a ganar.
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