Bu Wang

Campaña Sunshot. Parte 1

La guerra era tal y como se suponía que debía ser, la muerte estaba en todos lados, ambos bandos perdían gente en cumplimiento, era un infierno pero sabían que para la paz debían entrar al infierno primero y después gozar del paraíso, es por eso que las estrategias eran claras, meticulosa hasta donde se pudiera, la alineación en el campo de batalla era importante y debían trabajar en equipo, en esta guerra debían salvarse el uno al otro mientras avanzaban hacia el enemigo.

Aún cuando había pasado un tiempo, habían atacado a los Wen y recuperado las espadas, para ese tiempo la secta Lanling Jin aún no se había unido a ellos, pero sabían que primero debían demostrar que eran los que saldrían victoriosos si querían su apoyo, para eso Wei WuXian necesitaba un plan en caso de fallos y aunque intento idear un plan para secuestrar a Jin ZiXuan al final no pudo, después de todo ese pavo real no sería de ayuda, es por eso que comenzó a practicar más su cultivo demoníaco en la noche, a veces hubo riesgo de que MengYao lo descubriera ya que el pequeño hombre era la mano derecha de Nie MingJue y solía vigilar a Nie HuaiSang como orden del líder, afortunadamente Wei WuXian nunca fue encontrado en el acto pero sabía que no faltaría mucho para aquello.

Una vez recuperada sus espadas, la lucha fue aún más ventajosa para ellos aunque no fue suficiente. Por su parte, Wei WuXian quería utilizar su espada como un conductor de energía resentida, si bien su cultivo demoníaco ahora era bastante, temía que afectará su núcleo dorado por lo tanto intentaba canalizarlo en Subian.

Una noche de luna llena, se encontraba intentando controlar su poder y canalizarlo de alguna manera pero en el fondo de él temía que Subian se viera afectada y que algo saliera mal. Sus ojos rojos brillaban y la energía resentida flotaba como pequeñas nubes a su alrededor, si bien había logrado ingresar un poco en Subian y está había logrado cortar más rápido a los soldados cadáveres de Qishan Wen, aún no era suficiente.

—Wei Ying.

La voz del jade llegó a sus oídos, con el corazón latiendo a mil minutos por horas, sus ojos aterrorizados cayeron en la persona de túnicas azules, el segundo joven maestro Lan vestía nuevamente una túnica azul celeste, su cinta de nubes decorada con el pequeño jade brillaba a la luz de la luna. Sin siquiera pensarlo Wei WuXian trago saliva, no sabía cómo sentirse en ese momento ya que quería admirarlo un rato pero al mismo tiempo quería huir.

—L-Lan... Zhan...

El llamado fue un tembloroso susurró, la espada en su mano fue apretada ¿Por qué Lan WangJi tenía que encontrarlo? No sabía cómo explicarle lo que estaba sucediendo.

Lan WangJi miró el miedo en los ojos ajenos, suavemente se acercó pero Wei WuXian se alejo la misma cantidad de pasos. El chico de morado tembló por un momento.

—no te acerques... Lan Zhan no te acerques.

—Wei Ying.

—¡No! Sí te acercas... Si lo haces... —encogiendose en el lugar. —te teñiras... No puedo permitirlo...

Lan WangJi conocía esa parte de Wei WuXian, la había visto cuando estaban en los túmulos funerarios. En ese tiempo Wei WuXian aún huía con los remanentes del clan Wen y solía quedarse despierto temiendo que los cadáveres feroces que cuidaban el lugar se salieran de control o que los sellos colocados fallarán, en ese tiempo Wei WuXian estaba alerta de todos y todo, al grado que sin saberlo alejaba a las personas que se preocupaban por él.

—Lan Zhan ¿Por qué estas de nuevo aquí?

—Wei Ying no puedo dejarte solo.

—en ese momento. —sonriendo suavemente. —supe que realmente estábamos destinados pero ¿No lo entiendes? Aunque nos amemos yo soy el mal de aquí.